AkemTodo ser tiene una debilidad y la mía es Arabella con los mellizos, me jode que con ella rompa la coraza que siempre llevo puesta, pero a su lado siento que tenemos un escudo invisible que lamentablemente estamos destruyendo. Ver su cara inflamada y morada hace que yo mismo me odie, prometí protección, no lo cumplí; juré que no dejaría que le pusieran una mano encima y en un momento lleno de celos, lo hice.Sus preciosos ojos dilatados por las lágrimas que se aproximaban al salir hizo que algo en mí se removiera, ella dice que no es fuerte y está completamente equivocada. Resistió a un primer impacto de bala, en las primeras semanas de gestación salió ilesa de mí droga; peleó con sus propias manos en medio de un supermercado, sin anestesia se suturó la herida que le hizo el hijo de puta de Santiago. Se aferró a proteger a nuestros primogénitos por la alerta de principios de aborto, enfrentó a su hermano para darme mi lugar; confió en mi con los ojos cerrados para complacerme con
— ¿No confías en tú mujer? ¿Este es el respeto hacia mi hija que me prometiste en Rusia días antes de su boda?. Recuerdo cuando me llevaste a tu despacho para conversar conmigo porque querías hacer las cosas bien. Juraste que cuidarias a Arabella con tu propia vida si era necesario, que te gustaba que la mirarán porque te satisfacía estar de la mano de ella y los otros muriéndose de envidia, que confiarías en ella porque te demostró que te amaba. ¿Dónde está el juramento que me profesaste? ¿Qué pasó con esas hermosas palabras de tus votos matrimoniales? Te acogí hasta como un hijo Akem, te tomé tanto cariño porque vi lo enamorado que estabas de ella y lo sigues estando ya que tu mirada te delata. Mientras que mi marido e hijos no aceptaban su relación por lo que sucedió en el pasado con tú padre, yo alce mi voz para apoyarlos porque vi la preocupación calada en ti en la sala de espera cuando le dispararon en tú ático, te apoyé porque vi una verdadera sonrisa en mi hija a tu lado, te a
ArabellaLos latidos de un corazón bombea debajo de mi oreja, unas grandes manos acoplan mi cuerpo y una respiración impacta sobre mi cuero cabelludo. Sus palabras han sido un eco para mi cabeza, tengo una presión muy grande en ella; me posiciono en la cama con la ayuda de mis codos, una hermosa sonrisa de su parte me regala haciendo que mi corazón de un huerco. Durante el profundo sueño que tenía varios nombres llegaron a mi subconsciente.¿Clarissa?¿Mateo?¿Sebastián?¿Dimitri?El maldito de Dimitri es peor que un grano en el culo, aún no comprendo cómo fue que caí en los brazos de su hijo. Por la sangre de mis hijos recorre la de él, su abuelo asesinó a la tía que jamás podrán conocer es una llaga abierta que nunca sanará.— ¿En qué tanto piensas? — Akem me saca de mis pensamientos — ¿Te encuentras bien?— Sss.. sí. — susurro — Solo estoy algo indispuesta.Se recuesta en el cabezal de la cama. Puedo notar que su labio está partido, un ojo morado y el lóbulo izquierdo inflamado; me
— ¿Qué es todo esto Akem? — todos sus matones ponen la mirada en nosotros.— Arabella entra a la mansión, luego hablamos — ignora completamente mi interrogativa —. Haz caso por una puta vez en tú vida. — no se con quien hablaba pero él le colgó.— Tengo todo el derecho de saber que es todo esto en mí mansión así que aquí me quedo mi lindo. — me acerco a él con los brazos cruzados — ¿No te gusta que te desobedezca delante de tus matones? Mi Boss. — sonrío.Agarro el arma que se hallaba en su cintura y la sitúo en su frente, todos esos gorilas que se encuentran en el lugar apuntan a mí dirección; una sonrisa maliciosa aparece en mi rostro. Paso la pistola desde su cabeza hasta su pecho en ningún momento nos dejamos de mirar, la coloco en la comisura de mis labios para lamerla con perversión. La adentro en mi boca como si fuera su polla, su ojos se oscurecen por el ambiente del momento, la saco y disparo al aire dos veces. Me pega a su trabajado cuerpo de un jalón pasando su lengua por
