¡Lo único que deseo es vengarme!.

A muchas calles de la excéntrica mansión, nos preparamos para ejecutar la próxima jugada, mi mirada atravesaba como filo cortante el mapa del lugar y memorizado cada marca roja que señalaba los puntos estratégicos donde se ubicarán mis chicas .

Había montado esta organización con un objetivo, el de encontrar y destruir a quienes me hicieron daño, pero por supuesto en el proceso tenía que conseguir fondos de alguna manera.

—Repasemos el plan una vez más chicas.

Solo deben recordar el patrón de cada lugar para colocar un pequeño micrófono y deben hacerlo forma indetectable, no lo olviden. —Digo con total concentración.

— nada, absolutamente nada debe salir mal esta noche. — Xana, era la encargada de memorizar los números de las tarjetas de créditos, estos estaban pegados en un panel muy cerca del salón donde se ejecutaría la recepción del dinero.

Yo, por mi parte, colocaría un micrófono especial en la habitación principal de la mansión.

¿Era muy arr