Llegue a Canadá a una de las casas de Hector, este panadero sí que está podrido en plata, por eso Lucy hace y deshace, sabe que su familia y su enamoradísimo esposo la ayudaran

—No te sientas mal, solo serán unos meses mientras distraemos a Ethan, hare que Darana te llame seguido, obvio por canales seguros

—Es casi imposible que no lo haga, nunca me he separado de mi hija, desde que nació, cuando empezamos el plan canguro, desde la primera vez que pude tenerla entre mis brazos, desde ese momento no la he soltado, no sabes lo difícil que se me está haciendo

—Te entiendo, yo no podría separarme de los gemelos, la situación pinta difícil así que no podemos arriesgar a mi ahijada, no dejare que nada malo le pase, ni a ella ni a ti cariño, los Hancks no podrán encontrarte por más que quieran

—Lo quiero lejos a él, es primordial que no me encuentre, no lo quiero cerca, me hizo mucho daño antes y se lo permití por ilusa, mi hija no va a aguantar malos tratos de nadie, por ella doy la vida

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