Capítulo 85

Mientras sostenía la mano de James en la oscuridad, sintió calor irradiar de él, un calor reconfortante, a pesar de que su corazón todavía estaba acelerado.

James apretó su mano suavemente y lentamente la atrajo hacia él, Helena no pudo resistirse a pesar de que su cuerpo comenzó a temblar por sí solo.

James la envolvió en un abrazo, dejó que su mano bajara hasta su larga cabellera sintiendo toda la sedosidad de las hebras y aspiró su perfume, el aroma de su cabello era maravilloso y llenó sus fosas nasales, por un instante se sintió embriagado por ella, había pasado demasiado tiempo atrapado y sus necesidades de hombre rugían en su interior, tuvo que esforzarse mucho para mantenerse quieto, para no tirarla sobre la cama y tomarla con todas las fuerzas que poseía, su corazón ya latía bastante y temía que ella le tuviera miedo.

Era consciente de que nunca podría darle lo que su Alfa le había dado, nunca podría calmar su corazón y hacer que se lo diera como seguramente lo hi