Narrador.
Elentari notó la desesperación de Albert, eso la hizo sentir dudosa, ella sabía que detrás de esas palabras tan bonitas se escondía algo más, pero ¿qué? Se preguntaba a sí misma sin obtener respuesta por qué no encontraba que le podía ocultar el sí apenas se conocían o eso pensaba ella.Albert estaba ajeno a qué ella por el vínculo de la marca podía sentir sus emociones. Y el temor que Albert estaba sintiendo la hizo entender que eso que Albert le escondía u omitía tenía que ser muy perturbador, porque Albert es un ser que no le teme a nada ni a nadie. Dejando aquella incertidumbre de lado, Elentari quiso cumplir con lo que su cuerpo le pedía a gritos y eso era que debía de completar la marca que tenía en su cuello. Sin sentir vergüenza besó sus labios callando las súplicas de Albert quien le pedía que lo marcara.Albert también deseaba tomarla para saciarse de ella, acariciaba el contorno de su cuerpo levantando el blusón para seguir recorriendo caNarrador.Albert no podía asimilar lo que estaba pasando, esa elfo era mucho más fuerte que él y Matías juntos, y al notarlo los dos se miraron entre sí olvidándose de la contrariedad que hace poco estaban teniendo.Esta era la primera vez en sí que Elentari hacía uso de su poder a plenitud pues anteriormente lo había usado, pero con restricción de su madre o de ella misma que se proponía no usarlo, pero después de que dejó salir todo su poder a su mente volvieron a llegar los consejos de su madre.—Oh no que he hecho la bestia me puede encontrar— balbuceó para sí misma, pero tanto Albert como Matías escucharon todo a la perfección y Matías se emocionó al saber que Albert estaba perdido lo miró sonriente y sin decirle una sola palabra Albert compre
Narrador. Tras la llagada de Albert a la manada, su hermano menor quien había tomado el lugar de Albert; sintió emoción al saber que su hermano había regresado para defenderlos, pues que la manada del alfa supremo estaba siendo blanco fácil para los vampiros quienes atacaban con burla; aunque él es un alfa sabía que no es el alfa indicado para tomar la responsabilidad de alfa supremo, este lugar por ley de la naturaleza siempre era del primer alfa nacido en la línea de sucesión. Y los vampiros sabían que sin su alfa supremo los lobos estaban desprotegidos tanto los de la manada real como los de la demás manadas porque su fuerza y capacidad no es la misma. El padre de Albert también hacía lo que podía, pero al pasarle el control de la manada a su hijo por medio de un ritual su deber como alfa y su conexión con los demás lobos ya no era la misma. Su hijo menor es fuerte, un cachorro hábil y ágil, pero no superaba a su hermano quien no
Narra Elentari.Albert por fin me contó su triste historia, sentí pena porque debe ser feo saber que serás algo que desconoces y que no puedes cambiar.Ese día me mostró su transformación y aunque al principio me causó un poco de terror me dije a mi misma que debajo de todas esas garras horrorosas se escondía mi Albert el hombre que amo y que no me lastimaría nunca, así que me le acerque y me recosté a su lado para que supiera que yo nunca lo rechazaría por su fea transformación, que estaré a su lado sin importar que esa valquiria no aparezca más.Duramos casi toda la tarde en ese bosque, pero al caer la tarde sentimos la presencia de algo o de alguien a nuestro lado y Albert me dijo que ya era hora de irnos, él estaba asustado, pero no sentí que temiera por su vida. Sentía temor de que me lastimaran y sin ponerse
