Me transforme en lobo y empecé a caminar primero, se supone que en rey no debería ir a la primera línea de ataque, ya que era la más propensa a tener bajas, pero sentía que era mi deber estar a la cabeza de todos los hombres que estaban a punto de arriesgar la vida por mi y por el reino.
Llegamos a mitad del camino que nos llevaba al palacio, todo estaba abarrotado de los hombres de Egor. Pude distinguir el palacio a lo lejos, me daban unas náuseas profundas saber que esos indeseables habían tomado mi hogar y que ahora debíamos recuperarla y salvar a mis inocentes hermanas de esos traidores.
—¡Ataquen!—grite empezando la batalla inundado de la cólera.
—¿Estás bien?—dijo Matthew entrando a mi habitación—. Pensé que después de todo lo que paso te quedarías en el palacio.No lo mire, estaba tan sumergido en mi autodesprecio que no tenía palabras.—¿Estás herido?—se acercó a mí— en ese caso deberíamos llevarte al hospital...—Estoy bien—dije interrumpiéndolo—Entonces porque tienes cara de muerto—después tuvo un gesto de haber recordado algo—. En la reunión dijeron que Evangeline era tu mate...Me levant&eacu
—Estuviste a punto de perder al niño Rosali—me regañaba Dylan—. Tú oíste al doctor, no puedes tener fuertes impresiones.—Pero yo solo quiero acompañarte al hospital a ver a todos los heridos—lo mire triste—. Se supone que voy a ser una reina o luna ¡lo que sea que signifique eso !—Todos intentarán acercarse a su futura luna y eso podría abrumarte— dice saliendo de mi habitación—. Es mejor que descanses.Se despidió de mí y se retiró.Me levanto aburrida y me dirijo hacia el despacho de Oliver.—Varias manadas quieren atacar a l
—Yo me voy antes de perder los estribos—dice Alan saliendo del lugar.—No te haremos daño, ¿Sí?—Jaime se acerca lentamente al vampiro—. Solo queremos hablar contigo.El vampiro sigue temblando y mira asustado a Jaime.—¿Cómo te llamas?—Jaime se arrodilló a su altura—. Por tu olor puedo percibir que no ha pasado mucho desde tu transformación, ¿No me equivoco cierto?.El niega con la cabeza.—¿Pasó hace un par de meses?Asiente con la cabeza.
—¿Te encuentras mejor?Matt palmea mi espalda mientras yo intento calmarme.—Estoy harto—levantó la vista—. Se supone que cuando tocas fondo, no hay otra opción que las cosas mejoren; pero parece que, en vez de levantarme, el destino quiere que cabe un hoyo y caiga más bajo.—No exageres, se que todo parece oscuro ahora—Matt estaciona el auto—. Después de todo lo que has pasado comprendo que seas pesimista, pero no todo está perdido para ti, nos tienes a nosotros, tienes un hijo que lo único malo que tiene es que se parece a ti.Sonrió por la ocurrencia.
—¡Lauren para!—dice siguiéndome—. ¡Lauren!Sigo corriendo ignorándolo nuevamente.—¡Suéltame!—digo intentando quitar su mano de mi brazo izquierdo.—¿Puedes escucharme?—¡No quiero!De pronto noto como su mirada se vuelve amarilla.—Tus ojos...El no me responde, se agacha y me levanta sobre su hombro.—¡Jaime, bájame!
ESPECIAL ALAN Y LUCY—Hay más de trescientos heridos aún en el hospital—dice DylanAlan mira las hojas con los nombres de los heridos, se encontraban en una de las oficinas administrativas del hospital principal—Son de mayoría de edad ¿Por qué no se recuperan rápidamente?—pregunta Alan frunciendo el ceño.—Porque fueron atacados con hechicería—dice Dylan—había un hechicero de magia oscura en la pelea.&
ESPECIAL DYLAN Y MATT—¿No crees que está algo lejos?—Matt miraba el lugar asombrado—. No te negaré que el lugar es hermoso, pero a los invitados les va a costar llegar aquí.—Me importa un rábano—Dylan caminaba emocionado por el lugar—. El altar donde diremos los votos será ahí—señaló el hermoso manantial—. Mandaré a comprar más hortensias para adornar el techo.—¿Qué techo?—preguntó Matt extrañado.—¿Cuántas veces te lo que tengo que explicar?—Dylan miró impaciente a Matt— Mandaré a poner una estructura de madera alrededor del lugar, est&aacu
ESPECIAL JAIME Y LAUREN—¿Qué haces?—preguntó Lauren sentándose al lado de Jaime.Puso una taza de café en el escritorio donde Jaime trabajaba, apoyó su cabeza en su hombro y observó distraídamente lo que escribía su novio en su ordenador.—Tengo que hacer unos pedidos a distintas manadas—dice sin dejar de escribir—. La madre Dylan necesita muchas plantas medicinales para poder ayudarnos.—Son las tres de la mañana—le reprocha Lauren.—Estoy acostum