Él estaba fantaseando con la idea de que Madeline hubiera vuelto a la orilla. Después de todo, habían pasado dos horas, así que si ella seguía en el río...

No.

Jeremy dejó de pensar en ello. Sin embargo, cuando miró el interminable río conectado al mar, no supo qué hacer.

Se paró en medio de la lluvia en pleno invierno y miró el río frente a él mientras gritaba el nombre de Madeline por dentro.

Karen estaba esperando noticias en casa. Lo que más anhelaba en ese momento era que Jeremy volviera a casa con Madeline, pero estaba empezando a oscurecer y Jeremy aún no estaba en casa.

Karen siguió esperando y, sin saberlo, ya era de día.

Cuando estaba a punto de ir a buscar a Jeremy para preguntar por la situación de Madeline, recibió una llamada extraña.

Preocupada por si se perdía alguna noticia sobre Madeline, contestó el teléfono. Sin embargo, la persona que estaba al otro lado dijo que era un periodista.

Karen no estaba de humor para hablar con el periodista, así que quiso colgar