***NARRA GRACE***Monterrey, Nuevo LeónEl ánimo lo tenía por los suelos, no me podía sentir de esa manera, si mañana iba a ser el día que más había anhelado en la vida y por supuesto que no iba a dejar plantado a mi amado Nathan en el altar, yo ya le había dado mi palabra, de que nos íbamos a casar, lo de Alma Rosa era una cuestión aparte.–No me siento mal amigo, tranquilo – Lo abracé – Bueno, no de salud, pero sí de ánimo.Cómo me iba a sacar yo todo este dolor que sentía, no iba a poder, sí Alma Rosa no llegaba el día de mañana, no creía qué nos viniera a visitar si no había asistido a la boda, para no vernos juntos entonces se privaría de conocer a su sobrino.–Entiendo Grace, entonces cuéntame ¿Qué te pasa? Cómo tu amigo Camilo, tengo que saberlo todo – Declaró Camilo – Por favor, dime lo que te tiene así, tan triste y hasta se ve, que has llorado.A Camilo, no le podía mentir, sí ya se había dado cuenta de que yo estaba llorando no iba a desmentirle, así qué le diría toda la ve
***NARRA NICK***Monterrey, Nuevo LeónEse día en el reclusorio, yo estaba de lo más molesto, pues mi disque amigo Camilo, no había venido a verme, desde que salió de este lugar, pues claro, debía estar feliz de estar con la mujer esa, con la que se había enredado, pero lo que hizo todo este asunto peor, era que, tampoco estaba aquí, mi Lu Fabiano, de ella sí, me extrañaba, que no hubiera venido y era como si la hubiera invocado, ante mi presencia, pues, uno de los guardias fue por mí, al patio, para decirme, que tenía una visita especial. –Me podría decir, por favor ¿Quién es esa visita especial, que tengo? – Pregunté un poco molesto.Me llevaba el diablo, estaba cada vez peor, estar encerrado me estaba provocando salir corriendo, a la primera oportunidad que me dieran, y las visitas eran escasas, así que pensé que tal vez Lu, se había acordado de mí, ya que no tenía otra cosa, mas importante que hacer.–No, eso lo descubrirá usted mismo y ahora cállese, no quiero que me cuestione,
***NARRA NICK***Monterrey, Nuevo LeónMe arrepentí de lo que dije completamente, pero ya no me podía retractar. Me era muy complicado, contener el odio que sentí y más que eso, el coraje por el hecho de saber, que Lu, mi mujer y la madre de mi hija y de mi bebé que estaba por venir al mundo, me había descuidado, por andar seguramente, ayudando a la idiota de Graciela y al infeliz de Nathan, para organizar la boda de sus sueños. –Nick, te pido que no le hables así a Lu – Me dijo Camilo, muy molesto – No seas tonto, no cometas el mismo error dos veces. No pierdas a la mujer de tu vida, por ser un loco, mala cabeza.–Tú ya cállate Camilo, que sí Lu, es una traidora y una mentirosa, tú eres otro igual a ella – Arremetí contra mi amigo – Es el colmo, que, en lugar, de estar viendo como sacarme cuanto antes de aquí, estén pensando en la boda de esos cabrones.Los dos, me miraban muy desconcertados. No podía creer esto, tampoco de Camilo. Tanto él cómo Lu, estaban más interesados, en la bo
***NARRA NATHAN***Monterrey, Nuevo LeónMe encontraba demasiado nervioso, ya se había llegado ese día especial, en el que me iba a casar con mi amada Grace. Estaba feliz y agradecido con Camilo y con Diego, por la despedida de soltero que habían armado para mí. Nos la habíamos pasado de maravilla, riendo y divirtiéndonos, bebiendo unos tragos, aunque no muchos, pues hoy, yo deseo estar al 100% para verme bien, para mi boda con la mujer que amo. Me hizo mucho bien pasar la noche de ayer, compartiendo con amigos y divirtiéndonos mucho. Me preocupaba, que Camilo, no apareciera aún, pues si no lo hacía, ¿Quién me iba a entregar a la novia?