El aviso de Hannah sonaba extrañamente serio y lleno de preocupación. Madeline miró inconscientemente a los encantadores ojos en el espejo retrovisor. Luego, dijo con una sonrisa, “este es tu cuñado. Es muy considerado y cariñoso conmigo. No me hará daño”.

“Nunca puedes saber lo que está pensando. Hermana, no te dejes engañar por la apariencia de una persona”, le recordó Hannah de nuevo con solemnidad.

Madeline respondió con una sonrisa, “lo sé, tendré cuidado”.

Al escuchar la respuesta de Madeline, Hannah parecía muy satisfecha y contenta.

Le dió un apretón a la mano de Madeline y apoyó alegremente su cabeza en el hombro de Madeline. “Hermana”.

Cuando escuchó a Hannah llamarla ‘hermana’, Madeline tuvo sentimientos encontrados.

Poco después, el coche se detuvo en el estacionamiento de la Vieja Mansión Whitman.

Jeremy salió del coche primero y ayudó a Madeline a abrir la puerta.

Madeline estaba a punto de salir del coche cuando Hannah miró a Jeremy con actitud de alerta.

“Herma