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Siento mis ojos pesados, el sueño es largo y tirante, estoy junto a Franco sobre la moto, algunas personas están llegando al instituto, miro la fachada, es grande, muy grande en comparación al que voy yo. Franco está muy concentrado fumándose un cigarrillo, yo estoy intentando no cambiar de decisión e irme de aquí. El viaje fue largo, un tanto incomodo por venir en la moto, tengo hambre, sed y mucho, pero mucho sueño, un ligero bostezo hace que mis ojos se humedezcan un poco y llevo mi mirada al frente nuevamente.
Risas estruendosas, murmullos y palabrerías a mi alrededor, sé que estoy echa un completo desastre, mi cabello está recogido, pero algunos mechones sobre salen de este. Mi maquillaje lo más seguro esta corrido, mi cara de sueño ha de ser muy notoria y para ser sincera Franco se ve más fresco que yo y en él no se fija
– ¡Dante! ¡Dante!– ¡¿Qué?! –continuo caminando con prisa, intento limpiar a un lado de mi labio, pero me duele como un demonio. – ¡Ya dejen de venir detrás de mí! ¡Déjenme solo! ¡¿QUIEREN!? Pero me detengo abruptamente cuando Sam aparece delante de mí, colocando una mano en mi hombro, este me mira fijamente, luego es Zoé quien aparece y ahora ambos me dedican la misma mirada, pesar, vergüenza, la jodida lastima en su máximo esplendor.–Bro, ¿Qué crees que haces? – ¿Qué hablas? –digo con enojo, escupo a un lado al sentir el sabor metálico de mi sangre. – ¿Qué hice mal? ¿Qué jodido sermón me dirás? ¿Qué fue mi culpa? ¡Ella fue quien ocasiono todo esto! ¡No yo!
En el trayecto de subir a mi habitación, papá venia bajando y simplemente lo ignore, lo menos que quería es que me viera llorar. A él le preocupa cuando yo estoy de ese modo, así que preferí simplemente entrar en mi habitación y cerrar la puerta con prisa, me dirijo a toda velocidad al cuarto de baño y coloco el pestillo.No tenía idea que esto de romper con alguien con quien te sentías tan feliz fuera tan duro, si, sé que es algo un poco difícil, ya que pasas acostumbrarte con esa persona que luego el simplemente pensar en estar sin ella es realmente muy, muy duro. No escuchar su voz, no saber cómo va su día, no verle, no escuchar su risa o simplemente escuchar las tonterías que expulsa de sus labios, los besos y los abrazos, el contacto físico, todo, absolutamente todo.Me desvisto, abro la ducha con el agua tan helada y entro a esta, empap&aa
Franco Hood (Segunda parte)No debo dejar a un lado el hecho de que las manos las tengo sudorosas, estoy aparcado frente a su casa y solo espero por ella, me pidió dos minutos y para mi parece un eternidad. Luego escucho su voz, despidiéndose de quizás su madre y toma camino directo hasta el coche, para el día de hoy preferí este medio de transporte que la motocicleta, vamos a un lugar algo alejado y la verdad que no quisiera ir con ella detrás de mí y con la brisa nocturna que se vuelve insoportable.Al verla entrar, cerrar la puerta, acomodarse en su puesto y colocar el cinturón puedo notar que esta quizás un poco más tranquila. Allison termina de acomodarse en su lugar y voltea a mirarme, sonrisa de lado, un semblante entre triste y calmado, extiende su mano y un envase de plástico esta entre ambos, termino por tomarlo y el miro con confusión.&n
El sonido de las motos siendo encendidas no tardan, observamos a todos los que respaldaban a German, se van uno a uno, sin siquiera darle la cara al que hasta hoy fue su líder. Franco observa a su hermana, quien le da la espalda a German y camina hasta nosotros, pero su desvió nos toma por sorpresa al ver que va hasta Tadeo, toma su mano y ambos en silencio se alejan de nosotros. Selena tiene una sonrisa triunfal, me mira, me guiña y se marcha con Claire y Nick, observo a Kenay junto a Franco estos hablan algo muy rápido y el moreno termina por marcharse junto a los suyos.A medida de que pasan los segundos, vamos quedando solos, hasta que quedamos Franco, German y yo. El ex mejor amigo de Franco solo mantiene su mirada fija en el suelo, el pelirrojo se acerca a él, coloca una mano en su hombro y este vuelve a mirarlo, ambos se detallan, se miran fijamente.–Es mejor que te vayas del pueblo –dice el pelirrojo, German aturd
