Mi amiga Aroa también se preparó un pequeño equipaje, ya que se empeñó en acompañarme a Nueva York, marchandonos las dos de la casa seguidamente y sin hacer ruido para que mi hija no me viera marcharme sin ella, porque sabía que se pondría a llorar y al final sé que hubiera cedido a que me acompañara, pero Sara se marchó del salón hacia su dormitorio para entretenerla y así de esa manera, me pude marchar más tranquila. Mi amiga y yo cogimos un taxi diciéndole al conductor que queríamos ir al aeropuerto, una vez que ya llegamos y le pagamos al hombre, nos bajamos del vehículo y con nuestro equipaje en la mano, salimos a las pistas de aterrizaje, ya que al ser un avión particular nos imaginamos que estaría en algún hangar o en la misma pista esperandonos. Cuando llegamos a la gran ciudad, mi amiga y yo nos fuimos a hospedarnos en un motel que estuviera medianamente decente, aunque Carlos nos ofreció su casa, no lo vimos en ese momento muy conveniente. —- ¿Estás despierta? —- escuche l
Las dos nos estuvimos riendo hasta que ya empezamos a sentir como el pecho se nos iba a partir en dos, porque eso sí lo tenía Aroa, cuando de verdad se enfadaba, parecía un púgil lista para combatir. —- Keira sabes que te quiero y que nos tenemos la una a la otra, por eso no te voy a permitir que te hundas por un capullo que no es capaz de valorarte —- me dijo—- Eres maravillosa Aroa, yo tambien te quiero mucho y sabes que siempre he sido sincera contigo, ya que nunca podre engañarte de como me siento, ya que me conoces muy bien —- respondí—- Saldras de esta Keira, todas hemos sufrido desamores y aunque hoy lo veas como un imposible, este no es tu fin, solo que aprenderás a ser mucho más fuerte Después de ducharnos y vestirnos, las dos nos marchamos de aquella habitación hacia donde estaban los ascensores, bajando al hall de aquel motel para marcharnos a la calle y buscar una buena cafetería donde pudiéramos tomar un buen desayuno. Cuando por fin vimos una y entramos, nos sentamo
Mi amiga y yo nos miramos por un momento, volviendo nuestras miradas a donde se encontraban David y Melody, sintiendo como mis manos me temblaban —-!! David O”Brien, eres un maldito cabrón y un capullo desgraciado¡¡ — gritó de nuevo Melody—- Si lo soy ¿y que? si tanto me odias ¿porque no pides el divorcio? — escuche gritar a David— ¿Es eso lo que buscas? pues ni lo sueñes, no pienses que te voy a dejar que me abandones a mi y a nuestro hijo, !! nunca dejaré que seas libre, me oyes, nunca ¡¡ — contestó ella muy enfadada— No te aguanto mas Melody, ¿sabes una cosa? no te quiero en mi vida, ya no te aguanto mas —- le dijo David—- Pues lo siento por ti, pero me asegurare de que me respetes como tu mujer que soy —- contestó Melody, mientras se iba acercando a donde yo estaba, mirándome con una mirada que echaba fuego—- No se te ocurra rozarla Melody, o no seré capaz de contenerme —- le gritó David, cogiendo la mano de Melody en el aire cuando estaba a punto de pegarme—- ¿Defiendes a
Nada más llegar al motel con el taxi y bajar de él, entramos las dos subiendo inmediatamente a nuestra habitación, nada más entrar me fui directamente al cuarto de baño, para vomitar todo lo que tenia en mi estomago de lo mal que me sentía en ese momento, seguidamente me quite toda la ropa metiendome en la ducha, dejando que el agua recorriera mi cuerpo y mis lágrimas mis mejillas, mientras pensaba que había sido un completo error volver a la gran ciudad, aunque estaba algo contenta por la demostración de David ante mi hermanastra, no es que me hubiera conformado con que me hubiera defendido ante ella, porque ya que lo que más me dolía era y me preguntaba ¿porque se casó? Era simplemente una situación que no comprendia bien y David no me daba una explicación clara de ese ¿por qué?. Nada más terminar de ducharme, me tapé el cuerpo con una de las toallas que habían, volviendo al dormitorio para sentarme al lado de Aroa que estaba sentada en mi cama.—-- ¿Cómo te encuentras? — me pregun
