Estaba corriendo en el bosque, ejercitándome como cada mañana en mi forma humana mi loba aún no se manifiesta, eso pasa hasta que uno llega a los 18 años, pero estoy más que ansiosa por conocerla.
Puedo sentir la brisa tocar mis mejillas y mi cabello platinado caer en el aire mientras corro como un espíritu libre, mi madre dice que soy demasiado rebelde, porque no me conformo y no me gusta estar bajo las órdenes de nadie, lo cual viene siendo un problema con el tiempo cuando eres hija de un alfa y tu madre transfiere su poderes de bruja, así que la verdad sí, me siento única, indomable esa es la palabra perfecta una mujer indomable.
Tan solo tengo 16 años y soy toda una rebelde, mi hermano se la pasa de mi niñera, aunque sé que para el soy un fastidio, me adora en el fondo, ya estoy entrenando con Renata la mano derecha de mi madre Luna Alania y también con mi odiosa prima Alexia, la zorra de la manada aunque mis tíos no lo quieran ver, la verdad ella es muy hermosa con su cabello rojo como el fuego y sus ojos verdes, tiene unas piernas largas que hace que los hombres baben cada vez que la ven y siendo hija del Beta de la manada mi tío, era obvio que sería una gran guerrera .
Pero se topa conmigo, por más que intenta ganarme nunca ha podido y nunca podrá, soy más fuerte que ella y veloz, prácticamente soy su competencia, porque cuando estamos ambas en el mismo lugar nadie la ve a ella, solo a mí y eso hace que se ponga como tomate de envidia, lo cual disfruto demasiado.
Estoy segura de que cuenta los días, par que yo me vaya, en mi familia de brujos es tradición que los jóvenes al cumplir 16años sean entrenados en magia en el Coven que está en Paris, sin embargo, eso de estar en campo militar para señoritas no es lo mío y he tratado de evitarlo por todos los medios, pero este año cumplo 16 y ya no puedo evitarlo más, lo que me trae a este momento, discutí de nuevo con mi padre, porque me negué a irme y salí corriendo a mi lugar favorito, el lago Chenek.
Necesitaba pensar y alejarme de todos, no soporto que quieran controlarme, mientras caminaba hacia la orilla del lago, comencé a retirar mi ropa y la deje sobre una roca, me deslice y entre al agua flotando, viendo hacia el cielo, me encantaba estar aquí, se podía percibir una tranquilidad que necesitaba con urgencia.
Nade hacia la cascada y subí las piedras para salir del agua, me coloque en la caída de la cascada y cerré mis ojos, disfrutando como el gua caía cubriendo mi cuerpo desnudo, era una sensación el libertad de espiritualismo, que me encantaba de este lugar.
Cuando más tranquila estaba, escuche una voz que me saco de balance de inmediato.
—! Hannia! ¡Hannia! — escuche a lo lejos y pude reconocer la voz de mi hermano Xander, ¡diablos! Me encontró.
Baje de la cascada como pude y nade rápido hacia la orilla, levante la mirada y pude ver que estaba hablando con alguien, pero solo pude ver su espalda y su trasero y wow, tenía un trasero admirable, un cuerpo bastante musculoso, no podía dejar de verlo y me preguntaba quien seria, no lo reconocí y no creo que sea algún amigo de mi hermano, ya que conozco a la mayoría.
Muy despacio me levante y pude alcanzar mi ropa, que había dejado en una piedra, la tome y Sali corriendo con gran velocidad, no me quedaría a ver como mi hermano me diría su típico discurso de que ya debe sentar cabeza y dejar de ser una niña rebelde, pero hoy no será le día hermanito.
Al llegar a la pack house, entre a mi cuarto me dirigí a mi closet y saque un top deportivo negro y mis leggins, tenía que irme al entrenamiento, hoy me toca fuerza y velocidad con Renata y la verdad disfrutaba el reto que ella siempre me ponía, además de que disfrutaba patearle el trasero a mi prima Alexia.
Que por cierto según me entere por ahí, anda de coqueta con un alfa, vaya que suerte tengo y ojala y se la lleve muy lejos, el saldrá perdiendo en vez de alfa, será cornudo, pero a mí que me importa.
Termine de darme lo último arreglos— Por la diosa, casi lo olvido— saque mi maquillaje y comencé a cubrir mi lunar, si tengo un raro lunar en forma de luna, justo atrás de mi cuello y la verdad lo odio, aunque sea de nacimiento, utilizo un maquillaje mágico de esencias que yo misma invente y lo cubro, así nadie podrá verlo, solo mis padres saben de él, termino de aplicarlo y digo el conjuro.
