Will James Llego a casa al siguiente día y por orden de mi jefe, el comandante del grupo, tengo que cargar con Ana, así se llama la chica que me rescato y ahora es mi deber cuidar de ella, a pesar de que estoy herido, ella sabe que no debe mencionar nada de mi trabajo en casa, por mi abuelo. Apenas abro la puerta, las miradas de reproche de mi abuelo y de Serena son épicas. — ¿Cómo se te ocurre llegar al siguiente día a tu casa y con una mujer del brazo?— Reprocha mi abuelo, viéndome con decepcion en la mirada. —Lo siento. —Expreso, intentando explicarme, pero no tengo tiempo, de hacerlo, cuando mi abuelo continua descargándose en mi contra. —No lo haces, creí que con Serena cambiarias, pero sigues siendo el mismo irresponsable de siempre. — Señala. —No deberían tratarlo así, el es un buen hombre. — Exclama Ana, que fue testigo anoche de todo lo que tuve que pasar. —Y usted no debería estar aquí, ¡esta es una casa decente!— Le dice Serena, molesta. — ¿Estas celosa?— Cu
—Serena.Congelar mi semestre en la universidad, por teléfono has sido una de las cosas más difíciles que he tenido que hacer en mi vida— ¿Ya empacaste todo lo que necesitas para un mes allá?— Me cuestiona Will, saliendo del baño con tan solo una toalla en la cintura.—Si. — Respondo con un monosílabo casi entrecortado, ¡no se qué diablos hago allí!, babeando como una idiota por mi esposo por contrato.—Excelente, ya el avión está preparado y esperándonos en el aeropuerto...— me dice el, llamando por teléfono sin dirigirme una mirada, esta molesto por haberme negado a tener intimidad con el.— ¿Es necesario? Los aviones me ponen nerviosa. — Le confieso, no me gusta volar.—No tienes nada de qué preocuparte, sabes que puede ser peligroso que nos quedemos acá, siento que estés envuelta en todo esto solo por involucrarte conmigo. — Me dice él.—No es tu culpa, yo necesitaba la ayuda de la señora Smith, gracias a Dios por eso mi hijo está vivo. — Le digo para que sepa que no me arrepiento
Serena Salgo de la cabaña y miro a la distancia, estamos en un bosque muy espeso, camino unos metros y me siento en un árbol caído no quiero actuar como una perra sin corazón, pero es algo que no puedo evitar, me da rabia la forma en que Will la mira. No debería importarme, ¡Will y yo no somos nada!...Aspiro profundo queriendo buscar serenidad, que no logro encontrar — ¿Qué haces acá tan sola?— Cuestiona Will con voz profunda, sentándose a mi lado, sin tener idea que estoy huyendo de él. Su olor invade mis fosas, me perturba pero trato de aparentar serenidad, me tenso como una cuerda cuando una de sus manos se posa en mi rodilla. —Este lugar trae muchos recuerdos felices a mi mente, quiero mostrarte un lugar especial. — Me invita, ofreciéndome su mano. Tal vez me arrepienta de esto pero le entrego mi mano, el contacto me hace estremecer de inmediato, tengo mucho miedo por las cosas que estoy sintiendo, sobre todo cuando esta cerca de mí. —Es cerca. — Me susurra, y comenzamos avan
SerenaDespués de ese reencuentro, estoy muy incómoda, estoy segura que el reconoció a Alonso, pero no permitiré que se le acerque, no puedo estar cerca de ese hombre, incluso le diré a Will la verdad del origen de mi hijo si es necesario, aunque no sé como lo tomara.Cuando subimos al auto subo a mi hijo a mis piernas, en Estados unidos por esto tendría una multa, pero aquí no lo creo, no hay muchos autos por estos caminos, lo más cercano a la cabaña es un pueblo campesino a unos quince minutos en auto.Lo abrazo con fuerza y aspiro el olor dulce de su cabello—Mamá, soy un hombre, no debes abrazarme así. — Se queja Alonso haciéndome reír.—Sabes que te amo, más que a nada en este mundo ¿verdad?— Cuestiono, mirando su hermosa carita.—Si mamá, me los has dicho, un millón de veces. — Me dice rodando los ojos.—No lo olvides, por ti daría mi vida si fuese necesario. — Le digo mirándolo a los ojos y después depositando un beso en su frente——Yo también te amo, mucho eres la mejor madre d
SerenaEscucho a la distancia que se acerca un auto a la cabaña, no debo ser un genio para saber que es el padre biológico de Alonso, mi corazón se acelera de inmediato, ojala esta sea la última vez que lo vea.Todos están abajo en la sala, yo respiro profundo tratando de controlar mis nervios y bajo, lo primero que noto es a Ana, mirando a Will como si quisiera comérselo, me molesta por completo su presencia, pero no puedo hacer nada…Entiendo que es parte del trabajo de él.Alonso abre la puerta y Gerard, se queda embelesado mirándole, yo carraspeo para llamar su atención, mientras bajo por las escaleras.—Adelante señor. — Dice Alonso apenas lo ve, mientras el boquea intentando buscar una palabra, su mirada conecta con la mía y sé que tiene muchas preguntas, que no tiene ni siquiera derecho a formular.Will saluda con una brazo a su amigo de la infancia, sin imaginas la clase de escoria a la que esta abrazando.— ¡Bienvenido! Me alegra tanto que pudieras venir ¿Dónde está tu novia?
