Nicole sacudió la cabeza. "No, es mía".

Yvette se quedó atónita y levantó la cabeza para mirarla.

“¿Por qué no usas su dinero? ¿Acaso no están casados? ¿No es su dinero también tuyo?”.

Nicole frunció los labios y levantó las cejas.

Ella nunca había pensado en eso antes.

“¿Importa qué dinero uso?”.

Yvette miró a Nicole sin palabras.

“¡Por ​​supuesto que importa! ¿Sabes cuánto dinero tiene? ¿Sabes en qué gasta su dinero? Si no te deja gastar su dinero, lo gastará en otras mujeres. Tienes que vigilar su dinero. Incluso si no te falta dinero, no puedes bajar la guardia, ¿entiendes?”.

Nicole se sorprendió por los comentarios de Yvette.

Yvette suspiró y cruzó los brazos.

“De todos modos, básicamente nunca gasto mi propio dinero ahora. Lance tiene dinero, así que puedo gastarlo como quiera. Cuanto más gasto yo, más tiene que ganar él. No puedo dejar que piense que soy una chica sencilla. De lo contrario, pensará que otras mujeres son más valiosas que yo, ¿no?”.

Yvette se había casa