Meses después.– ¡Allie! Trae el biberón de Chloé –con prisa voy en busca del biberón de la bebé y antes de salir de la cocina mamá me detiene con otro grito. –Y también el de Luigi, ha despertado también –doy retroceso, mi nana me da el biberón y sonríe.–Esto es para locos –digo, ella sonriente asiente.–Pero cuanta felicidad nos han dado, ¿No crees? –asiento y le doy un beso rápido en la mejilla. –Que tengas un buen viaje de fin de año escolar, mi niña.–Gracias nana, no me echen de menos este fin de semana.–Aunque no lo creas, lo haremos, que te diviertas.– ¡¡Allie!! –el grito de mamá me hace saltar del susto y salgo disparada hasta la sala.Allí la encue
Siento las manos heladas de un momento a otro y un golpecito doloroso en mi pecho, es como si sintiera que toda el alma se me salió del cuerpo y no tengo ninguna forma de hacerle volver.Allí esta, saludando a su ex grupo de futbol, todos sonríen al verlo, yo no me puedo creer lo cambiado que esta. Su cabello liso y castaño ahora esta abundante, un par de semanas mas y lograra llegarle un poco en los hombros, tiene la mitad recogido en una coleta, tiene una ligera barba, pero notoria, ha trabajado su cuerpo de una buena forma y la verdad es que se ve más, adulto.Su sonrisa es como si iluminara todo el lugar y no hace falta una jodida fogata para la noche. Brad ríe con él, ambos se detallan, estos meses sin verlo, sin siquiera escuchar su risa o su voz, me han hecho saber que aunque no lo pensaba y no lo nombraba, me afecta en grandes cantidades de tan solo mirarle. Acomodo mis lentes, le miro por unos segu
Me miro al espejo, una sonrisa se expande en mis labios, me veo de pie a cabeza, me giro un poco, derecha a izquierda, paso las palmas de mi mano por mi abdomen y mis muslos. Intento mantener el vestido de satén color lila impecable, tiene un no tan pronunciado escote, pero si deja ver un poquitín la línea entre mis senos, tiene una abertura algo pronunciada en mi pierna izquierda, pero solo es notoria cuando estoy caminando, un escote corto en la espalda y es de tirantes.Unas sandalias de tacón soportable, ni tan altas ni tan bajas, plateadas y todos mis accesorios hacen juego con mis sandalias. Mi cabello está en un peinado recogido, pero muy sencillo que mamá hizo para mí, el maquillaje fue mi obra y creo que he aprendido mucho de la mejor, Selena.Escucho el tocar de la bocina del coche de la ya mencionada chica y en cualquier parte del mundo sabrán que es ella. Toca como una loca y con prisa to
Las fotos para el álbum de promoción, Dante siendo parte de todos estos bonitos recuerdo, para este momento ya todos se encuentran cansados por tanto bailar, así que en el momento adecuado el Dj coloca música suave para las parejitas y yo me quedo sentada, tomando algo de ponche para calmar la sed que ahora tengo.– ¿Vamos? –volteo a verle, asiento levemente.Ambos nos colocamos de pie, él toma mi mano y cuando creía que íbamos a la pista noto que toma mis cosas y nos escabullimos entre todos. Es quizás media noche y la fiesta es hasta la una y treinta de la mañana, luego todos irán a casa de Luhan donde se terminara de disfrutar.Dante y yo salimos del gimnasio, en completo silencio y con solo el sonido de nuestros pasos logramos salir a las afueras, allí notamos que hay otros compañeros, muchos disfrutando de la brisa nocturna, otros simplemente pasando el ra