Alessandro tomó de los glúteos a Pandora y la colocó encima de su boca, la felación fue lo suficientemente satisfactoria para la mujer; luego de esto se puso a espaldas del hombre mientras era penetrada de esta forma, empezó a brincar sobre el miembro erguido de su amante y los jadeos resonaban por toda la habitación.

Luego de colocarla en la cama boca abajo empezó a embestirla desde atrás, ella se aferraba al barandal que se encontraba en los pies mientras mordía la sábana. La puso al borde de la misma y estando de pie continuó con el vaivén de los movimientos, al finalizar la llevó a una silla en donde Pandora se apoyó y fue embestida de tal forma que no tardó en tener un orgasmo múltiple siendo sostenida por Alessandro.

_ Gatita, buenos días _ él le dió un beso _ como que hemos amanecido con las hormonas a mil por hora.

_ No te hagas la víctima que bien sabes que lo querías, no escuché que te quejaste en ningún momento, ¿O me equivoco?

Ambos rieron y se fueron rumbo al castillo ya