Su padre piensa en ella a cada segundo, volvió a la empresa hace dos meses algo que a su hermano no le agradó mucho que digamos pero aún así tiene que aceptarlo ya que es el dueño de todo.
- Tienes que firmar estos papeles.
- ¿Y la secretaria donde está? Esto le corresponde a ella.
- Está fuera, pero quería verte, saber cómo te sientes, tengo derecho a preocuparme por mi hermano ¿no?
Antonio sólo le sonrío y firmó los papeles del sobre sin apenas leerlo, justo ese día no tenía ánimo de nada, ya hacía ocho casi nueve meses que no estaba con su
~Kendal~Estoy cansado de todo, he pasado siete meses con ella en aquel cuchitril donde ella sólo podía moverse dentro de esas cuatro paredes y después dos meses mientras preparaba todo para su regreso en la cabaña, donde me di cuenta lo que en realidad siento por ella y si, me enamoré como un loco de Blanca Allendi algo que se podría decir que es pecado pero, no lleva la sangre de Antonio Allendi por lo tanto no es sobrina de Samuel Allandi ese hombre el cual tengo en frente gritándome como sólo él lo sabe hacer y que dice llamarse mi padre.Me molesta mucho siempre que me llama Sam o Samuel y lo sabe perfectamente.- Mi nombre es
Me tiro en la cama solo sacándome la corbata y al cerrar los ojos lo único que puedo ver es aquella noche de tormenta.- Kendal, Kendal.Me despierto y escucho la voz de Blanca desesperada tocando mi puerta y a lo lejos puedo escuchar uno que otro trueno, se me dibuja una sonrisa porque sé que tiene miedo, me lo dijo antes de irnos a nuestras habitaciones que no le gustaba la tormentas, simplemente pensé que no era para tanto.- Tranquila, no pasa nada, es sólo la tormenta.Le digo abriendo la puerta y el impulso que tuvo de abrazarme h
Escucho toques en la puerta y me levanto para abrir, la veo a ella parada del otro lado mirando sin entender nada sobre mi reacción. - ¿Puedo saber que te pasa? - Es la pregunta que me estaba esperando desde que entré a esta habitación y no a la de ella que últimamente estábamos compartiendo.- Llegó la hora.Le digo y la miro esperando su reacción y lo único que hace es darse la vuelta para bajar las pocas escaleras y sentarse en el sillón individual. Bajo detrás y me pongo de cunclilla delante de ella.- Blanca te lo había dicho, te dije que aquí dudarias menos que lo que duraste allí.
Empiezo a abrir los ojos por la luz que entra en la ventana y al buscarlo con en la cama mientras extiendo mi brazo no lo siento, abro los ojos por completo y algo que me hace opresión en el pecho.Me levanto y lo busco en el baño pero no está, bajo corriendo y todo huele a café y me hace sentir alivio, voy a la cocina con una sonrisa en mi cara pero se borra al no encontrarlo.Miro a todo lado, aquí no es fácil perderse ya que la cabaña es pequeña . Habrá salido como siempre. Es mi pensamiento al buscarlo dentro de la otra habitación y no encontrarlo.Hago lo de siempre, ducharme, vestirme, desayunar y después salir a correr un po
Jamás te haré una PromesaQue no pretenda CumplirY todo lo está cumpliendo, pero nunca me dijo que me dejaría sola por tanto tiempo, que desaparecería sin decirme nada.Me levanto y apago la música con rabia, subo y me pongo ropa de deporte y salgo a correr, ya no soportaba estar ahí dentro y menos después de volver a escuchar esa canción donde claramente dice que me ama.¿Por qué lo voy a odiar? Esa es la pregunta que no sale de mi cabeza, no veo lógica el odiarlo después de como me trato allí y nunca permitió que me hicieran daño y mucho menos p
~Kendal~Hoy es el gran día, hoy regresará con el tío y por fin el tío dejará de sufrir por no tenerla junto a él, se merecen esta Navidad juntos y sin que nadie se meta entre ellos y de eso me encargo yo.- ¿Por qué te vas?- Tío, ya escuchaste la llamada, tengo que regresar.- Pero otro puede estar por ti, vamos a pasar estas fiestas juntos.- Esa persona que estaba por mi tuvo un accidente y por lo tanto tengo que regresar.<
Diez de la mañana y Antonio no deja de dar vueltas por toda la casa dando órdenes de que todo esté perfectamente bien ordenado aún sabiendo que a su hija le da igual el orden, pero después de recibir la llamada del comandante Fernández para avisarle que tenían una pista completamente fiable sobre el paradero de Blanca, algo que a Antonio le volvió loco de alegría, no quería dejar todo descuidado y que su hija tenga el mayor recibimiento, ahora si tenía más esperanza de volver a tener a su pequeña junto a él.En poco tiempo estaba organizando una fiesta junto a nana para recibirla en la casa con la mayor alegría que había tenido nunca.- Esto no puede estar aquí, cambiarlo de lugar por favor.
~Blanca~Todo el camino mirando por la ventana y pensando en él, en Kendal, en que ya no lo volveré a ver, aunque.... cuando me vuelvas a ver me odiaras.... recuerdo esas palabras y aún él diciendo que lo odiare me da un poco de esperanza para volverlo a ver, se que el comisario está hablando pero no presto atención a lo que me dice.- Blanca, ¿Te encuentras bien?Agarra mi mano logrando que salte en el asiento y aparte mi mano de inmediato, me miró extrañado y puedo jurar que está creyendo que me han hecho daño.- Si, estoy bien. Es sólo que no me creo que ya estoy de regreso.