Guillermo estaba muy cansado, ya la edad jugaba en su contra, pero en esos momentos el cansancio no le importaba porque se sentía orgulloso de ver que el trabajo y esfuerzo de su hijo menor estaba dando frutos.

Esa mañana había empezado de forma agitada porque estaban haciendo la última sesión de fotos con las modelos y las joyas, ya que esas imágenes se mostrarán en forma de video durante la pasarela para que todos aprecien las piezas.

Eliot estaba trabajando junto con el fotógrafo para guiar y ayudar a las modelos a que hicieran la mejor pose que mostrará de forma más llamativa cada joya.

Definitivamente fue buena idea cambiar de opinión, porque veo que tu si sientes esa pasión por diseñar joyas – pensaba el mayor al ver que Eliot se miraba feliz y cómodo con lo que estaba haciendo en esos momentos.

- Papá…

- Eh… - Guillermo salió de sus pensamientos y vio que Eliot le estaba mirando – perdón ¿me llamabas?

- Jefe si quiere le pido una silla o un café – dijo el fotógrafo – se le ve c