–Nathan, quédate quieto – Me dijo Diego – Si sigues moviéndote, solo te arrugaras el saco. Camilo, debe estar por llegar y también tus padres.Se me había olvidado por completo que les tenía que haber mandado la ubicación de donde iba a ser la boda, estaba muy despistado por los nervios, ya ni pude ver nada, de donde se iban a hospedar. Estaba hecho to
***NARRA NATHAN***Monterrey, Nuevo LeónCamilo, se fue a alistar para irnos a mi boda con Grace, yo estaba demasiado impaciente y emocionado, que ese momento llegara. Era el momento, que había estado esperando, por toda mi vida y al fin hoy, ese momento estaba por llegar. Me iba a casar con Grace y ya nada podía impedir esa boda, todo lo malo que habíamos pasado ella y yo, atrás había quedado ya. Hoy era el día, que nuestros sueños, se empezaban a cumplir, eso me llenaba de un sentimiento muy profundo, era un gozo estar a nada de convertir a la mujer de mi vida, en mi esposa.–Listo Nathan – Dijo Camilo – Vámonos, porque tienes que estar en el lugar de la boda, antes que Grace.Por supuesto que no quería llegar tarde, además el novio era el que tenía que esperar a la novia, no al revés, pero estábamos en la hora exacta, así que ya no había tiempo que perder. –Sí, no vaya a ser, que se te vaya a impacientar ella y se vaya – Dijo Diego – Vamos a casarte, Nathan.Que no trajera esas vi
***NARRA GRACE***Monterrey, Nuevo León Todos nuestros invitados nos pidieron, que nos diéramos un segundo beso, lo cual nosotros hicimos encantados. Nathan, me besó con toda la ternura posible y yo respondí encantada a su beso, pues lo amaba, por encima de todas las cosas y con todo mi corazón. Cuando nos separamos Nathan y yo del beso, todos nuestros invitados, se acercaron a nosotros, para felicitarnos, por supuesto, que los primeros en hacerlo, fueron los padres de Nathan.–Grace, Nathan, muchas felicidades – Nos dijeron Demetrio y Susana – Que su matrimonio, sea tan hermoso y sólido como lo ha sido el nuestro.Esas palabras me llenaban de dicha, ellos eran un matrimonio sólido, había respeto entre ellos y se veían que todavía se amaban, así iba a ser nuestro matrimonio, Nathan y yo, nos seguiríamos amándonos hasta el final de nuestros días.–Muchas gracias – Respondimos Nathan y yo.Me había dado tanto gusto que ellos hubieran llegado a nuestra boda, casi al último momento qu
***NARRA GRACE***Monterrey, Nuevo León Cuando Lu, ya se encontraba más tranquila, volví con Nathan y nos perdimos en un apasionado y largo beso. Estábamos felices, en esa noche, que era sólo para nosotros dos, por fin, se había cumplido el más grande sueño de la vida de ambos. Al fin, estábamos casados, felices y en espera de nuestro primer hijo. Nos sentamos a cenar, en la mesa de honor destinada a nosotros y era increíble, como nos sincronizábamos Nathan y yo, pues ambos, quisimos decir algo, justo cuando terminamos de cenar.–Grace, hoy me siento, como el hombre más afortunado del mundo, hoy nos hemos casado y es el día más feliz de mi vida – Dijo Nathan – Espero, de verdad, hacerte la mujer más feliz del mundo, porque te lo mereces.Y él también merecía ser feliz, después de haber esperado tanto el uno por el otro ya era hora de que los dos fuéramos recompensados, y este apenas era el principio de nuestros días llenos de felicidad.–Nathan, la mujer más afortunada, lo soy yo,
**NARRA NICK**Monterrey, Nuevo LeónEse día que Lu y Camilo, me vinieron a visitar a la cárcel, me quedé alterado y enojado, pensando en que ellos, ya debían estar disfrutando de la boda de la maldita de Graciela con el baboso de Nathan, mientras que yo, tenía que seguir estando en este lugar, que cada vez, me mataba más el encierro fatal, al que estaba sometido. Llevaba ya, demasiado tiempo aquí y necesitaba acción, por parte Lu y de sus abogados, claro en el caso, que ella realmente quisiera, que yo saliera de este maldito lugar. Salí al patio con los demás reclusos y traté de poner mi mente en blanco, pensando en otra cosa, cuando escuché esa voz, que yo tanto aborrecía, casi susurrarme al oído.–Hola Nick, luces muy atormentado – Dijo sínicamente Boris – Tal vez, yo pueda aliviarte en algo, mira ya que estaremos aquí recluidos por siempre, quiero que te hagas amigo de Jack.Su cercanía me estaba provocando urticaria, lo quería a metros de mí, y por ningún motivo me haría amigo d