Sally llevó al Rey y Baski al calabozo particular donde Vetta tenía a Danika.

Cuando Sally entró, Vetta estaba lista para reírse de ella por su incompetencia y estupidez, y estaba lista para decirle que saliera porque ninguna cantidad de súplicas salvaría a su princesa de su castigo.

Abrió la boca, pero sus palabras se cortaron inmediatamente cuando Lucien se acercó a zancadas justo detrás de la pequeña esclava.

La conmoción en el rostro de Vetta era masiva.

"¡M-Mi Rey!". Ella tartamudeó en estado de conmoción, inclinando la cabeza.

Pero ninguno de ellos la estaba mirando. Los ojos del rey, Baski y Sally estaban fijos en una Danika inconsciente y con la espalda sumamente ensangrentada, los golpes de látigo eran visibles... algunos le habían desgarrado la piel.

"¡Oh, Creador...!". Sally comenzó a llorar de nuevo abiertamente, pero no fue a su princesa. El rey está ahí y no ha ordenado esto.

"Mi rey, yo---".

"Cállate, Vetta", él gruñó en voz baja.

Vetta cerró la boca de