Bueno mis queridas lectoras, por acá estoy con un nuevo capítulo largo. les recuerdo que no voy a dejar la historia, solo voy poco a poco porque se me está haciendo complicado, pero voy de a poco.
Capítulo 70: Si, amo. Cualquier pensamiento que pudo haber tenido Kath con respecto a ser una buena madre o no quedo en el olvido en el mismo instante en que esa le pellizcó uno de sus pezones —¡Ay!— se quejó. —¿Te dolió?— le dijo acomodandola de manera que quedara a horcajadas sobre él, para contemplarla mejor. —Pues sí. —Pobrecita, pero era necesario. —¡Pero si yo no hice nada!— exclamó alarmada, ya se estaba poniendo nerviosa, y más al ver cómo Edan se mordía el labio inferior al tiempo que la recorría con la mirada, nunca, jamás le había visto una mirada tan hambrienta. —¿Que no lo hiciste?—la agarró de las caderas acomodándola justo sobre su enorme erección. Kath trago grueso porque a pesar de que él solo llevaba un pantalón de pijama era imposible no sentir a su… Edaconda marcarse, no la estaba viendo pero podía jurar que si se quitaba de sus piernas el pobre pantalón se rompería. Y para qué mentir si ella ya estaba comenzando a sentir como su centro se calentaba.
Capitulo 71: Lo normal es aburrido Edan sonrió, joder que sentía que se le saldría el corazón de pecho, como amaba a esa mujer. —Bien, confiaste en mi desde la primera vez que follamos para darte tu primer orgasmo, confiaste en mi para cuidarte ahora te pido que confíes en mí para saber cuándo me tengo que detener, no voy a hacerte daño. Ella respiro profundo y asintió ¿Cómo no confiar en un hombre que cruzó todo un país para buscarla y de paso pauso su trabajo para quedarse con ella para cuidarla? El la sujeta del cuello haciendo un poco de presión para besarla. —Tengo algo para ti— metio la mano en el bolsillo del pantalón y saco la cajita rectangular de color negro no era muy grande quizá de unos cuatro por quince centímetro. Lo dejo frente a ella quien lo miraba extrañada, lo tomo con manos temblorosas ¿Porque demonios estaba temblando? Ah sí, porque iba a folmarla y sin su palabra de seguridad y de paso no sabía que demonios le haría. Por supuesto que estaba temblando.
Capítulo 72: ¿Aún quieres seguir siendo descarada?Era la combinación más excitante que estaba sintiendo ella en ese momento, se sentía tan llena que era imposible no gemir. Edan la sostenía de las caderas clavándole los dedos en la piel mancandoselos notoriamente al tiempo que se enterraba en ella con un hambre incontenible. La desea y Dios sabe cuánto lo hacía. Había esperado tanto por ese momento que ahora que la tenia en sus garras no iba a soltarla hasta estar lo suficientemente saciado como para dejar que ella descansara un rato. Así que ahí estaba el enterrandose en ella con violencia, tanta que el choque de piel con piel era amortiguado con los gruñidos de él y los gemidos de ella. Musica para sus oídos. Con cada estocada Edan azotaba su trasero, a tal punto que ella chillo de dolor. Y paró al ver las lágrimas en sus mejillas. Y justo antes de Edan correrse en el interior de Kath, la puso de piel con el pecho pegado al borde del balcón, ella pudo ver las masetas del p
Capítulo 73: Quiero una respuesta ahora, gatita Los brazos de Kath parecían gelatinas semi cuajada, las piernas le temblaban, bueno, todo le temblaba a decir verdad. Para cuando Edan le quitó las restricciones ya se le había cómodo el coño, dos veces y la había dejado al borde del orgasmo un par de veces y aún así no la dejo correrse en ningún momento, después de todo era un castigo, pero con lo masoquista que era, lo estaba disfrutando a lo grande. La dejo en una de las tumbonas del balcón pero si creía que el castigo se había terminado pies estaba equivocada, Edan tenía una última ronda de buena follada para ella. Ya el sol estaba ocultándose, el cielo estaba pintado en un color naranja y rosado que hacía del momento más romántico e inolvidable. Se metió en medio de sus piernas y entro en ella de forma lenta, tanto que Kath lo sintió como una verdadera tortura, y el sonrió con malicia porque sabía que ella estaba muy sensible y con ganas de poder correrse pero no la dejaría n
