“Sophie es lo suficientemente madura como para entender que solo son negocios. Necesitamos tu talento en Diseños Culto, y puedo hacer que tu matrícula de la Universidad sea cubierta por la compañía”, él me dice, y probablemente él sabía que me negaría al abrir la boca, así qué él levantó su mano. “Qué podrás pagar de vuelta una vez que obtengas tu título”, añade con una ligera sonrisa.“Cole, no lo sé”, susurro, dejando caer mi mirada, y él desliza sus dedos bajo mi barbilla y la levanta, para que mis ojos se encuentren con los suyos. “Lo pensaré”.“Tengo un vuelo a Dubái mañana por la tarde para presentarles tu diseño. Si decides aceptar mi oferta, reúnete conmigo en la pista a las dos”. Asiento con la cabeza.Cole mantiene sus ojos fijos en los míos. “¿Por qué no me mostraste este diseño?”, él pregunta, señalando la pantalla. Dejo caer mi mirada y me encojo de hombros.“Porque no pensé que fuera lo suficientemente bueno. Solo estaba jugando con el software para familiarizarme un
“Estoy de acuerdo con Aimee. No sé qué le hiciste a ese hombre con tu vagina de oro, pero está enganchado a ti, nena”, dice Jo y se echa a reír mientras tomo un cojín del sofá y la golpeó con él.“Cállate. Él no está enganchado a mí. Si me ‘amara’ o estuviera ‘enganchado’ a mí, ¿por qué no me eligió? Él dijo que la ama con todo su corazón pero que solo me quiere a mí. Solo piensa con su amiguito de abajo y nada más. Probablemente ya está aburrido de Sophie y está buscando alguna diversión. Eso es todo lo que soy para él, un buen rato”, digo amargamente, tomando un poco de helado y comiéndolo. “Soy una chica para pasar un buen rato”, murmuro miserablemente dentro de mi tarro de helado.“Oh, por favor, si alguien es la chica para pasar el rato, es esa bruja Sophie. Recuerda mis palabras, ese chico será tuyo”, declara Aimee y se sienta hacia delante, aplaudiendo. “¡Ahora! Vamos a empacar para Dubái, porque sí vas a ir”, ella dice, saltando sobre mis piernas y tirando de mi brazo para le
Ella vino.Cuando vi que el taxi se acercaba a la ventanilla y Shayla salía, mi corazón dio un vuelco de la emoción. No puedo mentir, me preocupaba que ella no apareciera. Faltaban diez minutos para las dos y no había llegado. Había perdido toda esperanza hasta que vi el taxi. Ahora está sentada frente a mí, acurrucada en el asiento de cuero leyendo un libro. Despegamos hace cuatro horas, y Dubái está a ocho horas de Londres. No dejo de mirarla de reojo por encima de la computadora portátil que tengo sobre la mesa. O ella está demasiado absorta en lo que lee o es buena fingiendo estar distraída. Me recuesto en la silla, me muerdo el labio y miro por la ventana, observando el cielo azul y las nubes de abajo.Dejo que mi mente viaje hasta la última vez que ella y yo estuvimos en este avión volando a Niza. Daría cualquier cosa por volver a ese día y revivir toda esa aventura con ella de nuevo. Hice algo un poco insensato, y no sé si contárselo a Shayla sin arruinar todo el viaje para no
“Sí”, ella responde de golpe, y yo parpadeo y la miro. Todavía no había terminado de decir la maldita pregunta. Sacudo la cabeza y deslizo el anillo de diamantes en su dedo, ella llora y se lanza hacia mí, presionando sus labios contra los míos. Le devuelvo el beso durante un par de segundos y ella envuelve sus brazos en mi cuello, abrazándome. Apoyo mis brazos alrededor de su pequeña cintura y miro distraído a la pared de enfrente. ¿Acabo de comprometerme?“¿Señor Hoult?”. Parpadeo y miro a la azafata que me tiende comida. La tomo y sonrío dándole las gracias. Miro a Shayla, que sacude la cabeza cuando le ofrecieron la comida. “Puedes dejarlo aquí, ella lo comerá”, le digo, y Shayla me mira y frunce el ceño.“No tengo hambre”, ella me dice y vuelve a leer su libro. Suspiro y cierro la computadora portátil antes de inclinarme y arrebatarle el libro de las manos. “¡Oye!”.“Vas a comer, y es definitivo”, le digo con firmeza, y ella se incorpora y me mira, entrecerrando ligeramente los
