Nala
Estoy que me subo por las paredes de la furia y la ira que tengo; no sé quiénes se creen que son para decirme lo que tengo que hacer con mi vida y encima su madre me habla con su estúpido todo condescendiente.
Como si ya no tuviese suficiente con todo lo que está sucediendo a mi alrededor, ahora quieren que me sienta responsable de todo lo malo que pasa, cuando solo quiero enterrar a mi hermana y dejar de sentir todo lo que estoy sintiendo.
Me siento en la cama de Ónix y de inmediato percibo su olor y de manera inconsciente tomo su almohada y la llevo hasta mi nariz y aspiro llenando mis fosas nasales de su magnífico olor.
¿Pero qué diablos me pasa?
— ¿Qué estupideces estás diciendo? ¿De qué profecía y de qué hijo hablas? — Le grito y vuelvo a empujarlo, pero a pesar de que utilizo toda la fuerza que puedo, no logro moverlo del lugar.— Hablo de Amara y del alfa Ónix — Me llevo la mano al vientre y siento de nuevo el vacío de Amara por perder a su hijo.— No entiendo lo que dices, eso nunca pasó, solo estaba en mi mente — Frunzo el ceño, porque al parecer, Ónix sabe que es lo que me está sucediendo.— Sucedió, hace siglos y al parecer, yo soy un descendiente del alfa Ónix — Me dice y la seriedad de su mirada me hacen ser consciente de que cree lo que está contándome.— Déjame respirar — Le pido y él se aleja de inmediato.Me llevo la mano a mi pecho, donde mi corazón late acelerado. Si la historia entre Amara y Ónix es verdadera, entonces lo que me pasó con el hombre sin esencia también lo es.¡Oh por Di
— ¡Maldición! Sal de mi cabeza — Le grito y me vuelvo hacia él y lo empujo.— El alfa puede comunicarse telepáticamente con su luna, que quiere decir, su pareja destinada — Me dice con tranquilidad.— ¿Y solo puede hacerlo con ella? ¿Con su pareja destinada? Dime la verdad — Pregunto intrigada y molesta; empieza a cansarme con eso de la pareja destinada, eso ni siquiera es amor.— Puede hacerlo con personas cercanas; por ejemplo, yo puedo hacerlo con Lorenzo y Alondra, pero debo estar cerca a ellos. Cuando cambiamos de forma podemos comunicarnos de esa manera entre lobos — Lo miro con fijeza, no quiero que me mienta.— Bueno, entonces Alondra podría ser tu pareja destinada — Me tranquilizo al pensar que puede comunicarse con otra mujer y puede casarse con ella.Aunque de inmediato pienso en Lorenzo y en lo que acaba de pasarle a Alondra que quizás no podrá tener hijos y me doy cu
Nos encontramos en un amplio corredor, bastante alejados del salón, desde donde se escuchan algunos murmullos. Al parecer han llegado más personas, así que hablo bajo, porque no quiero que nadie se entere de esto.— ¿Y yo debo tirar mi vida por la borda y hacer lo que no quiero porque tu lobo ha decidido que yo sea tu pareja? ¿Eso no te parece un capricho? ¡Ni siquiera me amas! — Le digo bastante afectada e intento contener mis lágrimas.— No estamos hablando de amor, esto es algo más allá, es nuestra responsabilidad, nuestro destino. ¡Debemos hacerlo! — Me dice.— Yo no debo hacer nada que no quiera; yo quiero amor, quiero casarme por amor y con alguien que no desee tener hijos, como yo — Le repito mientras me limpio una lágrima traviesa.— Podrías reconsiderarlo — Me dice.Parece cansado y que se ha dado por vencido, es que no lo entiendo. Quiere destrozar su vida por algo que
Cuando logro llegar hasta las últimas casas del pueblo, todas las personas de la manada están terminando de apagar el fuego y puedo observar la destrucción que el fuego ha creado por doquier.— ¿Dónde está Arcas? — Observo por todas partes y mi corazón se acelera — ¿Ónix? — No logro ver nada, el humo ensombrece todo.“Nala, tranquila. Estoy con Arcas”Escucho la voz de Ónix resonando en mi cabeza y empiezo a buscarlos entre los escombros.— Nala, tenemos que irnos — Siento el momento en el que Ónix entrelaza mis dedos con los suyos y se dirige hacia un auto.— Ónix, hay muchos heridos, debemos llamar a las ambulancias, ayudarlos. No podemos irnos de esta manera — Hablo con urgencia, mientras Ónix abre la puerta de una camioneta cuatro por cuatro.— ¡Sube! — Su tono imperativo me molesta de inmediato.— Espérate ¿Dónde está Arcas? Me dijis
