El punto de vista de KitAmbos brazos rodeaban a Sera y nuestros labios se apretaban en una danza desesperada. Podría besarla toda la noche sin cansarme de su sabor. Sus labios eran suaves y afelpados. Tan ansiosos como yo.Cerré los párpados mientras disfrutaba de la sensación de su cálido cuerpo c
Parecía que le gustaban mis brazos más que el resto de mí, y les prestaba especial atención.Sin apartar los ojos de los míos, se inclinó y deslizó la lengua por una de mis gruesas venas, mordisqueando el músculo con los dientes. Un gemido se escapó de mis labios y ella volvió a agitar sus caderas c
El corazón me retumbaba y la sangre me recorría todo el cuerpo. Caliente y palpitante. "Oh, cariño...""Déjame ayudarte a sentirte bien", murmuró. "¿Me quieres?""Más que nada", respondí, con el cuerpo tan tenso y ansioso por ella. Pero había algo que necesitaba saber. Le rocé la barbilla con las ye
Punto de vista de SeraphinaKit me miraba con la mandíbula perdida, ruborizado, con gotas de sudor en su grueso cuello. Parecía tan desesperado como yo. Su sabor se me pegó a la lengua, espeso en la garganta. Embriagador y masculino. Parecía completamente agotado por el orgasmo, con las pupilas dil
Su boca no sería suficiente para mí esta noche. Por muy bien que me hiciera sentir, no sería suficiente para apagar el fuego. "Te necesito", sollocé. "Por favor, métete dentro de mí. No puedo... no puedo soportarlo".Se puso en pie y su magnífico cuerpo se alzó sobre el mío. Sus pupilas se entrecerr
Mis rodillas tocaban la baldosa, extendidas sobre sus muslos mientras seguíamos follándonos. No controlaba mi propio cuerpo. Me sentía hecha un lío, rebotando arriba y abajo sobre él, el sonido de nuestras respiraciones y las palmadas en la piel llenaban la habitación.Nunca me había sentido tan des
El punto de vista de KitJadeé con fuerza y la figura menuda de Sera se desplomó sobre mi pecho. Su aliento sopló sobre mi clavícula, tan abrumada como yo. Mis caninos se retrajeron por fin en mis encías, mis garras desaparecieron mientras mi lobo se encogía dentro de mi piel.Impedir que la marcara
Intenté reprimir una sonrisa. Y Sera también intentaba reprimir la risa."No importa. No me importa. Sólo desinfecta mi mesa. Me voy a la cama", refunfuñó, subiendo las escaleras y murmurando algo sobre la santidad de una cocina. Pero pude oír un par de resoplidos ahogados salir de sus labios mientr