Mi vista cambió del alfa al ex beta y asentí, sabiendo exactamente por qué Gilliard dijo que no podíamos viajar juntos."Sería hacer alarde de nuestra relación frente a personas que solo creen que el rey y yo estamos destinados", dije, encontrando la mirada de sorpresa de Gilliard pero igualmente impresionado de que yo haya entendido. "Lewis, fuiste la mano derecha del rey durante años, pero de repente estás aquí, conmigo. Nuestro olor ya es bastante malo, pero si nos presentamos ante una manada pidiendo aceptación y ayuda, sería como un puñetazo en la cara"."Precisamente... Ambos tendrán que ir, pero ambos tendrán que ir a diferentes distritos. La Reina Luna tiene razón, Lewis, tú eras el beta de la realeza, tienes las mismas posibilidades de conseguir que la gente se sume a la rebelión, pero por diferentes razones", dijo Gilliard, metiendo la mano en su escritorio y sacando una pequeña carpeta y la deslizó hacia Lewis después de revisar su contenido. "Tienes que explicar por qué d
"¡¿Yo?!". ¿Acaso él pensaba que lo iba a dejar ir solo? Ni hablar. Le gustara o no, él también corría el peligro de ser atrapado."¡Tú también eres un objetivo enorme, sabes! Eras el beta de la realeza, la mano derecha del rey, y en lo que respecta a algunos licántropos, también traicionaste a los de tu especie. Así que sí, te llevarás a alguien contigo". Él me sonrió y se rio entre dientes ante mi declaración, puso su mano en la mía y me derretí al tacto."Muy bien, mañana por la mañana ambos habremos elegido un compañero para que llevemos, ¿trato hecho?". Asentí con la cabeza y sonreí, eso funcionaría para mí, y yo sabía exactamente a quién estaba eligiendo, si no podía tener a Clarke, entonces Lewis podría."Ah, también hemos mandado a hacer una armadura para los dos, hecha de fibra a prueba de balas, que también bloquea las mordeduras de lobo y las garras... También tienen un par de botas con puntas de acero por seguridad, supongo que ahora sería el momento perfecto para usarlas
Punto de vista de Dylan ¡CRACK! "¡Ouch!", un pequeño grito lleno de dolor salió de mi boca mientras corría hacia mi hermano, justo a tiempo para recibir el latigazo que estaba destinado a él. "Ese niño, acaba de menospreciar por completo al alfa de la manada de tu distrito, hazte a un lado". Uno de los guerreros de la manada sujetaba un largo y grueso látigo en la mano mientras me miraba y luego echaba un vistazo detrás de él para mirar a mi hermano. "Tiene seis años. No era su intención...", me interrumpió otro fuerte chasquido. Una sensación de ardor se esparció en mi mejilla, me llevé la mano a la cara, mientras inspeccionaba la herida, miré los dedos que habían rozado suavemente mi mejilla y noté que una línea de sangre los cubría. Mi cara sangraba. "¿Deseas hacer esto un castigo público? Puedo asegurarte que no acabará bien para ti si no te apartas, humano". No quería recibir otro castigo, ya había recibido el último hace casi 2 meses, y tardé semanas en curarme, mi e
Punto de vista de Dylan Abrí los ojos con dificultad mientras me sentaba. Me dolía el cuello de estar acostada boca abajo sobre una dura mesa de madera y me ardía la espalda. Bajé la mirada hacia mi torso desnudo y encontré un grueso vendaje, perfectamente enrollado alrededor de todo mi torso, que cubría también mis pechos expuestos. Miré al exterior y vi que el sol ascendía lentamente, con un tono anaranjado que teñía el cielo de madrugada. Respiré hondo y dejé que mis pies asumieran mi peso, cayéndome casi al instante. Noté un pequeño vaso de agua a mi lado y lo tomé con la mano, bebiendo con avidez hasta la última gota. Al darme cuenta de que tenía que prepararme para ir a la escuela, me acerqué a escribir una nota para Sheila explicándole lo agradecida que estaba por haberme ayudado y adónde había ido. Subí lentamente la colina hasta mi casa, una vez dentro fui directo a mi habitación y agarré mi uniforme. Después de que los licántropos tomaran el control iniciaron la r
