Eric también vio a Chaz. Había investigado a Chaz antes y descubrió que le gustaban los hombres.

Por lo tanto, Eric no se sentía amenazado por Chaz. Se acercó, sonrió y palmeó a Chaz en el hombro.

“No subas ni la molestes. Se acaba de quedar dormida, así que recuérdale que coma cuando se despierte”.

“Por supuesto, Señor Ferguson. ¡Adiós!".

Chaz miró con tensión mientras Eric salía del bar.

Eric parecía estar perdidamente enamorado.

¿Estaría un presidente dominante enamorado?

¿Acaso Eric estaba siendo serio con Selena?

Chaz miró hacia arriba. Sus pasos eran ligeros.

Eric le ordenó que no molestara a Selena.

Selena durmió hasta el mediodía.

Sin embargo, ella no se despertó por sí sola. El golpe de Chaz en la puerta la despertó.

Selena se sentó aturdida y fue a abrir la puerta.

"¿Qué quieres?".

Chaz la miró enojado.

“¡El piso de abajo está inundado, pero todavía estás durmiendo profundamente! ¿Dejaste el grifo abierto cuando fuiste al baño en la mañana?”.

A él no podía imp