Nicole asintió.

Grant frunció el ceño.

“No recibimos ninguna noticia de que él haya venido”.

Ella dijo: “No somos solo nosotros. Ni siquiera Eric en Libertad lo sabe, y eso que estaba delante de sus narices. El poder de Quavon no puede ser subestimado. Sus hombres iniciaron ese incendio”.

La expresión de Grant se volvió aún más fría. Sus ojos transmitían el mismo escalofrío.

“Él ya lo sabe. Vino aquí a propósito para encontrarte. Quería atraparte desprevenida y provocar un accidente, pero no esperaba que escaparas…”.

Nicole asintió. Por un momento, los corazones de todos se sentían pesados.

Ella no le temía al futuro.

Sin embargo, era como si siempre habría un cuchillo colgando en lo alto, y siempre sería incómodo pensar en ello.

Era mejor resolver este asunto cuanto antes.

Hubo unos momentos de silencio.

Nadie habló.

Grant tomó la iniciativa de romper el silencio. “Le diré a Luca que regrese inmediatamente y esté a tu lado”.

Floyd asintió expresando su aprobación.

Nicole