Narrador.ꟷ desnúdate ꟷ le ordenó Albert a Elentari, tratando de probar si la Elfo se dejaría dominar por él. Estaba tan acostumbrado a ser tan dominante que le causaba cierto morbo probarlo con Elentari quien al escucharlo lo miró de arriba abajo con molestia.ꟷ no ꟷ le respondió ella con el semblante muy serio, porque una cosa era ser su mujer y otra muy diferente era ser su sumisa, se decía a sí misma que Albert había cambiado, pero no dejó de lado ese aire de superioridad, ni esa arrogancia que de lejos dejaba ver esa cara de “yo soy quien manda”ꟷ ¡perfecto lo aremos a mi modo! ꟷ le dijo él antes de acercarse a ella como un león al asecho.Narra Elentari.Estoy excitada, mentiría si dijera que no, pero no le daré a este lobo la facilidad de que me trate como está ac
Narra Elentari.Aún no podía creer lo que estaba escuchando, pensaba que esa vampiresa solo estaba jugando con mis emociones para hacerme daño, pero en el momento que miré a Albert a los ojos noté su temor y fue así que pude entender que esto era lo que me ocultaba.Peleaba conmigo misma por haber sido tan tonta y por no haber creído en mis propios instintos.Con razón él me dijo que dejara de temer que ya la bestia no me lastimaría más si él siempre fue la bestia y yo le había entregado mi luz al monstruo que me dejó sin familia y sin un hogar al cual regresar, no tenía nada y no soy nada todo por su culpa, por su Maldito egoísmo.—madre te fallé— fue lo único que pudo salir de mis labios, ella entregó su vida por mí y al final su sacrificio y el de toda mi familia fue para nada, yo misma me hab&
Narrador.Los días habían pasado y tanto Elentari como Albert seguían extrañándose el uno al otro. Albert fue varias veces en busca de su luna, pero ella se negaba a recibirlo, aunque moría de ganas por verlo luchaba consigo misma para ser fuerte y no dejarse vencer por ese amor erróneo que sentía por Albert.Albert como siempre se marchaba destruido, sin poner resistencia, ni crear alborotos en el reino de los elfos, puesto que si se lo propone él puede buscar a su mujer y llevársela consigo, pero no quería actuar mal una vez más.—te creí más bestia— le dijo Alania, quien estaba esperando a Albert a la salida de Lothlórien. Tenía días observando como Albert iba a buscar a su hermana, pero le causó curiosidad, ver qué Elentari rechazaba la visita de Albert hasta que decidió preguntarle a
Narrador.Casualmente Alanya se encontraba buscando a su sobrina, por lo tanto; los elfos que se quedan a su lado les habían comentado acerca de la debilidad de su reina.Ella sabía que Elentari estaría débil, a causa del embarazo; lo que no esperó, era que sería tan pronto, y su intuición le decía que algo más estaba afectando a su sobrina.Primero, la buscó en su habitación; como tal Alanya podía usar su poder para encontrar a Elentari sin necesidad de buscarla como un humano lo haría.Ella es diferente a los demás, en todos los sentidos tanto que piensa que los poderes no deben usarse para cosas tan simples, como esas.Después de caminar por el pasillo del palacio, llegó al salón donde se encontraba su sobrina teniendo una conversación con un alfa; sin querer interrumpirlos se giró con la intención de marcharse, pero se detuvo cuando escuchó que su sobrina mencionó que pronto moriría, esa sola palabra la hizo retroceder buscando algo a que aferrars
Narrador.Alanya buscó a olmos para que cargara a Elentari, a pesar de que no sabía en qué lugar estaba situada la manada de Albert salió sin pensarlo, usó su magia para trasladarse a cierto punto del bosque, pasando ante la entrada de dos senderos que se perdían ondulantes, entres unos árboles tan densos que no se veía nada, por la oscuridad de la noche. Era una de esas noches sin luna y sin estrellas, y de no ser por sus buenas visiones estarían perdidos.En ese mismo instante Albert se encontraba dentro del mismo bosque, mirando a la culpable de su desgracia, el inicio de todo se encontraba ante él con una sonrisa en los labios, provocando que el deseo que Albert tenía de matarla incrementara un poco más.ꟷ tiempo sin verte, querido ꟷ le dijo la valquiria con un tono burlón.ꟷ lindo chiste. Y tú por fin te dignas a aparecer después de que m