“¿Normas?”, ella entona, y yo asiento, apoyándome de nuevo en la mesa, y ella hace lo mismo, escuchando atentamente.“Sí, las demostraciones públicas de afecto están prohibidas cuando estás fuera de casa. Si estás casado, pueden ir tomados de la mano, pero eso es todo. Dos personas que no están casadas no pueden tocarse en público o compartir una habitación de hotel. Si te atrapan infringiendo las normas, te arrestarán, y es hasta un año de prisión”, le explico, y los ojos de Shayla se abren de par en par.“¿Un año? Eso es un poco extremo”, ella murmura, sacudiendo la cabeza. “Es una lástima para los que vienen como pareja no casada, imagínate tener que quedarse en habitaciones separadas mientras están de vacaciones”. Ella sonríe.Yo sonrío asintiendo, “Dubái no es tan malo como Abu Dabi; es más relajado; no les importa mientras no tengas sexo en público. Puedes hacer lo que quieras en la intimidad de tu habitación de hotel”, le explico, y Shayla asiente mordiéndose el labio inferio
Ah, ¿Qué estoy haciendo?Es en momentos como este cuando realmente cuestiono mi integridad cuando estoy cerca de este hombre. Hago cosas que nunca haría normalmente, y está totalmente fuera de mi control. Mi cuerpo actúa por sí mismo, y aunque mi cabeza me grite que me detenga, algo en mi interior no escucha. Como en este momento, debería apartarme, incluso acercarme tanto a él está mal, es tan inmoral porque ahora le pertenece a otra persona. No es que fuera mío, para empezar, pero al menos era soltero, y lo que hiciéramos no le hacía daño a nadie. Me gustaría encontrar una manera de resistirme a él, pero es tan difícil porque no se siente mal, se siente tan bien, estar tan cerca de él, se siente como si fuera la cosa más natural del mundo.Dios, por favor ayúdame a encontrar la fuerza para poner fin a esto antes de que haga algo estúpido y deje que me bese.“Maldición, Shay, si no te apartas ahora mismo, voy a besarte”, lo escucho murmurar. Siento el calor de su aliento en mis lab
“Puedes quedarte con la cama carrusel. Te conozco. Te despertarás temprano y me harás girar”, digo, caminando hacia la ventana y escucho a Cole reírse detrás de mí.“Me conoces demasiado bien, cariño”, él dice, caminando para ponerse a mi lado. “Vaya vista, ¿eh?”.Asiento con la cabeza mirando la vista del océano y la isla de palmeras. “Es precioso. No puedo esperar a verlo por la mañana. Puedo quedarme mirando esa vista todo el día y no aburrirme nunca”, suspiro, y Cole asiente mirándome.“Conozco ese sentimiento”. Giro la cabeza y lo miro. Siento que mis mejillas se calientan bajo su mirada y desvío la mirada antes de que él se burle de nuevo de mí.“¿Estás cansado?”, le pregunto, y él sacude la cabeza.“No, para nada. ¿Quieres salir un rato?”, él sugiere, y yo asiento con la cabeza, sonriéndole. Cole me devuelve la sonrisa y asiente también. “Bueno, ¿por qué no nos cambiamos y vamos a explorar un poco? Hay un lugar al que quiero llevarte”.“Está bien”. Me dirijo a la segunda h
“Es un recorrido privado, así que solo somos nosotros”, me dice Cole, mientras me guía por las escaleras. Asiento con la cabeza en señal de comprensión y veo una mesa para dos en la cubierta superior. “Espero que tengas hambre”.“Me muero de hambre”. Sonrío y tomo asiento cuando me acerca la silla. “Gracias”. Miro alrededor del barco. Era tan bonito y romántico. El barco empieza a alejarse de la marina, mientras esperamos la comida, bebemos vino y escucho a Cole hablar de los edificios mientras pasamos por ellos. Me encanta lo apasionado que es con su trabajo. Sinceramente, es muy encantador. Cole deja de hablar cuando se da cuenta de que lo observo: “¿Ahora quién mira a quién como a un cachorro que quiere ser acariciado?”. Sonrío y me encojo de hombros.“Me encanta escucharte hablar de arquitectura. Hablas con tanta pasión al respecto que no puedo evitar sentirme absorta”, le digo con seriedad, y él me sonríe afectuosamente y toma mi mano con su pulgar rozando mis nudillos.“Es m