¿Por qué demonios te quitaste la m*****a máscara? Alex estaba bastante enojado. ¿Te importa? - Amara se burló. Amara, no cometas el error de rellenar mis limites una orden mía tu no puedes desobedecer - Alex se acercó a la mujer. No eres mi dueño - Amara estaba jugando con Fuego al desafiar a Alex de esa manera. ¿Te consideras muy valiente? Eres mía me perteneces, así lo declara las leyes, el anillo, eres mía por que yo te hice mujer, mi mujer - Alex la fulminó con la mirada al expresar aquellas palabras. Con demonios cómo tú hay que considerarse valientes de lo contrario nos van a pisotear mil veces. Cierra la boca - El hombre se acercó a ella Amara por instinto retrocedió- Quitate la ropa y demuestrame tu valentía. No lo voy a hacer - Se notaba cierta altanería en la voz de Amara. No recuerdo haber escuchado que tu padre me haya dicho que la felina quiera sacar sus garras - Alexander empezó a desprender botón por botón la camisa que traía puesta - Quítate la ropa y no me haga
Amara sentía los nervios a flor de piel, el temor de que Alex la encontrará era exasperante, además no entendía cómo su hermana había logrado esta jugada, recordaba claramente que ella le había dicho que la huida se produciría por detrás de la Universidad después de las 9. Me imaginó que Lorena ya te explicó todo hemos conseguido un mejor escape y sin perder tiempo. Mientras tanto Alexander Santoro estaba enfurecido- Señor no hay ninguna información referente a lo sucedido, pero un Helicóptero salió de la azotea de la Universidad al mismo tiempo que se produjo los disparos. ¿En dónde está el helicóptero? Fue abandonado tomando otro ya solicitamos los permisos aéreos en los aeropuertos ya están varios de nuestros hombres la encontraremos - El Guardaespaldas tenía la esperanza de si la encontrarán de lo contrario Amara junto con ellos había firmado su sentencia de muerte. Habían pasado 4 horas los Mendoza estaban desesperados Alexander los podría torturar- les doy 5 segundos para qu
El misterio de la mirada de Alexander dejó ver los deseos oscuros que en su mente se estaban formando- Preparen todo para mi viaje a Paraguay, pero ojo no quiero que nadie sospeche - Solamente aquel que lo conocía perfectamente sabía que el hombre estaba enfurecido y la ira dominaba su cuerpo. Alexander salió del sitió hasta llegar a su vehículo- Llévame a la Villa luego prepara la base para un entrenamiento duro - Alexander Santoro estaba decidido a hacer pagar de muchas maneras dolorosas a Amara Mendoza su pequeña escapada, sus ojos azules contenían fuego, pero sus manos quería agarrar el cuello de la mujer, Alexander apretó los puños hasta dejar blancos sus nudillos. Eres muy astuta, pero lastima que no eres lo suficientemente fuerte para soportar lo que se vendrá- La sonrisa que se vislumbró en el encantador rostro del hombre hizo que hasta el chófer se sintiera intimidado. Una hora después siendo las 23 horas en Italia el avión Privado del Grupo Sacramento de la Familia Santoro
El descender del avión generó la sensación de estrujar el corazón de Amara, el miedo era un sentimiento que incluso le cortaba la respiración y de tan solo ver a Alexander aquella sensación era peor, ella sabía que Alexander Santoro podría dejarle en claro que los rumores alrededor de él, ella podría sentirlos en carne propia. La intensidad de la Seguridad alrededor del hombre era asfixiante antes de que tomé el vehículo que los llevará hasta la Base, la llegada del Gran Jefe sorprendió a varios todos tenían emociones distintas al saber de su retorno, pero también todos sintieron pena al enterarse de que Amara no había sido secuestrada y que ella misma había planeado su huida. Muchos querían aplaudir sus agallas, pero tambien eran conscientes del peligro en el que se expuso al desafiar la seguridad de Alexander. Al momento en que el vehículo estuvo en movimiento Amara no pudo contener las lágrimas el silencio en el interior de la camioneta era estremecedora y Amara prefería escucha
