El cuerpo de Rania se sentía flotando hasta el séptimo cielo, sus mejillas estaban rojas y su corazón latía con fuerza. Se mordió el labio inferior con los ojos cerrados, solo la habían besado en la mejilla, ¿por qué su cuerpo reaccionaba así?

Una suave caricia en la otra mejilla hizo que Rania abriera los ojos, Edrick sonrió, tan dulcemente que Rania gritó aún más fuerte en su interior.

"¿Qué le gusta comer a mi amor?", preguntó Edrick de nuevo, el cálido aliento del hombre le hizo cosquillas en la mejilla a Rania, haciéndola sonrojar aún más como un cangrejo cocido.

Sonó la señal de peligro, ¡no puede ser, esto es demasiado peligroso! Rania alejó el rostro de Edrick, podría perder el control y volverse loca si Edrick seguía actuando tan dulcemente.

"¡Como sea!"

Rania se volvió hacia el lado de la ventana, le faltaba el aire, y su corazón latía cada vez más rápido.

"C-o-m-o-s-e-a."

Edrick lo deletreó, parecía pensar sin soltar la mano de la cintura de la mujer.

"¿Qué tal comida china