Dicen que la política es sucia, pero acá hasta el vestido te escogen y Brithany quiere hacer algo, no te pierdas lo que hará.
Algo quieres esconderQue no sé qué esY ya me hace daño Canción Azúcar Amargo de Fey Arios miró sorprendido a Freda y comentó: —Deberé contratarte como mi guardaespaldas eres de miedo. —Solo le dije lo que merecía… Carol entró del brazo de Doug y saludaba aquí y allá, entonces Arios notó a Doug. —Llegó Doug. Fueron a saludarlo y él al ver a Freda se dio la vuelta y vio a Carol saludando a una de sus amigas: —¡Doug! —palmeó su espalda Arios— Es bueno verte. —¡Arios, Freda! —hizo una mueca rara— ¡Qué bueno toparlos! —¿Te pasa algo? —preguntó Arios. —No… Freda hace días que no te veo. Freda no entendía los gestos de Doug hasta que… —Doug, querido, preséntame a tus amigos. Carol miró a Freda con rostro de pocos amigos y entendió esos gestos raros del joven: —Mi querida y hermosa madrastra, Carol Litman. —Mucho gusto, Arios Hudson. —¡El candidato! —Sí, ese mismo. —¿Y esta preciosa señorita? Freda intentó disimular: —Ella es Freda Denis, mi novia. Doug la miró sorprend
Busca en tu pasado y hallarás las huellas del ayer. Fred vio a Freda acercarse a uno de los adornos, las personas se servían de los innumerables dulces que adornaban el lugar y ella tomó uno y lo contempló. —Freda, parece que te diviertes. —Es una hermosa fiesta. —Un deleite para los golosos. Ella mordió el dulce y le comentó: —Sin duda. —Te advierto algo… —vio su atención—, esto no se va a repetir, no te quiero en la vida de Arios. —No entiendo, ¿por qué le caigo mal? —Por todo lo que representas, eres una arribista y Arios se dará cuenta de todo. —Bien, entonces que se dé cuenta… Fred se traía con una descarada: —¿Tiene algo de lo que darse cuenta? —Claro, siempre hay cosas… Fred frunció el ceño y miró molesto a la joven. Arios tenía una charla con sus amigos, hacía tiempo que no se divertía tanto hasta que Nicola mencionó algo que llamó su atención: —Mi madre suele decirme que soy como soy debido a mi interés por los rompecabezas… Simplemente, ellos sacan lo mejor de
Quiero salir con él, seremos una pareja duraUn pequeño juego de azar es divertido cuando estás conmigo (me encanta)La ruleta rusa no es lo mismo sin un armaY cariño, si el amor no es violento, no es divertido, no es divertido Poker Face, Lady Gaga Lily pintaba lo que le salía del corazón, nada más, bebía vino mientras los trazos rojos se marcaban en el lienzo blanco, toda una terapia. —Voy a hacerte un lindo cuadro Cleopatra, de fondo rojo… La empleada fue abrir la puerta y cuando regresó, Arios venía con ella y con un ramo de rosas. —¡Arios! —Tía… Ella lo abrazó con fuerza y le dijo: —Hace tiempo que no vienes. —Esto es para ti —le entregó las flores. —Silvestres como mi espíritu. —Sabía que te encantarían. Miró a la gata pintada en el fondo rojo: —¿Comunista? —La hago de todo… Menos hitleriana —se rio—, ¿a qué se debe la visita? —Quería hablar contigo… ¿Recuerdas ese asunto? Su tía le sirvió una copa de vino: —Claro, lo recuerdo —entonces propuso un brindis—, por
«Todo buen jugador mantiene sus mejores cartas hasta el final» Escuchó su voz interior diciendo: ¡Freda! ¡Qué has hecho! Se entregó a un hombre por amor ni más faltaba. Arios llegó y le dijo al oído: —Me baño y comemos. —Genial. Quedó sola viendo la ancha cama, se tiró y se colocó una camisa de Arios y fue a tomar un vaso de agua, no sabía las consecuencias de todo aquello, solo quería dejarse llevar por su aventura. La puerta sonó, miró a la entrada de la habitación, Arios seguía bañándose y ella tuvo que ir a abrir. Cuando lo hizo no se esperó ver a Fred Hudson frente a ella, este la miró furioso y entonces la increpó: —¡Qué m****a haces aquí! Freda se quedó muda de la impresión viendo el rostro lleno de ira del sujeto. Fred Hudson repitió la pregunta: —¡Qué m****a haces aquí! ¿Por qué usas la ropa de mi sobrino? Freda se sintió incómoda con todo ese interrogatorio. —¿Te acostaste con mi sobrino? La joven solo pudo decirle: —Estoy con Arios. —¡Vagabunda! —la agarró p
