acá estoy. no me he ido
Maratón 2-3 Capítulo 88: Lo que es mío nada ni nadie me lo quita. Edan le masajeaba la espalda con movimientos suaves y le lavaba el cabello. Su toque era delicado, como si estuviera manejando a una niña, pero no era por falta de confianza en sus esfuerzos, sino porque le preocupaba no lastimarla aún más. Kath se sentía aliviada al sentir el masaje en su espalda y las manos de Edan en su cabello, era como si todas las tensiones del mundo se desvanecieran. Pero no lo había resistido más, sentía un nudo en la garganta que no la dejaba respirar con normalidad y de pronto se vio llorando desconsoladamente en los brazos de Edan, su cuerpo temblaba por los sollozos y el agua tibia de la ducha todavía caía sobre ella, ahora mojándolos a ambos, pero Edan se preocupaba más por el bienestar emocional de Kath que por sí mismo, no le importaba si se mojaba o no. La tomó con fuerza, bueno no con una fuerza extrema, solo con la necesaria para sostenerla cuando sus piernas flaquearon, así estaba
Maratón 3-3 Capítulo 89: ¿Por qué lo veía así? Edan y Kath había llegado al área de pediatría, específicamente donde tenían a los bebés en incubadoras, estaban viendo a los bebés de la habitación a través del vidrio cuando una enfermera algo robusta y de unos cuarenta años salió al verlos llegar. —No pueden entrar a esta área — habló la enfermera — y usted debe estar descansando — dijo mientras veía a Kath agarrando el paral donde estaba colgando la bolsa de la intravenosa. — Solo quiero ver a mis hijas. — dijo Kath sin quitar la mirada de dos incubadoras que estaban justo frente a ellos. —Señores por favor, no es momento de que estén acá y… —A ver ¿me está diciendo que no podemos ver a nuestras bebes? — dijo Edan con autoridad, no era que él quisiera imponerse pero… si, si quería. Él no le quito la vista en ningún momento a Kath que ahora estaba con la mano en el vidrio que la separaba de sus bebas. La enfermera como que algo le había hecho clic y entendió en ese momento de q
Capítulo 90: Para ti y nuestros hijos Dos semanas habían pasado desde que Kath había sido rescatada de las garras de su ex y su padre. En esas dos semanas habían ocurridos cosas buenas: Su hermana ya estaba dada de alta médica una semana después de haber ingresado, tanto ella como el bebé que se llamaba Keith, estaban fuera de peligro alguno, el bebe había nacido sano, y era un gordito hermoso. Conoció a la pareja de su hermana, un buen hombre por cierto, divorciado de unos cuarenta años, la verdad no recordaba bien la edad, porque bueno le llevaba como diez año, pero le daba igual, lo que le importaba a Kath era que tratara bien a su hermana y que le diera el amor que realmente necesita. Porque después de todo lo que ella había pasado con los dos personajes mal vivientes lo que más necesitaría era amor y un apoyo incondicional, ella lo tenía de Edan y su familia pero. Las niñas estaban totalmente fuera de peligro alguno, como se había dicho antes las niñas habían nacido con los
Capitulo 1....- Llego en una hora a tu casa.- Ok, aquí te espero.-¿Estas seguro que no hay problema en quedarme un tiempo en tu casa? No quiero que tengas problemas con...- Tranquila, no te preocupes, voy a estar solo por un mes, ya veremos cómo hacemos en ese tiempo, lo más importante ahora es tu tranquilidad.-Gracias, no sé qué haría sin ti.-Lo se, lo sé, soy lo máximo, después me lo agradeces, cuando estés abajo me avisas.- Ok, nos vemos.Una leve sonrisa es lo que le doy a la pantalla de mi teléfono al descolgar. Pocos minutos después estoy llegando a la entrada del lujoso edificio, el taxista me ayuda a bajar las dos únicas maletas que me acompañan, me coloco mi cartera y me dirijo con el equipaje a la entrada para así llamar a mi amigo. Batallo un poco para entrar por las puertas de cristal, hay una joven rubia en la recepción del edificio, a lo que me acerco para darle las buenas noches y decirle que anuncie mi llegada.-Disculpa pero no figuras en la lista de visi