— Hoy en realidad no sería un matrimonio, es más como un ritual. Sin embargo, tendremos que legalizarlo después, para crear sospechas sobre la manada — Me Vuelvo a mirarlo, sin comprender que desea que hagamos. — ¿Qué decides?— ¡Hagámoslo! Pero no pienses que tendrás derecho a decidir por mí o …— Cállate, Nala. Necesito concentrarme para no cambiar de forma durante algunas horas más, y es bastante agotador. — Me dice mientras pone en marcha el auto y lo miro con bastante intriga.La luna empieza a salir y en la carretera no se observa ni un alma.— ¿Qué hace la gente de la manada en la luna llena? — Le pregunto con curiosidad.— Algunos cazan, pero la mayoría de nosotros tenemos sitios subterráneos y blindados en los que nos encerramos hasta que amanece. — Asiento y observo a mi alrededor.Ónix detiene el auto y desciende de este y mientras saldo de él, lo
Me dejo llevar por Ónix y lo observo mientras dispone una gruesa manta dorada sobre el suelo de hierba y toma mi mano y empieza a hablar de una manera incomprensible con la mirada fija en la luna.Siento con intensidad su olor y cada roce de sus dedos en mi cuerpo, como si me estuviese marcando con fuego.— ¿Qué has dicho? — Pregunto intrigada, mientras Ónix continúa observando a la luna, tomado de mi mano.— Le pido a la luna que sea el testigo de nuestro enlace y que sea quien marque esta unión — Aprieta mi mano y me mira guiñándome un ojo.— ¿Qué marque nuestra unión? — Espero que no vaya a decirme que debemos hacer un pacto de sangre o algo así.—Ya lo verás — Vuelve a retomar su expresión de seriedad.Sé que está preocupado por la posibilidad de que esto no funcione y por tener que controlarse y no cambiar de forma.Ónix me lleva hasta el centro d
Olvido lo que estoy pensando cuando la boca de Ónix recorre con su humedad mi vientre y se detiene en mi ombligo.Llevo mis manos hasta su cabello y tiro de él como respuesta a las sensaciones que su boca deslizándose por mi pelvis y mi centro me hacen sentir.Él se apodera de mi centro sin compasión, toma todo de mí que contraigo mi vientre y crispo los dedos de mis pies contra la manta.Mi cuerpo se contorsiona mientras Ónix bebe todo de mí, sin piedad, sosteniendo con fijeza mis caderas.— ¡Oh por Dios, Ónix! Voy a correrme — grito sin poder controlarme y presiono su cara contra mi vagina.Continúo gritando mientras mi interior explota ante la lava, deslizándose con fuerza en mi interior.— Ónix, tómame por favor, cógeme ¡Ahora! — Un segundo después siento una mano de Ónix presiona mi entre muslo, mientras desliza su cuerpo sobre el mío.— Nala ¿Est
Mientras las manos de Ónix se deslizan por mis senos y mi vientre y yo contraigo mi centro atrapando con fuerza el pene de Ónix, muevo mis manos y brazos frente a mis ojos y abro la boca sorprendida al observar como estos brillan igual que las flores a nuestro alrededor.Un brillo dorado y resplandeciente se proyecta desde mis brazos y manos, bajo mirada a mi vientre y mis piernas y estas brillas de la misma forma.¿Qué diablos está pasando?— Ónix, ¡estoy brillando! — Exclamo impresionada, mientras intento calmar mi respiración y mis senos se mueven al ritmo de esta — Tienes una marca en tu cuello — Me inclino y Ónix cierra mi cuerpo contra el suyo mientras inclino mi cabeza y observo su marca.Empiezo a sentir un poco de ardor en mi cuello y lo toco sintiendo una protuberancia en mi cuello, que quema un poco.— Tu también tienes la marca — Susurra Ónix dejando pequeños besos co