Cubrire tuto cueste magia
Listo ahora sí, me voy corriendo rumbo al entrenamiento, cuando llego ya está Renata esperándome, —Tarde como siempre—dijo ella mirándole, con desaprobación.
—Que sería de mí, sino me doy a distinguir entre todos— dije con un poco de altanería sonriéndole.
—Nunca cambiaras y sabes que eso, te traerá problemas con nuestra luna y tu padre— me dijo mirándole casi sin poder ocultar su sonrisa.
—La misma historia de siempre y sin embargo aquí estoy— le dije y me puse en posición de combate.
Renata se lanzó hacia mí, pero salte sobre sus hombros y le di una patada en la espada, lanzándola con fuerza, ella recobro el equilibrio y me miro sonriendo, se dio la vuelta y corrió hacia mí de nuevo, extendiendo su puño con más fuerza.
Pude bloquear su golpe y de inmediato le conteste, con un golpe a su abdomen, me incline frente a ella, tomándola de los brazos y la hoce girar hasta tenerla debajo de mi con mi rodilla en su cuello, sometiéndola.
—Estas mejorando rápidamente, muy bien hecho Hannia— me dijo Renta, me retire un poco para darle espació y que se levantara.
—Es obvio que la estas dejando ganar Renata, es la hija de la luna, claro que no le vas a dar un mal golpe y mucho menos permitirás que la humillen. — dijo una alguien que estaba parada detrás de mí y podía reconocerla en cualquier lugar.
—Muy bien, si tanto dudas de las capacidades de Hannia, por favor entra el área y veamos quien es mejor, ilústranos pequeña Beta— dijo Renata burlándose de ella, sabía perfectamente que no era rival para mí.
—No, me llames así, no soy ninguna pequeña Beta y si soy más mujer que ella, cualquiera puede verlo a simple vista, querida—dijo Alexia mientras me veía, ella es 5 años mayor que yo, pero mi cuerpo estaba muy bien desarrollado y podía atraer más hombres que ella, por eso no me soportaba, porque creía que yo le estaba robando el lugar que ella se merecía en esta manada.
—Estoy harta de tus estupideces, seguirás hablando o en realidad harás algo al respecto, primita— le dije en burla.
—Respétame, cuida tu tono cuando me hablas, que soy mayor que tú y somos familia—me dijo de una manera altanera.
—Ya ve lo que dicen uno no elige a la familia, sino hace mucho que dejarías de serlo— le dije sonriéndole y eso basto para que se lanzara sobre mí.
Comenzó a dar golpes con su puño, pero mi velocidad era demasiado para ella, pude esquivar cada uno de ellos, intento darme una patada y le tome el pie, lanzándola por el aire y cayo justo en su trasero.
No pude evitar reírme por el gemido de dolor que hizo, ella me miro con furia y se levantó de inmediato, intento tomarme del cabello, lo cual fue un movimiento muy bajo, incluso para ella, pero tome sus manos y la hice girar de nuevo, lanzándola al suelo y coloque mi brazo alrededor de su cuello sometiéndola.
Reata comenzó a contar, dándole tiempo a Alexia de rendirse, pero la muy estúpida no lo hacía y lo quería lastimarla de más, aunque no al soporte nunca abuso de mis poderes o mi fuerza, solo lo necesario, pero ella me estaba sacando de mis límites.
—Alexia te rindes— le dije retándola.
—Prefiero arder en el infierno— dijo mientras podía ver que su rostro se tornaba rojo.
—Déjate de estupideces y no me hagas, hacer que te desmayes y ríndete de una buena vez, ambas sabemos que esta pelea ya la tienes perdida y no eres rival para mí, así que deja de molestarme de una buena vez. — le dije usando mi voz con autoridad, a pesar de tener tan solo 16 años, entre los guerreros siempre me he dado a respetar y no tolero que ni mi prima ni nadie me falta al respeto.
Alexia me miro y frunció sus labios, dando unos toques con su mano en mi brazo en señal de que se daba por vencida, la solté y ella aspiro una gran cantidad de aire, se levantó y me miro con odio en sus ojos y se fue sin decir una palabra.
—No entiendo, porque te tiene tanto rencor, si son familia, pero eso es algo que jamás entenderé, bien hecho Hannia ya puedes irte y mañana sin falta te quiero a tiempo, quedo claro— me dijo Renata, — Si Gama— le dije mientras la saludaba como militar y me dirigía caminando hacia la pack house, el camino de regreso era corto, pero quería pensar un poco más y tener tranquilidad, así que tome el camino largo por el bosque.
