SORIANA

—¿Y cuéntame Soriana porque volver a Rusia? no es que me alegre volver a tenerte, pero fueron solo unos meses de tu partida —escucho hablar a mi antiguo jefe, hice una promesa y después de tres meses donde quise darme la oportunidad de encontrarme conmigo misma, he decido volver a trabajar... 

—Verás Fabio—estoy en su oficina y espero que mi experiencia laboral con él sirva para volver a la firma —me fui con muchas expectativas, como sabias me case, pero el matrimonio no funcionó, decidí volver y empezar una nueva vida, pensé que podía volver a trabajar en esta firma, mi trabajo fue bueno y no h**o queja alguna...

—Perderte fue triste Soriana eres una gran abogada, y por supuesto que puedes regresar, no me arriesgarte que tu talento se vaya a otra firma, eres buena abogada penalista... 

—Gracias de verdad —el alivio llega a mí, realmente pensé que no me darían el trabajo, como últimamente ando con el cristo de espalda, pues pensé mal—empezaré cuando tú lo desees. 

—Pues tomate el fin de semana y comienza el lunes, puedes ayudarnos en un caso importante. 

—Perfecto Fabio—le extiendo la mano que acepta —hasta el lunes entonces... 

Asiente y salgo de su oficina más tranquila, salude algunos de mis compañeros que aún continúan trabajando y aunque se sorprendieron de mi regreso, me recibieron bien.. 

Es invierno en Rusia y la nieve cae dando un aspecto hermoso, me encanta la nieve, pensaba disfrutarla en las vegas, pero las cosas no pasaron como las tenía planeadas. 

Cumplí mi promesa y fue más duro de lo que pensaba, el entierro aún no lo olvido, fue algo tan triste y desgarrador que aún duele recordar ver el rostro de Maciel y los pequeños gemelos que no entendían que pasaba pero que al ver llorar a todo el mundo, simplemente imitaba sobre todo a su madre Natasha que estaba desconsolada. 

Despedirme de mis amigas fue duro, sobre todo en el aeropuerto cuando Kalesy apareció para pedirme perdón, no he vuelto hablar con ella, pero sé que lo está intentando con Olecksey que realmente se lo merece. 

Polina vive un triángulo amoroso, y Bella, feliz con Aleksy que la ama demasiado. 

Ingreso a mi cafetería preferida y pido un chocolate caliente mientras pienso en él, me odio cuando despertó y yo simplemente me había ido de su lado, pero realmente me dolió irme y dejarlo, pero tenía que alejarme, lo prometí y necesitaba mi paz mental, no podía seguir viviendo y respirando el mismo aire de los tres, verle el rostro a  Olecksey me recordaba mi traición, causarle ese daño nunca me lo voy a perdonar y ojala Kalesy y el sean felices.. 

Tenemos algunas cosas que aclarar, pese a mi salida tan furtiva pero necesita escapar de todo esto porque sencillamente iba a morir de los nervios en un lugar que pense iba a ser mi nido de felicidad y amor, pero se convirtió en mi peor pesadilla.

No termine bien con Olecksey y creo que nos debemos muchas explicaciones pero necesito sanar, reencontrarme a mí misma para poder continuar con mi vida sin lastimar a nadie y sobre todo a mi.

—Gracias —le agradezco a la chica que acaba de atenderme. 

—Pará servirle. 

Le regalo una sonrisa mientras me fijo por la ventana, imaginándome caminar de la mano con Dominic, el sentimiento que el hombre llegó a despertar en mí, fue fuerte, inclusive más fuerte que el amor que llegue a sentir por Olecksey,  de verdad quería ser una esposa honesta y entregada, pero conocer a Dominic el día de mi despedida de soltera le dio otra perspectiva a mi mundo... 

Deseo de todo corazón que pueda encontrar a una persona que lo ame y le dé la paz que tanto necesita, vive en un mundo lleno de venganza de odio y rencor, ese nunca será un buen camino. Defiendo la justicia mientras el vive en guerra y no quiero mas problemas, quiero mi vida de antes, sin tantas embrollos emocionales que me dejan al borde de un ataque.

—Buenas tardes —me atraganto con la bebida caliente al escuchar esa voz —¿podemos compartir mesa?—me quedo prensada de su mirada gris—puedo—observó a todos lados viendo que prácticamente la cafetería está vacío.. 

—Lo siento señor —intento ocultar mi risa—estoy esperando a una persona—sostengo nerviosa su mirada. 

—Me sentaré a esperar que tu compañía aparezca—toma asiento—aunque siendo tu amigo, no dejaría esperando a una mujer tan hermosa como tu... 

Me sonroje de inmediato despertando esas sensaciones que siempre se alborotan con tan solo oler su perfume.

—Nunca dije que fuera amigo—juego con el —en todo caso quiero estar sola, asi que le pediré señor amablemente que se levante de esa silla.

—Pues yo quiero estar contigo —me dice con esa mirada gris intensa, esa misma que me desarma en cada tanto—esperando a que alguien llegue hacerte compañía. 

—Pues—mierda no tengo nada que decir, su mirada me pone muy nerviosa—¿cómo te llamas? 