¿Y quién me va a entregar sus emociones? ¿Quién me va a pedir que nunca lo abandone? ¿Quién me tapará esta noche si hace frío? ¿Quién me va a curar el corazón partido? ¿Quién llenará de primaveras este enero? ¿Y bajará la luna para que juguemos? Dime si tú te vas cariño mío ¿Quién me va a curar el corazón partido? Corazón partió, Alejandro Sanz Freda llegó donde Verona y cuando la vio tan desmoralizada se extrañó: —¿Qué te pasó? La joven buscó sentarse y ella vio que sostenía algo entres sus manos y se lo quitó y vio lo que era:—¿No me digas que lo hiciste con él? Freda guardó silencio y Verona le recalcó: —Era lo que tanto te decía, ahora hay que ver. —No quiero seguir con esto, quiero mi vida de antes contando centavos y soñando… Verona fue clara: —El problema es que cuando conoces a un hombre que te impacta tu vida ya no vuelve a ser la de antes. —Arios es un buen hombre, su tío nos descubrió. —El tipo está tostado. Dime algo, ¿Arios te hizo a un lado? Freda se p
«Déjame anotar en mi mente y grabar en mi corazón cada instante hermoso pasado a tu lado» Mandy se alistaba para salir con Oreonte, iban a una función de teatro y Tory le preguntó: —¿Te gusta salir con él? —Es bastante culto y Carol dice que debo de agotar todo mi arsenal con él —entonces le preguntó—, ¿y lo tuyo con Nicola? Ella sonrió y le comentó: —Está de viaje, dijo que me llamaría, apenas regresara. —Sería increíble que lo consiguiéramos. —Demasiado… —entonces Tory acomodó sus cabellos detrás de las orejas y le preguntó— ¿Consideras viable decirle a Oreonte sobre lo de las Damas de Juno? Era una buena pregunta y le respondió: —No lo sé, creo que sería hasta cruel decirle que solo fui al entierro de su esposa por buscar oportunidades de marido rico. —Sí, es complicado. —Además, puede que no llegué a mayores y solo sea como su distracción, podría enfocarme en alguien más. Tory le comentó entonces: —Es que no te he visto apuntar a otro lado. Era cierto, entonces record
«Descarada, coqueta, me guiñas un ojo, te subes a mi cabeza y no te puedo controlar» Carol les decía a las chicas: —Irán a bares exclusivos y subastas, quiero que se empapen del ambiente y observen todo a detalle. Entonces les indicó: —Los hombres con dinero van a esos sitios, subastas en donde compran cosas irrisorias a un alto precio. Ellas se emocionaron. —Asisten a bares de moda para ligar con chicas lindas y nada estúpidas. Mandy escuchaba la clase atentamente y Carol se le acercó: —¿Cómo va todo con Oreonte? —Tranquilo… —No me gusta esa pasividad, no eres su paño de lágrimas, cuando te llame le dirás que vas a salir con unas amigas a un bar de moda. Mandy se inquietó: —¿Y si eso le molesta? —Eso es lo que deseo, que se moleste, que piense que te puede perder, hay que darle una sacudida al tipo. Mandy asintió y Carol les indicó que irían a una subasta, el móvil de Mandy sonó: —Ya sabes… Sacúdelo. Ella tomó la llamada. —Oreonte, vaya sorpresa. —Mandy ¿podemos vern
«Eres culpable de ser tan bonito, de ser irresistible y te sentencio a ser mi condenado amor» Carol reunió a su grupo y les dijo: —Quiero que ahora hagan un favor para mí. Todas las miraban atenta: —Deseo que vayan tras un hombre en especial, sé que es raro, pero será por poco tiempo… —ella les mostró la foto de Arios. Mandy hizo un respingo y Carol, les indicó: —Quiero que lo acosen. Mandy preguntó entonces: —¿Por qué? —Es un pedido de su maestra, ahora tienen que aprovechar todo momento para poder cautivar al que sea. Mandy pensó que era muy raro todo y Carol le preguntó a la joven: —¿Qué pasó con Oreonte? —Se me declaró, claro pide que le tenga paciencia, se puso celoso por el chico con el que charlaba. —Perfecto, chicas aprendan de Mandy. Brithany miró la foto de Arios Hudson, claro que lo jodería si era posible. Arios asistiría a un evento de subastas y fue acompañado de Freda, ambos eran fotografiados por la prensa. La gente estaba vestida de gala. Entonces Freda v