Estaba caminando, hablando en voz alta conmigo misma como loca, cuando escuche unos gemidos espantosos, parecía como si estuvieran matando a alguien, — es el colmo, habiendo tanto territorio, tenía que encontrarme alguien teniendo sexo en mi camino, así o más suertuda—
Pero tenía curiosidad de ver quiénes eran los atrevidos, así que me acerque un poco y fue cuando los vi, ella estaba recargada en un árbol con sus piernas alrededor de la cintura de él, gimiendo como loca.
Lo cual la verdad me dio un poco de envidia, porque yo sigo siendo virgen y no es que no haya tenido alguna oportunidad , he tenido varias citas pero la verdad, ninguno me ha encantado a ese grado, pero el hombre que estaba frente a mí, por algún extraño motivo me sentía atraída a él, pude ver como él se movía con fuerza mientras se introducía en ella, no pude evitar morderme mi labio al verlos , su cuerpo era de un verdadero dios griego, su trasero estaba como para comérselo, cuando ella levanto un poco su cabeza pude ver que era mi prima, pero no pude ver con quien estaba, solo alcance a ver un lunar en forma de luna que tenía justo en la parte de atrás de su cuello, —Vaya, mi prima y su amante, eres una zorra—dije a propósito para que ellos me escucharan, pero mejor me di la vuelta y seguí mi camino.
Pero en mi mente seguía la imagen de ese lunar y el cuerpo de ese hombre, lo que daría por ser yo la que estuviera en sus brazos, no sé porque, pero sentía algo diferente cuando lo vi, que no podía explicar, es el primer hombre que ha despertado el deseo en mí y eso no era algo desconocido para mí.
Son las 6 de la mañana y me estoy cambiando para ir a correr un poco, no pude dormir en toda la noche pensando una y otra vez en ese hombre, pero quería aclarar mi mente así que decidí tomar aire fresco y quizá nadar un rato en el lago, salga de la pack house y comienzo a correr. Al llegar al lago, me envuelve la tranquilidad de siempre cuando estoy en este lugar, no sé qué tiene, pero aquí me siento segura y puedo despejar mis pensamientos, sin esperar más me retiro mi ropa y entro al agua. Estoy nadando alejada de la orilla, cuando decido sumergirme y es cuando lo veo, debajo de mi está nadando un hombre inmediatamente regresó a la superficie y me alejo un poco de él, tratando de cubrir mi cuerpo con mis manos, pero a quien quiero engañar a estas alturas, ya me vio hasta las amígdalas. El sale a la superficie y es cuando quedo impactada, su cabello rubio mojado cae en sus hombros, tiene unos ojos
—Hansen, no debiste hablarle a nuestra hija de esa manera, sabes lo voluble que es su carácter, necesita comprensión, cariño que como padres entendamos su punto de vista, no que la tratemos como una desconocida, es nuestra niña. —Lo siento Alania, pero ella me saca de mis casillas, siempre esta con esa actitud retadora y tan salvaje, no da su brazo a torcer y me reta, aun sabiendo que a pesar de que soy su padre, también soy su alfa y le vale, no entiendo de quien saco ese maldito carácter. Alania solo levanto sus cejas y su mirada, viendo de frente a Hansen, — De verdad no sabes a quien saco ese carácter, es increíble no hay que ser muy listo para darse cuenta, amor mío. Después de la pelea que tuve con mis padres, salí corriendo de su oficina y sin querer empuje a mi hermano Xander, pero no me detuve y seguí mi camino. —¡Diablos, Hannia!, ten más cuidado, ¡Hannia! ¡Hannia! — dijo gritándome. Decidí ir a la oficina de mi
Su piel suave vibraba con el simple roce de mis dedos al tocarla, estaba temblando bajo mi cuerpo, pero nuestros labios no entendían razones, nos besamos con pasión como si la vida se nos fuera en este beso apasionado, no podía detenerme y no quería. Rodeando su cuerpo con mis brazos la acerque más a mí, podía sentir sus pechos erectos y duros en mi pecho, me sentía como un adolescente coloque mi rodilla entre sus piernas y las abrí un poco, para posesionarme entre ellas, nuestros cuerpos estaban muy calientes sentía su respiración agitada al igual que la mía. Ella rodeo mi cintura con sus piernas y me acerco más a ella, pero tuvimos que separarnos por falta de aire, ella me miro y yo le correspondí, su hermoso rostro estaba completamente rojo haciéndome saber que ella nunca había tenido este tipo de acercamiento con un hombre. ¿Ani era virgen? Ese pensamiento paso por mi mente y me sentí un completo idiota, aquí estaba yo seduci