La mirada gélida de Santoro estremeció el pequeño cuerpo de Amara - Yo lo lamentó - La mujer se armó de valor para expresar aquellas palabras. ¿Lo lamentas? - Alexander se veía aterrador - No me interesa que tanto lo lamentos- Santoro se acercó a ella - Pero no te imaginas cuánto disfrutaré tenerte entre las líneas del dolor y la pasión- Amara al escuchar aquellas palabras no pudo evitar tragar saliva. Observar al hombre despojarse de sus prendas reajustar la corbata de una manera tan elegante con su encanto personal un seductor era mucha tentación, pero para Amara solamente había un significado y era Peligro. La pequeña habitación tenía una cama y Amara tenía una vaga sospecha de lo que podría ocurrir - Levántate- Su voz era demandante obedientemente - Quítate la ropa - La frialdad en voz asustaba a Amara, pero ¿Que podía hacer ella? La respuesta siempre es clara ella no es oponente para él. Lentamente con sus manos temblando empezó a desvestirse ante los ojos azules del hombre s
Señorita - uno de los hombres de Santoro se había percatado de la presencia de Carol - El Jefe prohíbe que alguien entre en el calabozo. Y no hay nada que el dinero no pueda hacer se perfectamente que tienes varios problemas económicosy que más allá del dineral que Alex te paga los juegos te llevan a la perdiciónasí que en lugar de que ellos te maten y a tu familia ve aseguralos y vuelve - Carol sonreía entregando una buena cantidad de dinero al hombre - Desaparece el no se dará cuenta de absolutamente nada porque pienso tardarme bastante - Luego de esas palabras el hombre obedeció y se alejó. La puerta fue abierta para Carol sus ojos deleitan el odio que sentía hacía Amara - Despierta Princesa - Carol Montalvo estaba jugando con Fuego, pero no le importaba correr con los riesgos. ¿Que quieres? - Amara no quería hablar con la mujer. Amara no dudaba de que Alexander enviará a la mujer para seguir torturandola. Responde m*****a sea - Las manos de Amara recibieron un latigazo logrand
Los disparos se escucharon hasta la habitación de Carol una sonrisa de arrogancia se había dibujado en su rostro, ahora solamente debía manipular a Amara para que no hablara, a veces las cosas sin planearlas sale mejor.Alexander había vuelto a la habitación en donde estaba Amara, no sin antes dar ordenes explícitas de que el cadáver del hombre fuera levantado, al momento de entrar y ver a Amará recordó las palabras del hombre, el rostro del Mafioso se había endurecido.Mucho reposo - Expresó David al notar la presencia de Alexander - Alex no vuelvas a hacerlo.No fui yo - Alexander podía ser sincero con su amigo.Piensas que soy tan estupido para creerte aquello, Alexander se perfectamente el odio que sientes por ella, porque no eres capaz de soltar el pasado - David lo había recriminado descaradamente- Y no me salgas con que Julia no merecía aquel final porque entonces seremos justos Julia era tan inocente cómo Amara ahora, además tu matrimonio con ella es para hacerla sufrir a ella
Alex - Susurró Carol aunque el malestar en su estómago la dejaba sin respiración no sabía cómo se estaba manteniendo aún de pie sabiendo perfectamente todo lo que acaba de decir.Te quiero en mi despacho Carol - La voz del hombre era mortalmente fría- Ahora - Espetó Alexander Santoro intentando de mantener la compostura evitando que la furia se apoderará de él. La mujer muerta de miedo salió de la habitación - ¿cómo te sientes? - Le preguntó el hombre a Amara esta vez sin contenerse y la acarició, mientras que Amara estaba bastante confundida, pero prefirió no responderle la pregunta a su marido. Alexander lanzó un suspiró pesado y salió de la habitación y la duda de Amara estaba en el ¿porque Alexander se había enojado, podría ser que el no ha ordenado nada? No eso no puede ser - Se dijo ella misma - Estoy segura que esta enojado con ella por querer ir encontra de sus órdenes y ayudarme a escaparme. En el despacho Carol se estaba acabando las uñas de tan ansiosa que estaba, los ne