Me perteneces Capítulo 74: El momento fue épico— Tienes que contarme Todo — le dijo Zoe a Kath, estaban en la sala de estar en la casa de Zoe, junto con Diana, quien había ido a preparar café — Pero ya te conté todo. — le dijo Kath mientras subía los pies al sofá abrazando sus piernas. Obviamente no se le veía la panza, apenas había pasado una semana desde que estaba de regreso pero igual se sentía más segura ocultándola. —¿Estás segura?— dijo Diana acercándose con una bandeja con tazas de café. Kath agradeció por el café cuando lo agarró — ¿No hay algo que quieras contarnos?Kath tosió después de haber dado el primer sorbo, pero no porque se ahogara, sino por la pregunta que le hacían y la forma que la miraban… ¿Acaso sabían que estaba embarazada? ¿Edan se lo dijo?De pronto sentía la boca amarga, y el estómago revuelto. ¿El no le había dicho nada cierto? ¿Entonces por qué le preguntaban aquello? —No se que podría contarles, ya les dije todo lo que había pasado desde que me fui
Me perteneces Capitulo 75: El bendito anilloLa sala estaba en silencio, un silencio que duró muy poco porque Zoe y Diana chillaron de la emoción, Zack y Ethan se palmearon los hombros, ambos tenían un nudo en la garganta, y… bueno, las mujeres ni se diga, Zoe y Diana ya tenían los ojos cristalizados con un par de lágrimas rodando por sus mejillas. Así de emocionadas estaban. La alegría era casi palpable en la familia, hasta la pequeña Selena brincaba emocionada, diciendo que quería que fueran niñas, para vestirla con los vestidos de sus muñecas. Edan se había quedado dormido en las piernas de Kath con la nariz pegada a su vientre, mientras que ella le acariciaba el cabello que ya lo tenía un poco largo en la parte de arriba. Era una imagen muy tierna y Zack no perdió la oportunidad de capturar el momento, en la foto no se veía a Edan dormido sino más bien como si le estuviera hablando al vientre de Kath. Envío un mensaje a un par de amigos adjuntando la foto, diciéndoles emocio
Me perteneces Capitulo 76: No encuentro a KathCinco meses después. —¿No Sería mejor si entramos por partes? — pregunto Dereck en la sala de espera, estaba por entrar a la consulta con la ginecóloga, porque sí, desde que supieron que Kath estaba embarazada no se perdían una consulta, no habían tenido la oportunidad de estar todos juntos, en las citas anteriores los señores D'angelo no habían podido asistir por estar en reuniones de trabajo y solo podían ver las imágenes en video llamadas, no era lo mismo obviamente, así que en esta consulta tanto Ethan como Zack pospusieron cualquier reunión o viaje de trabajo. Derek también los acompañaba, había terminado con una redada y estaba con la familia tenía el uniforme del equipo táctico, junto con tres de sus compañeros que estaban de pie con caras de culo asustando a las pacientes que esperaban su turno. No era necesario que estuvieran pero a Derek le encantaba el drama así que ahí estaban ellos de piel en las esquinas de la sala de es
Me perteneces Capítulo 77: Se encargaría de hacerlo sufrir De pronto el ambiente estaba pesado, estaba cargado de una mala vibra casi palpable. Edan estaba viviendo los peores minutos de su vida. ¡Por todos los cielos! habían secuestrado a su mujer, a la madre de sus hijos, a su gatita, y no tenia ni la más mínima idea de a donde se la pudieron haber llevado y mucho menos quien fue el malnacido que se la llevó. De una cosa estaba seguro, y era que no descansaría hasta encontrarla, y quien quiera que sea el responsable de semejante barbarie lo pagaría con su vida, porque se encargaría de hacerlo sufrir de la peor manera hasta que muriera. La sangre le hervía en las venas y una vena le palpitaba en la cien. Nada más soltar esas palabras en medio del consultorio todos se pusieron alertas. —¿De que hablas?— pregunto Diana, sin poder creer lo que su hijo le decía, es que era una locura ¿Quien era tan estupido como para hacerle semejante cosa a una de las familias más poderosas