Josh no tardó en salir del salón con su gente y volar de vuelta a su clan.

Cuando llegaron a una cierta distancia, el Primer Anciano del Clan del Rey de la Espada se acercó y preguntó: "Amo, ¿en qué estaba pensando hace un momento? ¿Por qué trató de persuadirlos para que dejaran ir a los intrusos? ¡Sabe claramente que los seis clanes de la Guardia de la Alianza se preocupan por su imagen y reputación más que por cualquier otra cosa! Y más ahora que el pequeño Clan de la Matanza, bajo sus alas fue eliminado así como así. ¿Cómo lo dejarían pasar?".

El Segundo Anciano también se acercó a Josh y dijo: "Así es, Amo. Es posible que se sientan molestos por ello y que no le respeten más en el futuro. Nuestra misión es solamente informarles de la situación y no sugerir ideas, porque, al final, tendrán una reunión para decidir qué es lo que sigue, ¿no?”.

Josh sonrió con impotencia. "No lo entienden, ¿verdad? Ese mocoso, Fane, es demasiado poderoso. No pasa nada si logran deshacerse de él,