MI LUGAR FAVORITO POV ANA LUCÍA GAITAN Desperté con las primeras luces del amanecer, las cortinas como siempre corridas dejaban entrar los rayos de Sol bañando mi habitación de la clara luz otoñal del alba. El olor a sexo mezclado con Paco Rabanne aún rondaba el ambiente y mordí mis labios al observar el cuerpo masculino que dormía de espalda a mi. Me había abrazado buena parte de la noche, me temo que durante todo ese tiempo estuvo depierto viéndome dormir.La sensación de adoracion que veía en sus ojos me llenaba de un nuevo placer.Cómo si su piel me llamara mi mano recorrió su columna vertebral desnuda. La espalda musculosa, el trasero redondo y duro como una roca, su cuerpo entero esculpido despertó otra vez mi deseo y mordí mis labios admirando la belleza masculina perfecta.Pensé en dejarlo dormir un poco más, pero después de valorarlo lo mejor sus días estaban resultando ser demasiado ajetreados y lo mejor sería que estuviera en la Casa Real por si algo se le ofrecía a su ma
TENEMOS UNA CITA EDUARD DE AMBER REY DE VARSOVIATotalmente saciado como hacía años que no me sentía bajé las escaleras del segundo piso de casa de Ana Lucía, ambos llevamos el cabello mojado por las «cosas» que acababan de ocurrir en esa bañera de la Ninfa que ataviada como la más seria y sensual de las ejecutivas caminaba tras de mi.Me giro un instante sobre mis talones en la escalera para recordarle algo y se me borran hasta las ideas al toparme con sus sensuales piernas torneadas ataviadas con medias, liguero y unos zapatos de tacón que junto con todo su atuendo conforman un cuadro que es una put@ fantasía sexual. No es que no la hubiera visto mientras se vestía, es una ddesde esta posición todo lo sexy del le magnifica. No sé si es que estoy absolutamente loco por ella, o que es cierto que Ana Lucía es una diosa divina, una diosa divina que es solo mía, y el hecho de tener esa certeza me arranca una sonrisa estúpida que podría durarme una semana entera de lo poderoso y feliz
UN TE AMO PERECEDEROEDUARD DE AMBER REY DE VARSOVIAEl auto atravesó los límites de la casa real, y ella en silencio apartó poco a poco su mano de la mía. Ese sencillo gesto no me gusto; pero no podía hacer nada para remediarlo por el momento. No se le impone a una mujer la idea de ser la máxima regente de un país de la noche a la mañana.Ana Lucía era demasiado desinteresada, desprendida y parecía que no había dinero o poder en el mundo que la pudiera corromper. Eso me gustaba tanto de ella… pero también me asustaba, porque ella no tenía ninguna pretensión en ser reina del país… y yo no tenía otra opción que ser el rey.Me daba miedo que sus intereses se alejaran demasiado de los míos, que la propia vida nos separar ahora que nos habíamos encontrado al fin.En algún momento tendríamos que hablar del tema, me temía que mi interés por ella no iba a ser pasajero. Ahora solo me restaba saber que estaba sintiendo ella por mi, aunque me sospechaba que era demasiado intenso y a riesgo d
LA NOCHE Y EL DÍA EDUARD DE AMBER REY DE VARSOVIALa vida es una total ironía pienso mientras camino con ella de mi mano, pensar que antes no la conocía… ni siquiera sabía de su existencia y un día de la nada la vi… y hablamos y la química que sentí me estallo en el rostro. Ese día en mi despacho supe que si la dejaba entrar ella tendría un impacto en mi vida… ya veo que no me equivoqué por que ya no logro verla como otra cosa que no sea como mi mujer con todas las implicaciones que eso trae consigo.Avanzamos atravesando los grandes corredores de la casa real. La guardia real nos mira, pero lejos de extrañarse me miran con un poco de sana envidia, por la mujer que llevo de la mano y no dudo que deben estar pensando como un bastardo insufrible como yo pudo conseguir a una belleza como esa.Ella saluda a todos sintiéndose un poco tímida, pero aún así no pierde esa costumbre de considerar a todos como iguales, y a tratar a todos con respeto .Entramos tomados de mano, y ella con paso