—Dominic —extiende su mano y la tomo—para servirte preciosa.

—Soriana —no suelta mi mano y ya estoy temblando—mucho gusto.

—El gusto es mío preciosa—asiento soltandome de su mano y bebiendo de mi chocolate que se enfría—¿y a que te dedicas?

Bebe de su café elegantemente y desvío mi mirada a su boca, se me hizo agua la boca de solo pensar volver a probarlo... 

—Soy abogada y tú.. 

—Nada —dice mirándome fijamente —vengo a probar suerte en el amor. —trago Con dificultad —espero que la mujer quiera aceptarme e intentarlo conmigo, lo he dejado todo por ella y si me acepta tendrá que mantenerme pero supongo que viviremos de amor y mucho sexo.

—¿Así? —bendito Dios, ya me dio calor y el día congelado y yo aquí ardiendo—pues no creo que esa mujer te rechace. 

—¿Lo crees Soriana? —mojes cucos. Con su seriedad. 

—Perdón—me levanto —necesito ir al baño.. 

Tengo que huir de él, ¿vino por mí? No puedo creerlo, Dominic está loco, mi corazón parece descarrilado, ¿será que se burla de mí? Vino por mí, me digo mirándome al espejo como una estúpida, sonrió como enamorada y me vuelvo a negar sin darle crédito a mis ojos, él está aquí... 

Tiemblo inexplicablemente con todas las sensaciones aglomeradas en el pecho que siento que van a explotar en algún momento dejándome en la nada.

—Siempre vas a huir —ingresa al baño de la cafetería y me tenso cuando me acorrala con su cuerpo —¿siempre eres tan cobarde?..

—Dominc yo... 

—Tu eres una m*****a cobarde que abandono el barco cuando se hundió—me gira y quedo frente a él, respirando su aliento que huele a café—me abandonaste, pero heme aquí detrás de tu culo preciosa...

—Perdón no podía quedarme Dominic—me disculpo—solo buscaba un poco de paz en el torbellino que se había convertido mi vida a tu lado.. 

—Que sería de la vida sin un poco de tormenta.

—Tú no eres una tormenta Dominic —mis manos se hacen puño en su pecho, intenta no gemir cuando besa mi cuello —eres una m*****a devastación.

—Que te seguirá toda la vida nena. 

Me besa como habitualmente hacíamos, con pasión, hambrientos, explorando, descubriéndonos en esa faceta de dos personas que se desean ardientemente. 

El abrigo impedía que pudiera tocar más su pecho, necesitaba sentir su piel en  mis manos, notar su pezones, pero no parecía posible. 

Lo sentí suspirar mientras seguíamos besándonos, sus manos descendieron por mí cuerpo para tomar mis nalgas, ahogue un gemido en su boca y lo escuche sonríe.. 

—Dominic —me quejo cuando me ingresa al baño de la cafetería—nos van a pillar —mencionó muy nerviosa. 

—Si no haces tanto ruido estaremos bien.

—No espera. 

Levanto mi vestido y mi abrigo quedó en el piso, se sienta en el retrete bajando la tapa de esta  y saca su polla que no dude un segundo para sentarme y deslizarlo lentamente corriendo mi braga a un lado.. 

Exclamamos cuando está completa dentro de mí, empiezo a cabalgar como una verdadera jinete, con sus fuertes manos el me agarra de la cintura y empieza a coordinar el movimiento y solo alcanza a decir. 

—Me moría por tenerte Soriana. 

Muerde mis pezones, en tanto muerdo mi labio para no gemir audible, pero es difícil cuando me obliga a saltar rápidamente en su verga que entra expandiéndome por completo 

—Dominic —gimo cabalgándolo —te amo—sigo moviéndome sintiéndome derretir en sus manos, con su polla adentro. 

—Y yo a ti nena —tomo sus labios ahogando mis gemidos placenteros, es increíble el sexo con él, me siento en las nubes estremecerme con el agarre de sus manos en la carne de mis nalgas, es fuerte, grande y toda una bestia, que solo yo domino. 

—Una oportunidad. —me dice entre jadeo.

—No lo arruines animal —le digo tomando de nuevo sus labios que me saben a café…me arrebata mas ese sabor en el y lo monto mas rápido, hasta que ambos estallamos en abrazándonos con fuerza…

—¿Estas bien? —pregunta al verme tambalear..

—Mas que nunca —le sonrió tomando mi abrigo después de asearme un poco con su vista puesta en mi…

Salimos del baño y mis mejillas se tiñen de rojo al saberme con la mirada de todas puestas en nosotros.

—Muy buen servicio —dice realizando el pago—les dejo propina por los servicios adicionales—dice y le doy golpe en el brazo—gracias…

Salimos tomados de la mano, con el frio aire de rusia golpearnos fuertes, su mirada me perfora y su sonrisa me desarma, caminamos  como dos enamorados  con la esperanza de empezar una nueva vida alejados de juzgamientos y señalamientos, con Dominic nunca se sabe, la única certeza que tengo es que con él los orgasmos nunca paran y las emociones no disminuyen.

Supongo que si hay amor todo se puede…

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