Serena James Gerard, se levanta y se va unos minutos después ante la mirada atónita de Ana, que fue quien lo golpeo, masculla una frase, casi inaudible.— Me las pagaras Serena.— Serena tiene una gran dolor de cabeza a causa de la presión de todo lo que ocurrió en el día, definitivamente el mundo es un pañuelo, desde hace mas de cinco años que no veía ese hombre, estaba segura que nunca más lo tendría de frente. No quiere subir a la habitación, hay una sola cama, y no quiere arriesgarse a dormir al lado de Will, se toma una pastilla para dolor de cabeza y en ese momento entra Will al lugar viéndola fijamente. —¿Qué?— Cuestiona ella. —No soy estúpido, Serena dime lo que tengas que decir de una vez por todas.— Suelta serio. —No tengo nada que decirte.— Responde con voz entrecortada. —¡Soy un maldito agente especial! ¿Crees que puedes engañarme?— Me pregunta entre dientes llegando hasta mi. —¿A qué te refieres?— Cuestiono, temblando ligeramente, parece un depredador a punto de atac
Will James Acabo durmiendo en la cama, con mi esposa quien finge dormir para evitar tener intimidad conmigo, suspiro pensando que mi vida y el amor él es una basura. Después de un rato de no poder conciliar el sueño, me levanto, es temprano aun, pero no soporto estar en esa cama, con las ganas que tengo de arrancarle la ropa y fundirme con ella de una vez por todas. —Estoy harto de esa situación, no me gusta tomar, a mi padre lo acusaron de estar alcoholizado al momento del accidente, mi padre dejo de beber años atrás, cuando me adopto. Por eso no tuve ningún problema cuando conocí a Alonso, pienso que todos merecemos tener una familia completa, y todos merecemos también conocer de donde vinimos, aunque ame y amo a mis padres “biológicos”, me entere mucho después que no lo eran, siempre he tenido ese anhelo dentro de mi corazón de saber quien me engendro, de saber ¿Por qué me abandonaron? Y sobre todo de decirles que a pesar de todo los perdono, tuve unos padres maravillosos el tie
Daniella Smith—No puede haber desaparecido de la faz de la tierra tan fácilmente. — Chillo de rabia, estrellando un vaso de alcohol en el piso, mi socio ni se inmuta está acostumbrado a mis estallidos de cólera, los que tengo con mucha frecuencia.No tienes nada de qué preocuparte, eso lo único que quiere decir es que le tiene miedo. — Me dice él.—Ya está claro de todo lo que soy capaz de hacer, el aun no conoce mi identidad mientras yo sé todo de el. — Le digo con las manos empuñadas.—No todo, no sabemos donde se escondió. — Me recalca el, lo ciento como una burla.—Siempre hay formas de sacar a Will de su escondite. — Respondo con los ojos entrecerrados.—No veo como. — Me dice él, yo ruedo los ojos.—Siempre hay formas, pero tú no puedes verlo, por esa razón la líder de la organización soy yo y no tú. — Me burlo a la vez de él——Sabes que no soy un hombre machista, te admiro, eres la mujer más inteligente que conozco. — Me halaga él.—Y también la más cruel si es necesario. — Re