Me levanto, un aroma llega a la habitación y recuerdo que tengo visita.

Entro al baño y me aseo, salgo y allí está él.

En la cocina de chef.

—Hola... —digo penosa.

—Buenos días pequeña... está listo el menú —dice señalando el plato con tostada bañada de salsa de maíz y puré al lado con jugo artificial.

—Es exquisito...—caminamos a la mesa y el prueba su comida y yo hago mi oración.

Sólo escuche su amén con la boca llena, típico.

—Hay que darle gracias al dador de las cosas Luke...—el rueda los ojos

—Ok ok ...amén y amén —es tan gracioso cuando se propone. Juntó sus manos frente de él y hizo una reverencia.

»Se que estás descansada y quisiera saber por qué una niña me llama a las doce y me deja peor que Tarzán en la ciudad...

—Luke esa niña tiene veinticuatro...—rueda los ojos otra vez.

—Merezco una breve explicación...

—Me enteré que tengo un hermano.

—¿De Kenneth...? —está asombrado

—No Luke. —suspiro.

—De Flor… —creo que se le saldrá los ojos.

—No Luke.

—No entiendo... ¿hablas de l