La alarma sono y Sofia odio más que nunca ese repiqueteo que le taladraba el cerebro.
Mas cuando la noche anterior llego muy tarde y había tomado una que otra copa, pero se había divertido mucho con sus amigas pero lo malo fue cuando Sebastiano la trajo al apartamento e intento besarla y ella lo rechazo y termino yéndose enojado.Odiaba hacer sufrir a Sebastiano pero no podía engañarlo, lo quería como amigo pero nada más.Se levanto, cepillo, ducho y lista para ir al conservatorio, bajo para tomar su desayuno.Susy no estaba, pero le había dejado el desayuno. Ella era una gran amiga, la mejor chica del mundo.Su teléfono repico y era Vincent y en los siguientes 15 minutos se entretuvo hablando con su hermano.Se le hizo tarde por el tráfico y cuando llego a la academia ya la clase con la profesora Castello había iniciado pero como ella leComo Seguir su vida normal cuando su corazón estaba roto... Pero debía hacerlo, superar su desilusión y enfocarse en cumplir sus sueños. Durante días Diego fue su apoyo, que la obligo a salir de su mundo oscuro. En dos ocasiones se apareció en el apartamento con pizza y bebidas y vieron películas y eso le sirvió para por un momento olvidar su cruel realidad. El no intentaba ser más que un buen amigo y eso lo agradeció ella. En el conservatorio siguió normal con sus clases. Ese día iniciaría en la academia y al menos eso le sirvió para despejar su mente y enfocarse en lo que mas amaba la música. La profesora Favela las encargo a ella y Marie para estar en el proceso de inscripciones. Siendo una tarde muy productiva, ya para las seis había inscriptos a 8 niños y 5 adolescentes. Estaba por irse cuando llego una mujer alta y pelirroja acompañada de una niña pequeña, con sus m
Al bajar Diego se encontró con Susy que iba llegando.- Hola- lo saludo ella con timidez, tan raro en ella.- Hola- Te ibas ya, ¿como esta Sofía?- pregunto Susy poniendo su abrigo en el perchero y tirando su bolso en el sofa.- Prometí quedarme si no te importa.Susy puso una cara de poema que divirtió a Diego porque se imagino lo que ella estaba pensando.- Ustedes son adultos es su decisión- respondió secamente Susy.- No, no es lo que piensas, somos amigos- aclaro- me quedare aquí en la sala si no te importa.- Claro que no- respondió emocionada- te traeré una frazada y almohada.Diego sonrió, esta chica parecía un poco "diferente en su forma de vestir y expresiones" pero le caia bien porque le trasmitía sinceridad.Después de entregarle la frazada Susy le pregunto:- ¿Ya comiste?- En realida
Alejandro llego a su casa y enseguida fue al bar para servirse una generosa copa de licor y calmar la incomodidad que había en su corazón por haber visto a Sofía besándose con Diego.¿Pero tenía acaso el derecho a molestarse?El fue quien decidió dejarla ir porque pensó era lo mejor para ella.Le había dicho incluso que cuando se volvieran a encontrar el aceptaría su decisión si quería seguir adelante sin el.Aunado a eso estaba estos 3 años de silencio y donde decidió que lo mejor era que nadie, incluidos sus mejores amigos supieran de el.Este tiempo no había sido fácil para el, por lo que no quiso involucrar a nadie mas.Mucho menos a Sofía, ella debía vivir sus sueños, vivir las experiencias propias de sus edad sin atarse a un dolor.Agradecía que Katrina estuvo con el y esa pequeñ
Esa mañana al salir del edificio, Sebastiano la esperaba.- Hola- lo saludo- Hola Sofía, pensé buscarte para ir juntos al conservatorio y para que hablemos.- Esta bien- accedió introduciéndose por la puerta que el galantemente había abierto para ella.Sebastiano era otro chico dulce que estaba sufriendo por su rechazo.En el camino recogieron a Marie y hablaron de temas relacionados con los estudios y poco a poco la tensión entre Sebastiano y ella se fue reduciendo.- Nos veremos a la hora de la salida para que hablemos- le dijo cuando cada uno se disponía a ir a sus respectivas clases.- Esta bien Sebastiano,Las clases terminaron y Sebastiano la esperaba, decidieron ir al cafetín de la esquina a hablar.El pidió chocolate caliente y galletas de Jengibre que eran las favoritas de Sofía.Sofía lo vio en otra actitud y s
Era una mañana lluviosa y Melisa tenía que ir a su trabajo en Rochester c.a. Bajo las escaleras de su lujoso departamento y se dirigió a la cocina para servirse una taza de café con leche y dos cucharadas de miel que era todo lo que su estomago toleraba a esa hora. Taza en mano se asomo por la ventanilla de la cocina y vio que no se trataba solo de una llovizna, estaba diluviando, e hizo un mohín de disgusto. Sin duda la lluvia complicaría su día, el trafico se pondría mas lento, debía usar paraguas que odiaba, su secretaria que era una experta en dar excusas diría que llegó tarde o no iría por el aguacero y ella tendría que hacerse cargo sola de la presentación ante los accionistas. Además cuando llovía su humor se volvía pésimo porque la lluvia le traía recuerdos de una época en que ella adoraba que lloviera, porque la lluvia represento para ella libertad, felicidad, espontaneidad, cosas de las que ella carecía en su vida actual. Hacia tres años que
A media mañana Aileen llamo a Melisa casi llorando porque su madre había sido hospitalizada y trato de tranquilizarla, luego llamo a su chofer y le pidió fuera al hospital para estar pendiente de lo que ella y su madre necesitara, luego decidió iría personalmente al hospital.En la tarde efectivamente fue al hospital, ya la madre de Aileen estaba fuera de peligro, la señora era diabética y había tenido una crisis diabética. Le dio un cheque a Aileen para que comprara lo que necesitara, se encargo de la cuenta en el hospital y le dijo que podía tomarse una semana para que lograra estabilizarse- Gracias.- le agradeció Aileen sumamente conmovida.- Debo irme- inquirió a su vez Melisa para cortar con ese momento emotivo, no quería avergonzar a la chica al
Como habían acordado esa noche Vanko Costas fue por Melisa. En el trayecto aprovecharon para conocerse mejor, supo que el era padre soltero, que la madre del niño lo había dejado con el cuando tenia pocos meses de nacido. También le conto que cuando pequeño el también había sido abandonado por su madre, así que ella debía imaginar las profundas cicatrices que debía haber en su corazón, sin embargo eso no lo había llevado a convertirse en un hombre con amargura, solo decía que cada experiencia ayudaba a madurar, y que a pesar de las pruebas hay que seguir adelante. - Te he contado prácticamente mi vida sin embargo no me has contado nada de la tuya. - Estuve casada- revelo - Eso si es una sorpresa.- apunto el - Me divorcie hace tres años.
Aileen sabia que llegaría tarde si no se apuraba y el autobus donde iba estaba atrapado en una cola descomunal, al parecer había habido un accidente y estaban varados, asi que decidió bajarse y caminar unas cuadras hasta encontrar un taxi que la llevara. Iba tan absorta en su preocupación y encontrar un transporte porque le daba mucha pena llegar de nuevo retrasada cuando su jefa se había portado tan bien. Cruzo la calle sin fijarse y solo alcano oír un carro chirrear justo logrando detenerse antes de atropellarla. - Es mi culpa, yo cruze la calle sin mirar,- se disculpaba hablando atropelladamente Aileen al conductor del automóvil que se había bajado a auxiliarle y comprobar que no le habia pasado nada. El simplemente le dirigió una sonrisa fácil. - Se encuentra bien.-pre