CINCO DIAS DESPUES Hoy han pasado 5 días desde que conocí a Max y nos hemos vuelto inseparables, cuando nos vemos la pasamos muy bien, platicamos de nosotros de que nos gusta , de lo que detestamos, es como si el mundo se detuviera cuando estoy con él, aun no le he dicho que soy hija de un alfa ni el nombre de mi manada, no quiero asustarlo, mi padre tiene fama de ser temerario y lo que menos necesito es que me espante a mi primer novio, porque ahora somos novios, las cosas se han dado tan rápido, pero estoy feliz jamás me había sentido de esta manera, incluso creo que lo amo. Incluso hemos hablado de su lobo Sax, la mía aun no llega, pero me dice que Sax adora mi aroma. Estoy saliendo de la pack house cuando me topo a mi odiosa prima, tan bien que estaba mientras ella no estuvo aquí, —Hannia, a ¿adónde vas? — me dijo gritándome. —Y desde cuando tengo que d
EN EL LAGO CHANEK HACE UNAS HORAS —¡Max! Te amo tanto, este tiempo que hemos estado juntos, me he dado cuenta, de lo importante que eres para mí, quien iba a pensar que ese chico solitario, me volvería loca — le dije con una sonrisa en mi labios. —La verdad no eres la única sorprendida, no te voy a mentir realmente nunca pensé que llegaría a ser hombre de una sola mujer, no me malinterpretes, pero era un mujeriego, y digo lo era en tiempo pasado porque desde que te conocí, todo eso cambio, yo cambie, tú eres todo lo que alguna vez soñé y que me rehusaba a tener, el depender de alguien para ser feliz, la verdad la idea no me entusiasmaba para nada. —Max y si encuentras a tu mate, que pasara con nosotros si yo no soy tu mate, apenas cumpliré 16 años, aún faltan dos años para que podamos saber si lo somos— le dije preocupada y baje la mirada. —No me importa, s
La hora había llegado y estaba tan nerviosa, Katerina se adelantó y yo estaba por salir, pero tenía la necesidad de escuchar la voz de Max, tome mi celular y marque su número, pero no contestaba, seguía sonando y sonando y nada. —Ani, estamos listos, anda no hagamos esperar más a tus invitados— dijo mi hermano extendiendo su brazo para que pudiera tomarlo con mi mano, me di por vencida y deje mi celular en mi cama. Caminamos hasta las escaleras y cuando finalmente llegamos todos me estaban viendo, podía sentir como mis manos temblaban, está muy nerviosa, mi hermano tomo mi mano y se acercó a mi oído, —no tengas miedo, Ani, no te dejare caer, te lo prometo—me dijo con una sonrisa y sabía que lo decía en serio. Respire profundo y mire a mi alrededor, pude ver a mis padres y los mire con una sonrisa, —estoy lista, vamos— comenzamos a bajar y los invitados empezaron aplaudir, no estaba costumbrado a este tipo de atención, la verdad odio ser el cent
UN DIA DESPUES Por fin hoy, Hansen acepto escucharme, así que estoy afuera de su oficina en la estancia esperando a que me llame, todos están con él, para escucharme y darme una oportunidad de defenderme. —Todavía no te das por vencido, ella no te va a perdonar, deberías olvidarte de esa tonta — dijo Alexia, que venía caminando hacia a mí. —Que haces aquí, no quiero que te me acerques, te dije que lo nuestro termino, no puedo creer lo que hiciste el día de la fiesta, lo bajo que has caído, como supiste que Ani y Hannia eran la misa persona. —Porque después de que hablamos, simplemente ate cabos, prácticamente me estabas describiendo a mi prima y se dio la oportunidad de seguirla un día que la vi salir al bosque, precisamente un día antes de su fiesta y la seguí, no sabes la rabia y los celos que me dieron de verla en tus brazos, cuando soy yo la que debe estar cerca de ti no era idiota.
Sali de mi cuarto, segura de mí misma y de la decisión que había tomado, las manos me sudaban y respiración era agitada, trataba de controlarme, respirando profundo, no iba a dejar que él se diera cuenta de lo que provoca en mí. A pesar de mi corta edad, siempre fui una mujer de carácter fuerte, demostraba que no cualquiera era merecedor de mí, con Maximo baje mi guardia, su mirada me cautivo, sus palabras y su cuerpo me hicieron sentir cosas que jamás experimente. Fui una estúpida por dejarme llevar, pero ahora he pensado bien las cosas, gracias a lo que mi madre me dijo, creo que es lo que debo hacer, solo tengo que ser leal conmigo misma y con nadie más. Camine hacia el jardín, donde Maximo estaría esperándome pude verlo caminando de un lado a otro, se veía que estaba nervioso, se llevaba las manos a su cabello, que se veía bastante despeinado, posiblemente por la presión que sentía en este momento. Es tan guapo, como