El lunes a primera hora entre a mi oficina con una sola cosa en mente, abrir mi correo, todo el domingo lo había pasado dándole vueltas al asunto, recordaba que él durante el cumpleaños de Dylan recibí la notificación de un correo de minerva en mi celular, pero no le di importancia hasta ahora, el correo nunca estuvo en mi bandeja de entrada no recordaba haber leído un correo de ella, pero estaba segura de la notificación, lo que significaba que alguien había borrado el correo.

Era muy cuidadosa con mi computadora de la empresa, nadie tenía acceso a ella y mi oficina estaba casi todo el tiempo bajo llave no había forma de que hubiesen llegado a ella y aún así paso. Todos mis accesos tenían clave e inclusos algunos de mis archivos, pero el correo de Minerva no estaba por ninguna parte, lo que pocos sabían es que por seguridad trabajaba con una especie de espejo fantasma, mis archivos eran copiados y subidos a una nube, cada vez que guardaba o recibía un archivo o correo este no solo q