Cuando regresamos a la casa de lobos, es hora de empezar a prepararme. Después de ducharme de nuevo, me visto con unos pantalones de vestir negros y los combino con la camisa de vestir negra con puños, color y ribetes verde pavo real que compré expresamente para que hiciera juego con el vestido de Cara. Espero que acepte el regalo y se lo ponga. Si lo hace, parecerá que nos hemos vestido como una pareja, que eso es exactamente lo que quiero.

Después de recogerme el pelo en un moño y ponerme los zapatos de vestir, estoy listo. Me dirijo a la habitación de mis padres y toco la puerta. Aprendí rápidamente a esperar una respuesta antes de entrar. Hay cosas que un niño nunca debe ver hacer a sus padres. Y una vez vistas, no se pueden dejar de ver. Me estremezco de asco al recordarlo.

Oigo la voz de mi madre: "Entra, cariño".

Entro y veo a mi madre colocándose los aretes. "Vaya, qué guapo estás", dice ella. Y yo camino hacia ella y le beso la mejilla. "Gracias mamá".

"¿Estás lista o busc