Hace más de 20 minutos que Rodrigo se fue a contestar una llamada y aún no ha regresado, lo cual em parece bastante extraño, estoy por terminar mi bebida y veo que un hombre coloca un vaso con algo que parece licor, en mi mesa y se sienta frente a mi mirándome.

—Hola preciosa, ¿Por qué tan solita? — me pregunto directamente, no se quien sea pero obvio no tomare algo que me traiga un desconocido, lo veo y trato de decirle que no estoy interesada.

—No se quien seas, porque evidentemente no te conozco y la verdad no estoy interesada, así que puedes irte. — le dije.

—¿Cómo sabes que no te interesa?, podríamos pasarla muy bien— me dijo y apenas iba a contestarle cuando vi que alguien, se le ponía en frente y le decía que se largara.

—Acaso no escuchaste, que te largues o te lo explico mejor— le dijo Maximo, casi gruñéndole y con su voz de alfa, el pobre hombre no tuvo más que irse corriendo.