No me he movido de este lugar, quiero pararme, ir al baño a limpiarme, pero no tengo fuerzas ni emociónales y físicas... Ese sueño, el amor se está yendo de mi vida en todos los aspectos, las ganas se me están terminando. Ya no soy ningún ejemplo, soy un asco, ya no sé cómo luchar, ya no sé qué hacer. Quiero irme de aquí. —Haz pasado mucho tiempo en esa cama, necesitas comer. Dice Erick entrando a la habitación. Yo no digo nada. Ni siquiera volteo a verlo. No puedo. —Nicole contesta por favor. No me hagas enojar. —No tengo hambre, muchas gracias —digo acatando rápidamente su regla. —¿Piensas quedarte así más tiempo? —No lo sé, tal vez sí, no me siento bien. —Nos vamos a casa en cuestión de horas, no quiero, ni deseo que estés así, necesito que me obedezcas y hagas lo que se te pide, y ahora quiero que te pares, cambies y estés lista para lo que yo deseo, o ¿quieres verme enojado una vez más Nicole? No creo poder soportar tan rápido un castigo de esa naturaleza, o de cualquier o
Caminamos no más de 5 minutos llegando a un restaurante a la orilla de la playa, no he hablado para nada, Erick me toma de la mano en cuanto bajamos del barco. Erick solo me dice unas palabras que son la razón por la que me he quedado callada.—Nos vamos a reunir con mi mejor amigo Nicole, tienes que ser igual de correcta que conmigo, él es el que me consiguió el barco. Él comprende nuestra situación.Lo miro de reojo. ¿Su mejor amigo sabe de esto? Adiós ayuda, adiós escape, adiós vida. No, alto. ¿Él sabe? Y ¿cómo es que no le ha dicho algo de que esto es completamente incorrecto? ¿Cómo puede aceptarlo y sobre todo apoyarlo? ¿Cómo es que no piensa en mí? ¿En lo que su amigo puede estar haciendo conmigo? ¿Cómo puede apoyarlo?Mis esperanzas cada vez son menos. ¿Será que en este punto debo de aceptarlo y aprender a vivir de esta manera? ¿Será que este es mi destino?De pronto llegamos, salgo de mis pensamientos para nuevamente fingir ante alguien desconocido para mi. Su amigo es muy par
La puerta se abre, me le quedo observando directamente, está Erick en la entrada, ahí en el umbral, esperando quien sabe que, me mira, se enoja, pero no viene hacía mí, sino me comienza a gritar.—¿Qué carajos crees que haces? ¿Por qué te estás tocando sin mi permiso?Mi cara es de desconcierto, ni siquiera sabe que estoy haciendo y me reclama, solo está suponiendo pero aun así decide gritarme.—¡Respóndeme Nicole! —dice mientras yo me quedo congelada ante su presencia—. ¡Hazlo! —grita aún más fuerte.—No me estoy dando placer si eso es lo que piensa, de verdad Señor, no lo hago —digo con la voz temblando y con miedo —Erick me mira confuso.—¿No? Y ¿Entonces qué haces?—Anoche —tomo una gran bocanada de aire antes de hablar—. Anoche me lastimó, me duele mucho la entrepierna, así que vine a buscar un ungüento y a ponérmelo para intentar ayudar a mi dolor. —Erick me mira confundido.—¿Y crees que un ungüento te va a ayudar?—No lo sé, Señor, tal vez sí, estar sentada hace rato en el res
Es tarde, muy tarde, con la diferencia de 10 horas de la isla y casi 20 horas de vuelo, han pasado casi dos días desde que empezó el regreso “a casa”, el amigo de Erick, James, se fue en otro automóvil cuando aterrizamos, Erick sigue sin hablarme lo cual ha sido algo tanto bueno como malo, pero al final de todo sé que de una u otra manera me dirá que hice mal, a sus ojos.Al llegar a casa espero a que él me de instrucciones lo cual no hace, solo me ordena bajar en segundo momento, él lo realia primero. Bajo detrás de él, lo hago con cuidado, tengo el pubis demasiado adolorido a ese punto, luego de tantas horas. Solo deseo quitarme toda la ropa meterme en la bañera para ayudar a mi cuerpo a sanar y buscar una maldita solución con lo poco que tengo. Pero los planes de Erick siempre terminan siendo diferentes a los míos.Camino dentro de la casa, Efrén lleva las maletas, unas al cuarto de Erick otras al mío. Las mías están fuera del cuarto, me extraña, pero no tanto, tal vez él desea que
