Él estaba tan nervioso que no se atrevió a moverse. “¿Puedes por favor no hacer eso? Y sé amable contigo misma, ¿quieres? Toma en cuenta la experiencia de Arianne de cuando estaba embarazada. ¡Ella tuvo cuidado en lugar de actuar como si nada! ¿Sabes que? Voy a dormir en otra habitación. Estarás sola, así que ten cuidado. No te caigas de la cama”.

Tiffany se sorprendió de que Jackson la dejara. “Espera, ¿hablas en serio? ¿En serio? Eh, lo que sea entonces. Si te hace feliz, ve a dormir a otro lugar. Mientras tanto, voy a disfrutar de esta cama grande y ancha para mí para alegrar mi corazón. ¡Muévete a un lado! Y apaga las luces cuando salgas”.

Jackson salió de la habitación, lanzándole múltiples miradas de preocupación cada pocos pasos en su camino. Luego, al salir, apagó las luces y cerró la puerta.

Jackson admitió que podría haber actuado con demasiada ansiedad, pero simplemente no pudo evitar volverse más cuidadoso cada vez que recordaba la nueva vida que ahora se estaba incuband