El anciano tenía mayores y mejores habilidades de combate que el asistente del comandante y era un comandante en jefe de los guardaespaldas de la familia Quinton.

"¡Ataquen juntos!". El comandante en jefe no se iba a arriesgar al saber lo fuerte que era Lana. Él le dio una señal al resto de los guardias para que atacaran juntos.

"¡Ja ja! ¡Eso me ahorrará el problema si atacan todos juntos!". Lana se rio al ver a los hombres corriendo hacia ella, y se enfrentó a ellos a mitad de camino con indiferencia.

¡Bam! ¡Bum! ¡Pam!

Se escucharon ruidos abrumadores y espeluznantes cuando varios de los guardaespaldas de la familia Quinton salieron volando hacia atrás, y todos cayeron al suelo momentos después. Solo el Joven Amo Quinton y los tres Jóvenes Amos ricos, que antes compartieron mesa con él y bebieron con él, se quedaron parados con la boca abierta.

Muchos transeúntes miraban a Lana con asombro y respeto. "¿Cómo es posible? ¿Cómo... cómo puede ella ser tan fuerte?”.

La Ciudad de Go