Así que, hago lo que he hecho siempre que pasa algo malo. Huyo. Me escabullo fuera de la casa de la manada sin dejar que nadie me vea. En cuanto veo el bosque, salgo corriendo. Puede que antes estuviera cansada, pero ahora tengo la adrenalina a tope. En una situación de lucha o huida, voy volando. Y eso es lo que estoy haciendo. Corro tan rápido como me permiten mis piernas.

Oigo el sonido de las patas pisoteando la tierra detrás de mí. Vienen a por mí. Van a atraparme. Si me atrapan, volveré a ser prisionera. No puedo volver a ese lugar. No puedo volver a vivir así. No puedo arriesgarme a perder a Alessia cuando estoy tan cerca de recuperarla. Tal vez si puedo llegar a la manada de la Cresta del Cañón, me den refugio hasta que pueda encontrar otro lugar. No es la mejor opción, ya que todos parecen ser amistosos con Liam, pero es la mejor opción que tengo cuando literalmente tengo lobos respirándome en la nuca.

Empujo más fuerte, más rápido. Solo sé ir a un lugar donde podría escapar