LA LUNA MÁS HERMOSA
LA LUNA MÁS HERMOSA
Por: Tsukimorikan
Capítulo I...

Cuando vio aquel ataúd, supo que ya no había marcha atrás, cuando vio más abajo y vio aquel abultado vientre, supo que había perdido su razón de vivir, ya no podía hacer nada más por ella y por el bebé que tristemente se fue con ella, sus ojos se cerraron nuevamente y las lágrimas caían lentamente por sus mejillas, hasta que recordó algo importante, aún no habían pagado aquellos que le hicieron tanto daño a su amada así que se dirige hacia la casona de su manada en donde atados con cadenas de plata estaban ellos, su supuesta destinada y los padres de esta...

-Con que, ustedes tuvieron que ver con la muerte de Estefanía ¿verdad?

-Alfa Caín...nosotros, ella era una perra arrastrada

Caín hace sonar sus dedos, y uno de sus leales soldados golpea a la mujer que se atrevió a abrir la boca, la mujer cae al suelo y escupe sangre pues no solo el golpe debió dolerle seguramente le ha roto algún órgano interno.

-Vamos a ver, entonces ustedes, no solo difamaron a Estefanía, ordenaron encerrarla, golpearla y hasta violarla...¡¿acaso tengo que consentir estos actos?!

Haciendo que todos bajen la cabeza de golpe, puesto que ha usado su voz de mando para callar a todos...

-¡Usted no pudo enamorarse de esa perra! ¡es solo eso una perra! ¡Alfa Caín, tenga piedad de mí de mis padres!

-Nunca...nunca tendré piedad con ustedes ¡que esas dos perras sufran lo mismo que sufrió Luna Estefanía! ¡que este maldito perro presencie y luego que sea arrojado al fuego!

Y así la familia esa, es condenada al peor de los castigos...

Caín salió esa noche, al ver la luz de la luna llena sentía como el peso de sus acciones lo mataban poco a poco, no solo el hecho de que su lobo interno dejó de comunicarse con él, o que simplemente al ver morir a Estefanía, su corazón sufrió una herida peor que una causada con plata.

Ya no podía hacer nada salvo intentar seguir adelante y pedir a la Diosa Luna que por consideración a su arrepentimiento le permita volver a encontrar a su Luna, o bien puede optar por otra opción, más practica y fácil, reunirse con Estefanía y su hijo no nato...

Así que se dirige al acantilado del cual Estefanía se arrojó, luego de jurarle que él nunca encontraría a su Luna nuevamente y puede ver al cielo que está pintado por la Luna Llena y mientras derrama lágrimas simplemente recuerda aquellos bellos ojos grises que nunca más volverá a ver, pues ahora que ha perdido a la luz de su vida, ya no puede hacer nada.

....

Cuando sus ojos volvieron a abrirse, estaba en su sala de juntas, a punto de condenar a Estefanía al encierro perpetuo, por haber “atacado” a Briseida, su supuesta Luna...

-Alfa Caín, debemos condenar a esta desgraciada por atacar a su Luna – dice Mirna la madre de Briseida

-Alfa Caín, usted debe poner el ejemplo con esta perra miserable – dice Mario el padre de Briseida y Estefanía...

-Y bien perra ¿no tienes nada para decir? Vamos confiesa tu crimen...

Pero Estefanía está en silencio, simplemente mirando al suelo, pues ella ya no se defenderá más, está cansada de que nadie ni siquiera aquel que de niños jurara protegerla haga algo por ella.

Caín se coloca de pie y todos se acerca para ver como el mismo alfa de la manada se acerca a terminar con esa desgraciada que quiso atacar a su próxima Luna, pero nadie contaba con que Caín atacara a golpe de puño limpio a Briseida, todos quedan en shock menos Estefanía quien simplemente mira, como quien apenas observa todo con la lentitud de una película...

- ¡¿Cómo te atreves a levantar falsos contra mi Luna?! ¡maldita desgraciada!

- ¡Alfa Caín por favor deténgase, no haga daño a mi hija! ¡es su Luna!

- ¡Yo no tendría por Luna a una perra miserable como ella! – dejando a Briseida tendida en el suelo y sangrado por cada agujero de su cuerpo – ahora mismo ustedes dos e disculparán con Luna Estefanía o les juro que haré que presencien la muerte de esa perra…

Los padres de Briseida miran y apenas se dan cuentan de que Caín está hablando enserio.

-Lo…lo sentimos Luna Estefanía, nosotros no quisimos levantar falsas acusaciones en su contra

-Estefanía querida – ayudando a la joven a colocarse de pie y la libera de las cadenas – ¿estás…

Pero no alcanza ni a hablar cuando su rostro está girado y su nariz y labio sangrando.

-Estefanía…

- ¿Es enserio? ¿acaso voy a creerme este teatro tuyo?

-Yo…yo…

Estefanía se acerca y susurra a Caín las peores palabras posibles – te dije el día que morí que nunca tendrías a tu luna a tu lado

Caín queda en shock al escuchar…

-Estefanía – viendo como la joven hace que sus ojos cambien de color – no, por favor…no lo hagas

- ¡Qué me escuchen todos los miembros de la manada Cristal Palace! ¡yo Estefanía Fiore, declaro que rechazo a Alfa Caín como mi pareja destinada! – Caín queda en shock y se lleva las manos al pecho – ¡rompo todo lazo con él y rompo todo lazo con el cachorro que espero!

Todos quedan en shock, pero en el acto su foco de atención cambia al ver a Estefanía abrazar su vientre y desplomarse…

-¡¡¡Estefanía!!! – tomando a la joven en brazos – ¡vayan por el médico!

-Alfa Caín ¿Qué hacemos con estos sujetos?

-Que se larguen de mi manada… ¡que se larguen de mi manada! – mientras corre con Estefanía en brazos

El médico batalla contra la fuerte hemorragia que tiene la joven loba, pero aunque lo intenta no puede impedir que el cachorro se pierda, cuando se le informa a Caín, un tétrico aullido recorre las montañas y bosques…

Cuando este se dirige a ver a Estefanía ella está dormida, apacible como si nada pudiera lastimarla, pero él sabe que le hizo mucho daño desde que esa maldita de Berenice volviera a la manada, él se encargó de hacerle daño a su Luna, y no conforme con eso…perdió a su hijo, al cachorro que era el fruto del amor sincero que Estefanía pudo ofrecerle.

Estefanía despierta después de par de horas, a su lado están Caín y la hermana de este Larisa, mientras que los demás lobos de la manada están expulsando a la familia Fiore de la manada…

-Estefi…

-Cállate y lárgate, Larisa…no vengas ahora con que somos amigas, porque no te creo nada – mirando con desprecio a la joven

Esta baja la cabeza en señal de disculpa…

-Estefanía, por favor…aún hay tiempo, la luna…

-Yo te rechacé…sé un alfa y acepta el rechazo…

-No, no puedo aceptarlo, eres mi Luna…

-Vete con la puta de Berenice, yo no soy nada tuyo, pero bien que te gustó follarme… ¿lo hiciste para darle celos a esa desgraciada? ¡¿verdad?!

Caín solo puede bajar la cabeza.

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