Acabamos de llegar a casa. Caleb me saca del auto, cargándome, luego me lleva escaleras arriba, bajo la mirada preocupada de Kaysan, Keyaan y Hayden. Todos se preocupan por mí, pero no deberían. Deberían estar preocupados por Caleb.

Aunque Caleb no muestra nada, sé que no está bien. Mató a la primera mujer que amó, ¿y por quién? Una mujer que conoció hace apenas un año. Dice que me ama, sí. ¿Pero es realmente sincero? ¿Me ama o es solo una impresión? Sin embargo, elegirme es una gran prueba de amor... una vez más, no lo creo porque no creo que me lo merezca.

Nunca pensé que merecía ser amado, y todavía lo hago. Porque Caleb ama a Syra, pero si supiera que fue Maya a quien le confesó su amor, se retractaría de lo que dijo y reemplazaría sus palabras con una bala en la cabeza. Syra es la mujer que ama, Maya es su enemiga.

Caleb me lleva a su habitación y me acuesta en su cama. Durante todo este tiempo, no le quité los ojos de encima.

- Nunca me traicionarás, Syra. ¿No es así? Caleb me p