Desde la comodidad de su hogar Jeremy comienza a reflexionar un poco en lo que está a punto de hacer. Se acuesta en su cómodo sillón y se sumerge profundamente en sus pensamientos, para él hasta ahora la vida ha sido solo una gran aventura cargada de mucha adrenalina.

Cree que debe de empezar de nuevo y reestructurar su vida de algún modo, probablemente incursionar en otro negocio es lo único que le viene a la mente en cuanto a su estabilidad, solo piensa en dinero es algo que no puede evitar.

De la nada su teléfono interfiere con sus ideas, es su padre quien llama:

—Papá ¿Qué quieres? —le dice en tono de fastidio Jeremy a su padre.

—Más respeto Jeremy soy tu padre.

—Está bien papá ¿Qué ocurre?

—Necesito hablar contigo es urgente.

—Pero papá es muy tarde para ir a la mansión.

—No te preocupes voy camino a tu casa.

— ¿Cómo?

—Cómo lo oyes voy para tu casa lo que tenemos que hablar no puede esperar y es mejor que tu madre no esté presente se moriría de la vergüenza—cuelga su padre antes