El hombre de mediana edad asintió de inmediato.

“Jaja, qué presteza. Hubo alguien que intentó negociar el precio anteriormente. ¡No aceptamos ninguna negociación!”. Fiona estaba feliz e inmediatamente le pasó un papel al hombre. “Aquí están los detalles de la cuenta bancaria y puede hacer la transferencia. No se preocupe, mi yerno es bueno. Si no puede curar a su esposa, ¡definitivamente le devolverá este dinero!”.

La otra parte rápidamente hizo la transferencia y condujo a Fane hacia las afueras de la ciudad.

"¿No nos vamos a quedar en la Provincia Media?". Fane se quedó sorprendido y le preguntó al hombre que conducía el coche cuando vio que estaban saliendo de la ciudad.

“Jaja, doctor milagroso Fane, no se preocupe. Seguiremos en la Provincia Media. Es solo que tanto a mí como a mi esposa nos gusta un momento de tranquilidad para nosotros, así que construimos una pequeña cabaña en un área remota fuera de la ciudad. ¡Nos gusta pescar junto al lago cuando estamos libres!”, le expl