Despierto y son las diez de la mañana.¡Dios!, no lo puedo creer, estoy de vagabunda y no me gusta estar sin hacer nada, ya llevo una semana aquí y me siento una completa mantenida, hablaré con Ethan, necesito trabajar, hacer algo, aportar en los gastos de la casa. Me ducho y voy a desayunar, la señora Ana, la nana y ama de llaves me prepara el desayuno, y decido ayudarla con la limpieza, este departamento es enorme, solo pensar que tiene tres habitaciones con baño cada una, me da dolor de cabeza, gracias al cielo no soy la única que va a limpiar este enorme lugar. Al medio día escucho el timbre, y unas voces, son las muchachas de la limpieza, llegaron tarde, y la señora Ana las regaña por eso. Estoy en la habitación de Ethan así que puedo escuchar todo con claridad ya que están en la entrada del pasillo y la puesta de su habitación está un poco abierta.-Al señor D'Angelo no le va a gustar que hayan llegado tarde, ustedes saben cuál es su horario de trabajo. - le dice Ana.-Bueno,
Nuevo día, y la ansiedad me consume, no sé cuál es el trabajo que me va a proponer Ethan y eso me tiene nerviosa, no es que no pueda trabajar en lo que sea, mientras sea honrado, solo que él no saber las cosas me desespera y eso el lo sabe.A las ocho de la mañana el chófer de Ethan me deja en el estacionamiento subterráneo de la empresa, nunca había venido, de echo aún no se a que se dedican el y su amigo, y es que desde que lo conozco no me a importado más que su amistad y compañía, soy un poco despreocupada y confiada con él por esa parte.— Señorita, el señor me dio instrucciones de escoltarla hasta su oficina.— Está bien señor Jones, la verdad nunca eh estado en este lugar y es un poco intimidante semejante lugar. Subimos en un elevador privado que va hasta el último piso, según Jones solo los presidentes de la empresa pueden usar ese elevador, le iba a cuestionar el porque nosotros lo estamos usando pero en ese momento las puestas se abrieron y salimos rumbo a el escritorio d
El día ha sido agotador, estos tacones me están matando, Carolina, la otra secretaria me ha puesto al tanto de todo lo que debo saber, no es nada del otro mundo pues ya trabaje antes este oficio, D'Angelo Enterprise, es una de las compañías más reconocidas a nivel nacional por contar con la mejor tecnología, a parte de que adquieren pequeñas empresas para que produzcan más y de mejor calidad, a parte de que tienen varias discotecas a nivel nacional. Mi oficina es espaciosa tiene vidrios polarizados que dan hacia el exterior y puedo contemplar todo New York desde las alturas de este enorme edificio. No dejo de pensar en el hermano de Ethan, llegará en un par de días por lo que me contó.Espero que él no sea una mala persona, espero y tenga el mismo carisma de Ethan, aunque me he dado cuenta que es un poco frío y distante con los empleados.Es medio día y tengo un hambre de muerte, Así que decido tomarme un Descanso e ir a comer algo en la cafetería que vi en frente, así que me encam
—No tienes por qué ser tan duro con los demás. — le digo un poco bajo para ser discreta, él se acerca a mi oído y me dice:—El no es de confiar. Y tú me importas mucho para dejar que algún imbécil te lastime.Sus palabras hacen que mi corazón de un brinco de alegría, ningún hombre me había hablado así y mucho menos me había tratado tan bien, el me hace sentir un sin fín de cosas que no le quiero poner nombre aún.Ethan se sienta más junto a mi cuando llegan nuestros pedidos, mientras comemos Él me acaricia mis piernas debajo de la mesa, por poco y me ahogo, toso un poco y el me da unas palmadas en la espalda para luego acariciarla, Dios este hombre va a matarme.—¿Estas bien? — me pregunta, él sabe que no estoy bien así que lo fulmino con la mirada, o eso intento.Estoy tan ruborizada que Carolina me pregunta si estoy bien y yo solo le puedo responder asintiendo dándole a entender que si.Pocos minutos después Ethan se disculpa pues tiene una llamada importante que atender.—¿Seguro q