Renán despertó antes de que sonara su alarma o que el mismo Ernesto lo llamara, sentía que apenas acababa de cerrar los ojos, no obstante, se levantó con la determinación brillándole en el rostro.
Su chofer se encontraba en la cocina disfrutando de una taza de café, el cual desprendía un aroma que inundaba toda el área, así que luego de dar los buenos días, pidió que le sirvieran a él también.
–¿Vamos a la oficina jefe? –preguntó Federico al abrirle la puerta del automóvil.
–No, primero llévame a la casa de Madeleine, por favor.
Llegó al momento en que los cuatro niños tomaban su cereal, ya uniformados, entró, los saludó y, por primera vez, se detuvo a co
Madeleine abrió mucho los ojos, asimilaba lentamente lo dicho por Renán, al mismo tiempo que internalizaba las implicaciones futuras si resultaba ser cierta la sospecha de él, en vista del silencio de ella, se animó a continuar: –¿Me permitirías hacer una prueba de paternidad? –¿Qué harás si resulta positiva? –Nada extraordinario o que tú no quieras, nos casaremos y nuestro vínculo legal cubrirá mi paternidad, tú tendrás mi apellido, ellos también podrán tenerlo; con solo ser tuyos ya te había prometido protegerlos, eso no ha cambiado, sin tomar en consideración el resultado de esa prueba puedes contar conmigo.Ella
El investigador de Bianca, vía telefónica, le dio un informe detallado de las actividades de Renán, llamando su atención el hecho de la visita al apartamento 506 del edificio Cumbre, el cual está arrendado a la señorita Arabella Barret, quien frecuentemente es visitada por Renán. –Quiero el número telefónico de esa mujer de inmediato. –Ya se lo envío, me fue fácil obtener información haciéndome pasar por abogado. –A decir verdad, no me interesa cómo lo haces siempre y cuando me des los resultados que quiero, sigue atento.Así que, después de hablarle tan amablemente, Bianca obtuvo lo que quería, pero no hizo ningun
Desde el hospital donde estaba recluido Edison, Renán tomó rumbo hacia la casa de Madeleine, sentía cierta inquietud porque, aun siendo muy elocuente para los negocios, en esta ocasión le resultaba imposible anticipar el ritmo de la conversación, se trataba de unos niños inteligentes, pero de quienes no podría saber cómo reaccionarían ante la verdad sobre Maddy.En la casa, el estado de ánimo de Madeleine Lawson era similar al de él, estaba hablando con Deyanira al respecto: –Entonces, ¿te investigó?, bueno…, espera, creo que lo entiendo, los hombres en su posición no preguntan, simplemente contratan a un detective privado y te averiguan hasta el número de veces que vas al baño. –Él conoci&oacut
Como puestos de acuerdo, cada uno posó una manito en el rostro de Madeleine, Justin fue el primero en hablarle: –No llores mamita, si nuestra mamá brilogica te escogió sabía que eras la mejor para nosotros. –Se dice mamá biológica Justin –corrigió Gerald–, pero tienes razón. –¿Ella te habló de nuestro papá? –preguntó Bayron–, la verdad es que por culpa de Liseth se me metió en la cabeza la idea de saber de mi papá. –Diane nunca mencionó el nombre de su padre, ni siquiera me dio una pista de dónde podría encontrarlo, sin embar
Deyanira llegó y Renán le solicitó que ordenara pizza, incluyendo pedidos especiales para Bayron y Gerald, los niños se alegraron mucho y bajaron a esperar. –Mañana vendré temprano con el laboratorio para tomar las muestras, pero el resto del día estaré bastante ocupado y seguramente deba viajar. –Entiendo. –Edison es quien iría por mí, pero está en el hospital, Alberto lo encontró desmayado en su apartamento, parece que vomitó todo el fin de semana, yo estaba a punto de asignarle la dirección de unos vuelos y que debemos inaugurar en dos días, ahora tendré que hacerlo yo mientras se recupera.&
Renán descendió de su fabuloso Maserati y caminó hacia su madre y su acompañante, con cada paso que avanzaba sentía la furia creciendo dentro de él.Su único escape, lo que con tanto celo había ocultado incluso de sus mejores amigos, había sido descubierto, precisamente por Bianca Viteri. –¿Qué hacen ustedes dos aquí y juntas? –Tu madre me dijo que ya era tiempo de conocerme, no sabía que le habías hablado de mí. –Arabella, jamás le he hablado a mi madre sobre ti. –Claro porque te avergüenzas de ella y mira, es una chica preciosa muy digna de ti &
A la mañana siguiente Renán se encontró con los técnicos del laboratorio en las afueras de la casa de Madeleine, mientras despertaban a los niños tomaron la muestra del supuesto padre, luego fue necesario ir hasta la habitación de los trillizos para hacer el procedimiento, ya que todavía estaban adormilados. –En ocho días tendremos los resultados señor Viteri –anunció uno de ellos. –De acuerdo, muchas gracias –agradeció y los despidió. –Maddy, yo también me voy de una vez, te aviso si debo viajar hoy mismo, cuídate mucho, sigue tomando las medicinas y recuerda ir ejercitando poco a poco las rodillas.&n
Maddy escuchó tres toques en su puerta, luego de decir “pueden pasar”, vio como una figura alta ingresaba a su habitación y rodeaba la cama hasta llegar a su lado, se sentó y tomó sus manos: –Regresaste antes. –No podía estar un día más lejos de ti. –¿Es en serio?, no me engañes por favor, ni rompas mi corazón en pedacitos. –No lo haré confía en mí, lo que estoy a punto de decirte realmente no lo he dicho nunca, porque una vez me creí enamorado, pero no fui capaz de expresarlo con palabras, a ti sÍ quiero decírtelo, también me gustarí