No tenía intención de contarle a Grace mi historia, o al menos no todavía, pero parece que la ha hecho abrirse. Tal vez nuestras historias similares la ayuden a ver que no soy del todo malo y que posiblemente se pueda confiar en mí, si no como su pareja, tal vez como su amigo.

Me encanta que me pida que corra con ella. Lo habría hecho de todos modos, ya que necesito protegerla, especialmente con las manadas cercanas. No me gustó lo cerca de sus límites que corrió anoche. La pone en demasiado riesgo. Todo lo que tienen que hacer es ver sus ojos para saber lo que es. Solo los Guardianes tienen ojos dorados.

Louis está fuera de sí de felicidad jugando con Maia. Definitivamente, le gusta el vínculo de pareja. Está disfrutando de la persecución, mordiéndole los talones de vez en cuando, pero de repente, los olfateamos. No me había dado cuenta de lo cerca que habíamos llegado de la frontera de una manada, pero hay tres de pie en la frontera, casi como si estuvieran esperando a que Maia apa