Bajamos las dos del ascensor, acercándonos seguidamente a donde estaba el despacho de DavId, saludando primero a su nueva asistente, cuando de pronto la puerta del despacho se abrió de golpe, dándonos cuenta de que el que salía era el amigo de David, su amigo y socio Carlos, mirándonos los dos fijamente a los ojos, dándome cuenta de la cara de sorpresa que tenía, mientras se iba acercando a donde yo me encontraba—- !! Keira ¡¡ no te esperaba tan pronto —- me dijo Carlos—- Pues ya ves, necesito como te dije hablar con David ¿está en su despacho? —- pregunte—- No, tardará aún un poco en llegar, ¿vamos a tomar algo?¿Os apetece mientras llega él? — nos preguntó CarlosNos marchamos los tres de aquel lugar, bajamos en los ascensores hasta el hall del edificio, cruzamos la calle, abriendo la puerta de la cafetería Carlos como buen caballero que era, sentandonos seguidamente los tres en una de las mesas que habían libres,—- Carlos por favor dime una cosa, ¿por qué tanta intriga con la bo
Cuando entramos en la casa, enseguida se acercó a mí sonriendo Gisela, dándome un fuerte abrazo y dos besos, David cogió mi mano acercándonos los dos hasta donde estaba el salón cerrando la puerta cuando entramos, sentarnos seguidamente en el sofá, aunque David se levantó segundos después para acercarse al mueble que había. Cogió un vaso y una botella de whisky, poniéndose un poco de aquel líquido, sentándose inmediatamente a mi lado en el sofa—- Lo que más me duele ¿sabes que es? que me mintieras y no creo que lo pueda olvidar todo muy facilmente — le dije sin apartar mi mirada de sus precioso ojos de color verde—- Keira cariño en mi defensa, si es que me puedo defender, debo de confesarte que te quiero, que eres lo mejor que me ha pasado en mi vida y que cuando pase aquella primera noche contigo, nunca me imagine que acabara tan enamorado como lo estoy de ti — me dijo acercando sus labios a los míos, lamiendolos con su lengua—- ¿Y hasta donde pensas llegar? Cuando volví y nos vim
De pronto pude fijarme en como David agachaba sus hombros en señal de derrota, esta situacion en que nos encontrabamos nos estaba llevando al limite de nuestras fuerzas ya que cuando nos volvimos a encontrar, solo estaba buscando un poco de cariño, un poco de sexo entre una pareja que se amaba y un pequeño toque de aventura, pero nunca me hubiera imaginado todo el sufrimiento que tendria, por buscar solo eso, preguntandome a mi misma ¿en que momento perdi el control de todo lo que yo deseaba?—- Keira mi amor ¿te encuentras bien? — me pregunto David—- No, la verdad es que no estoy muy bien, me siento como una mierfda David — respondi – Me he involucrado sentimentalmente con quien no debia, estoy ahora mismo viviendo algo que no deseaba vivir, cuando nos encontramos de nuevo creía que iba a ser feliz, pero me hiciste caer en un pozo sin fondo, así que no David, no estoy bien — termine de decirleDavid me rodeó mis hombros con sus brazos, apretando mi cuerpo hacia su pecho mientras yo
Al dia siguiente mi amiga y yo regresamos a nuestra ciudad, cuando el taxi que subimos en el aeropuerto paro enfrente de nuestra casa, le pagamos bajando las dos con nuestro equipaje, Aroa abrió la puerta, viendo como corría mi pequeña hacia nosotras con su preciosa carita sonriente—- Mami, ya tas aquí — me dijo cogiendola yo en mis brazos, dándome mi pequeña un fuerte abrazo y muchos besitos—- Y a tu tía ¿que? no le dices nada —- le dijo Aroa, cogiendo a mi hija de mis brazos—- Hola, que sorpresa que estéis ya en casa, por cierto Keira, Mark ha venido a buscarte porque quiere hablar contigo —- dijo Sara que en ese momento se acercaba a la entrada de la casa.—- Voy a dejar el equipaje en el dormitorio y ahora lo llamo por teléfono —- respondí—- Mami ¿y mi papi?¿porque no vene a verme? —- preguntó mi hija—- Está ahora muy ocupado mi niña preciosa, pero no te preocupes peque, que cuando no tenga tanto trabajo vendrá a vernos —- comente, aun sabiendo que eso nunca iba a pasarDespu