“A Molly le gustas mucho, así que debe haber incorporado tu información al cerebro de Tigger, de ahí esta reacción. Por cierto, ella también está en el equipo de investigación de J&L, así que podrás conocerla dentro de poco”.

Maverick lanzó a Tigger con despreocupación a Nicole, que lo atrapó con cuidado.

“¡Tigger, vamos a ver a Molly!”.

“Quiero que el Gran Dios me abrace…”. Tigger se debatía en los brazos de Nicole y le pedía con insistencia.

Nicole no podía negarse a ninguna de sus peticiones, así que alcanzó a Maverick. “Segundo Hermano…”.

Maverick estaba acostumbrado a ver ese tipo de robots de inteligencia artificial y estaba claro que no estaba tan obsesionado como Nicole, porque no sentía mucha emoción por las cosas que él podía manufacturar. Para él, solo era una máquina.

Cuando llegaron al laboratorio de J&L, Tigger se convirtió inmediatamente en el centro de atención de la multitud.

“Pequeño traidor, ¿nos has echado de menos?”.

Tigger levantó la cabeza y emitió un gru