Me llevo la mano a la mejilla y solo asiento con la cabeza gacha, Erick sigue ganando.—Cada que tengas la necesidad vas a ir a la puerta y ese será el único momento que yo te dejaré hablar, si estoy en la casa escucharé cuando me llames, pero si yo no estoy, tendrás que esperarte.Una lágrima cae por mi mejilla, ¿me está bromeando seguramente? ¿No voy a poder ni siquiera ir a hacer del baño sin pedirle permiso? ¿Por Dios, hay días en los que él no está? ¿Cómo le haré?—Sé que estás pensando, cuando salga varios días la puerta estará libre y no pedirás permiso, pero te avisaré con anticipación para que estés preparada para mi salida, quiero que estés limpia, depilada por completo y desnuda cuando venga aquí.Sé que esto apenas comienza, sé que tiene planes, sé que esto va a ser peor de lo que me he imaginado.Las lágrimas siguen brotando, con cuidado de no hacerlas muy notorias me las limpio, pero sé que es del todo imposible.—Nicole, Nicole deja las lagrimitas y acepta las consecuen
Sigo en shock por lo de anoche, apenas y he podido dormir y sobre todo apenas puedo entender el ritmo de Erick, apenas puedo asimilar la situación, apenas puedo dormir, apenas puedo vivir…, apenas.No sé qué horas son, no sé si ya amaneció o anocheció, no sé en qué carajo momento va a venir, me ha dicho que prenderá las luces fuertes, por ahora solo están las luces medias y la de la mesa de noche, sigo sucia, quiero ir al baño y sacar todo esto de mí, pero por otro lado no quiero pedir permiso para poder entrar al baño, no puedo, supongo que por eso sigo así, humillada y en la cama sin haberme movido más que para cubrir mi cuerpo con la tela del vestido lo más que puedo. Mi clítoris y vagina sigue doliendo, no he podido reposarlo, no he podido cuidarlo, de verdad necesito tomar un baño, me es bastante urgente. No quiero debatir con mi cabeza, necesito un baño, uno de verdad, necesito llorar debajo del agua y tratar de llorar todo lo que estoy sintiendo. No voy a competir con él, no pu
Después del baño que tomo, me pongo lo que Erick ha dejado en la lista de ropa para usar, me preparo y trato con maquillaje de borrar lo que sus golpes me han hecho, trato de ser lo más obediente que puedo ser, al final y por fortuna para mí, no regresa, lo cual aprovecho para dormir y no abrir los ojos a la realidad que tengo enfrente, sé que en otras circunstancias me hubiera ido a hacer ejercicio, pero no tengo los ánimos suficientes y al final termino dormida.Sé que he dormido demasiado, de eso estoy segura, recupero algunas de las fuerzas perdidas por el vuelo y logro el no pensar en lo sucedido, pero finalmente me despierta una luz, al abrir los ojos me percato que toda la habitación está iluminada, me levanto un poco confundida y extrañamente cansada así como perdida por la luz que irradia demasiada intensidad sobre mis ojos. Me encandila la luz, estoy perdida y ajena a la situación, pero puedo recordar la pequeña situación que comentó Erick. Va a venir, y tengo que esperarlo.
Mientras espero hago algunas indagaciones en el Kindle, cosas de la ciudad, ahora tengo plena confianza de que estábamos en Londres, y gracias a eso las preguntas, acerca de cómo es que me regresó sin que nadie notara la situación en el aeropuerto, sigue siendo algo que me asecha, pero hoy gana algo más, conocer a los amigos a quienes va a traer a estar en su refugio, en mi prisión, me dará algo de él, algo que si hago de buena manera me dará puntos a favor.Erick pasó algunos minutos hablando por teléfono, se le nota un poco más tranquilo, aunque checa la hora a cada rato. Está hablando de algunos negocios que realiza, esta vez no es tan cuidadoso conmigo, ya que puedo escuchar la mayoría de su conversación.De pronto escuchamos voces, yo me paro y Erick deja de hablar, se despide de la persona al teléfono de manera bastante amable, cosa que no he escuchado en él. Se acomoda el saco, lo abotona bien, lo estoy viendo, Erick está regresando a su comodidad de siempre, a su egocentrismo