Capítulo 224
Edmund le fulminó con la mirada. "Quítate de en medio".

Luego dio un paso adelante y se agachó delante de Sylvia. Extendió la mano y le cogió la cara, sonriéndole. "Niña, ¿sabes lo que pasará si me ofendes?".

Sylvia le espetó. "¡Ya suéltame!".

Edmund cerró los ojos, se limpió la saliva de la cara y la estrechó entre sus brazos. La miró como un lobo hambriento que mira a un conejo. "¿Me creerías si te dijera que te voy a coger aquí y ahora?".

Sylvia volvió a escupirle, dejándole sin palabras.

A su lado, el rubio y la cabeza de hierba también se quedaron sin palabras.

'¿Qué demonios? ¿Sigue jugando así?'.

Hubo un momento de silencio en la sala.

Edmund sonrió fríamente y miró a Sylvia con una mirada feroz. "Esta noche te voy a dar una lección. Lo juro por mi nombre".

En un instante, se levantó y la cogió en brazos. Luego, la arrojó directamente sobre el sofá.

Al mismo tiempo, la puerta se abrió de golpe y porrazo.

La figura alta y fuerte de un hombre se asomó al marco de la pue
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