Punto de vista de Dylan "¿Mamá? ¡Ya llegué!", grité en cuanto por fin llegué a casa. Casi al instante ella bajó corriendo las escaleras de nuestra casita, rápidamente me envolvió en sus brazos con lágrimas en los ojos . "Dylan, yo... Siento mucho lo de ayer, estuve sentada contigo durante horas, pero no te movías, tenía que volver a casa con Freddie". Lloró en mi hombro mientras yo solo ponía los ojos en blanco. No soy muy de abrazar, siempre me veo rara. También es muy melodramática a veces. "Mamá, estoy bien". Mi madre finalmente dejó de sollozar mientras me soltaba lentamente secándose los ojos. "Tu padre estaría muy orgulloso de la mujer tan fuerte en la que te has convertido". Sonreí antes de girarme para subir las escaleras. "Dylan… Hice tu favorito". Ya podía oler el caldo de carne que estaba haciendo. El aroma flotaba por toda la casa. Era muy raro que consiguiéramos la comida para hacer caldo de carne, pero sonreí y asentí con la cabeza sabiendo que ella debía haber
Punto de vista de Dylan Después de una larga noche y una mañana aún más larga, por fin estábamos todos de pie en el pasillo del colegio esperando a que llegaran los gemelos. "¡Mío!". Todos los que estaban parados en el pasillo se tensaron, como éramos mayores, Nick y yo estábamos ubicados hacia el final de la fila de humanos. Todos los humanos apareados estaban situados justo enfrente de sus parejas lobos de sus años. Permanecimos en silencio y quietos mientras Arya caminaba por el pasillo y se detenía directamente frente a Nick. Sus ojos se abrieron de miedo, inseguro de si mirar hacia arriba o mantener la cabeza baja. "Mírame a los ojos, pareja". Me miró sutilmente, como preguntándome qué debía hacer. "He dicho que me mires a los ojos". Subió lentamente la vista para mirarle la cara. Yo misma eché un vistazo para ver sus ojos negros por la lujuria. "Yo... no puedo... Quiero decir... erm". Antes de que pudiera murmurar algo más, dos lobos de enfrente, lo agarraron de la
Punto de vista de Dylan "Ay, no tan fuerte". Me quejé mientras la enfermera me limpiaba la nueva herida con un antiséptico. "Si hubieras mantenido la boca cerrada, esto no habría pasado". Me giré hacia la derecha mirando por la ventana las pocas nubes que flotaban en el cielo azul. "Como he dicho, estoy orgullosa de ser humana, y ahora todo el mundo sabe lo que soy". Apreté el puño mientras la enfermera empezaba a vendarme el antebrazo. Habían pasado ya unas cuantas horas desde el incidente en el pasillo, y me había visto obligada a acudir a la enfermería después de que, al intentar limpiarme la herida con agua del grifo, no dejara de sangrar. "Eres imposible. ¿Puedes intentar no meterte en problemas? Por un día, es todo lo que pido". La enfermera de nuestra escuela es un lobo, ella es uno de ellos. Sin embargo, odia la forma en que nos tratan a los humanos, cree que todos deberíamos vivir en paz con los mismos derechos. Como si eso fuera a suceder. "Todo lo que he h
Punto de vista de Dylan Durante la última semana me he portado horrible, en clase he vociferado mis opiniones, he insultado al menos a todo el mundo en cierta medida, no me han importado las consecuencias, y ciertamente no he pensado en ellas. No he visto a Nick desde que fue emparejado, y para empeorar las cosas hoy fue la visita de la realeza. Oh sí, los hombres lobo y los humanos apareados pasaban cada minuto preparándose para conocer a su majestad real, el rey de los lobos. Los humanos no apareados, sin embargo, preferían clavarse alfileres en los ojos. "Dylan, baja ya... vas a llegar tarde". Tenía razón, andaba perdiendo el tiempo esta mañana, realmente no me importaba nada hoy, me eché un último vistazo en el pequeño espejo y suspiré cuando mis ojos se encontraron con mi marca recién descubierta. Tenía moretones alrededor de las letras y aún estaba muy sensible al tacto, pero ya se estaba curando. Bajé las escaleras y me encontré cara a cara con mi mamá, quien estaba a