Arabella— No lo aceptaré como para casarnos de una vez, pero lo tomaré como un compromiso de reconquistación Akem — declino —. Tú me conoces a mí pero en mi mente, yo no a ti, puede que algunas de nuestras conversaciones hagan ruido a mis pocos recuerdos pero eso no quiere decir que esté enamorada de ti, por lo menos aún no en mi vida actual. — intenta contraatacar pero lo interrumpo — Dijiste que irías a terapia por mí así que espero que lo cumplas. Me complaces en todo, puedo notar en tus iris grises un torbellino de pasiones al solo mirarme, tú corazón se abraza con el mío al juntarnos. Eres mi escudo y yo la guerrera que ataca con sudor y sangre pero necesitas ayuda porque en un ataque de celos me puedes perder y para siempre.Se le tensa la mandíbula. — Seamos unos amantes aventureros donde las experiencias hablen por sí sola, donde cada una te conozca más porque te apuesto que la yo de antes no vivió esta nueva prueba de hoy — niega — dale tiempo al tiempo que todo llega a su m
AkemVerla marchar en su coche por mi ventana remueve muchas cosas en mí. Escucharla hablar mediante una profunda pesadilla sobre todas las malas y buenas vivencias que vivimos juntos me confirmó que recuperaba la memoria, oírla llorar una hora a mares en la ducha hacía que quisiera levantarme para consolarla y decirle que todo iba a estar bien, que yo estaba para ella siempre. Pero no, Arabella necesitaba adaptar todo en su mente de golpe, que su verdadera realidad no es color de rosa y a mi lado tampoco lo vivirá ¿Qué si la amo y haría cualquier cosa por ella? ¡Claro que sí! pero a mi lado siempre será el ojo del huracán por ser la mujer del boss.¿En serio Arabella pensaba que no me iba a despertar?Mafioso duerme con un ojo abierto y el otro cerrado porque no se sabe si unos de tu misma organización es capaz de traicionarte. En mi cabeza siempre estuvo la teoría que ella se iría al recordar todo, que dejaría a los mellizos conmigo por la protección que les brindo. Pero no me preoc
— Boss ya llegó la niñera de los niños, los está esperando — dice un voyeviki.Firmo los papeles más importantes que dejo en mi escritorio para que Jane luego los busque. Cojo el moisés y me dispongo a entrar al cubículo del elevador, al llegar están todos mis hombres custodiando el perímetro. Afuera está Jimena hablando por su móvil que al verme palidece, la ignoro y entro a mi avioneta privada; luego de unos fastidiosos minutos ella se sube también y sin más tomamos partida hasta mi país natal Rusia.Tres malditas horas después llegamos. Mi madre se vuelve loca al conocer a sus nietos y sorprendentemente ambos la abrazan con la mayor fuerza que pueden transmitir, pasamos al jardín donde los dos se divierten sobremanera. Ágata no deja de tomarles fotos a cada dos por tres; Jimena y ella se quedan conversando mientras tanto yo voy a mi despacho. Allí adentro me esperan los cabezales de cada familia Nikolay Mykolaiv con su hija Annika y Andrei Belov.— Bienvenido mi Boss. — se levantan
ArabellaCamino decidida a mi objetivo por todo el pasillo. Recuerdos fugaces pasan por mi mente al transcurrir por ese sitio y ser besada por mi idiota, la recepcionista me ve nerviosa; no necesito ser anunciada para ver al maldito de mi marido. Una fila de soldados me comen con la mirada, les sonrío coqueta, no todos los días tienen la oportunidad de admirar a alguien como yo. Llego a la puerta de su oficina sin más abro la puerta, tiene a su prima abierta de piernas sobre la mesa, ninguno se da cuenta de mi presencia por lo que cojo mi móvil y comienzo a grabar.Me da igual con quien se acueste ¿pero con su prima? Que aberración. Por lo visto él agarró el dicho que dice carne de primo se come y bien que se la está comiendo; guardo el móvil para luego cerrar la puerta con enojo.Que comience el show.Ellos se sobresaltan al verme allí parada, coloco la cara de indignada con los ojos cristalizados. Owen sale de ella rápidamente y se mete entre el pantalón su asquerosa verga, Adriana