En un instante, Nicole sintió de repente que su cuerpo se echaba hacia atrás. Perdió todo el control y su rostro se puso pálido al instante. Antes de que pudiera reaccionar, su cuerpo estaba suspendido a más de 60 metros sobre el nivel del mar.

Nicole gritó con todas sus fuerzas. Su voz se disipó rápidamente en la brisa marina salada. Su corazón parecía que iba a salirse de su cuerpo.

Ellos iban muy rápido. La cuerda del paracaídas estaba tensa mientras sostenía a Nicole y a Miles en el aire. Patinaban a través del viento frío del mar siguiendo la velocidad del bote. El viento les rozaba la cara, lo cual se sentía doloroso, pero también... ¡Increíble!

Nicole nunca se había sentido así. En este momento, sentía que la vida era tan pequeña y frágil, pero también incomparablemente fuerte y vigorosa.

¡Desafiar los límites de uno resultaba ser realmente adictivo!

Miles se estabilizó y se acercó a tirar de los hombros de Nicole para fijar su posición y dirección.

Nicole jadeaba agitada