CAOS Y VERDADPOV ANA LUCÍA GAITAN Jamás borraría de mi mente la expresión de desprecio que vi en la reina cundo noto que la mano de su hijo y la mía venían juntas. Si bien ya sabía que yo no era de su agrado y que la primer impresión que había dado no era la más favorable, también estaba el hecho que no podía uno juzgar a otro individuo solo porque si.Con un nudo en la garganta, camine hacia el despacho de Eduard, rogando por que las visitas que me había anunciado esta mañana ya hubieran desaparecido. La euforia que me había provocado el hacer el amor, ya no estaba y ya no me sentía tan asegura de mi misma.Me preocupaba que mi pasado saliera a la palestra pública. No sentía vergüenza de lo que yo había hecho, ni de contarle a Eduard como habían estado las cosas… pero obviamente la versión menos creída en esa penosa situación fue la mía. No habían pruebas que me acusaran, pero su había un testigo que cometió perjurio y me inculpó en pleno juicio, además de que el juez era un corr
CAOS Y MENTIRASEDUARD DE AMBER REY DE VARSOVIA—¡Me golpeó!,¡Esa perra me golpeó! —chilló Mary Luz y me interpuse entre ella y la puerta no permitiría que saliera tras Ana Lucía bajo ningún concepto.El ambiente era pesado y Gardeny Blackaster solo me miraba con cierto desencanto y rencor.—¿Desde cuando?—preguntó con voz queda y sabía exactamente a qué se estaba refiriendo—¿Desde cuando? ¿Quién te contagió? ¿Cómo pudiste ocultarme algo así esa noche?—Te dije… te pedí mil veces que te fueras Gardeny, o que te abstuvieras a las consecuencias— le recordé y ella negué lo con la cabeza. Era consciente de que la había intentado alejar desde que llegue al principado, pero ella se empeñó en acosarme hasta que se metió en mi habitación en plena madrugada.—¡pensé que era por otra causa tu insistencia en que me fuera!¡Dios!Esas más que consecuencias parecen castigo divino.—¡Lo siento Gardeny! De verdad lo siento… pero no podía decírtelo— me disculpe con sinceridad y con profundo pesar en
EN LO PROFUNDO POV LUCÍA GAITANEduard regresó a la estancia alrededor de veinte minutos después. Camilo ya me había dejado sola, pues según él el palacio está convertido hecho un total caos después del fallecimiento del rey. Sobre todo con los preparativos de la coronación. El único que no parecía enterarse de nada era el príncipe que desde hacía días andaba en una nube de humo.Así que cuando Eduar entró solo estábamos nosotros dos en la enorme habitación. Me puse de pie tan pronto lo vi entrar, se le notaba tenso y desencajado. Cómo si esa discusión le hubiese golpeado el Alma. Aún con el celo fruncido por la ira se veía hermoso. Lo amaba tanto que había aprendido hasta amar sus enojos.—Ya se fueron— me informó con voz cansina al entrar.— Gardeny va rumbo al areopuerto de regreso a Mónaco… de donde nunca debió salir. Ella no dirá nada de mi enfermedad… lo prometió y creo algo en ella.—¿Y Mary Luz? — pregunté porque me parecía realmente que esa mujer era un peligro potencial
ME ENAMORASPOV ANA LUCÍA GAITAN.Tal y como sospeche la visita de Camilo Condil no era casual. Las últimas distracciones me habían hecho descuidarme de mi trabajo, y otra vez las cuentas estaban en números rojos.Enseguida nos cambiamos y mi padre me abordó antes de que nos marcháramos.—Parece un buen muchacho— musitó aprovechando que estuviera yo sola.—Se le nota embobado cada vez que te mira.—Es un buen muchacho —confirmé sonriendo— el mejor de todos, y creo que yo también lo miro con cara de tonta enamorada.—¡Confirmo Cien por ciento y con conocimiento de causa !— espetó mi padre — Sí es cierto que pones cara de estúpida cuando lo tienes en frente.—¡Papá!— lo regañé— ¿Desde cuándo sabes que tengo algo con el príncipe?—¡Ah!¡Eso! Desde que Bill me contó que los vio besándose en el océano— expresó con total naturalidad mi padre como si hablara del clima y no de mi vida privada.—¡Ese Bill es un viejo chismoso de lo peor!— acoté dramátizando enojo.—¡Ya los sabes! Lo que no quier